Más de la mitad de los padres ve insuficiente la cantidad de yogur en el menú escolar

Los padres y madres españoles ven insuficiente la cantidad de yogures que sus hijos toman en el colegio, por lo que más de la mitad, un 53,7%, desean que se incrementen. Esta es una de las conclusiones del Estudio sobre valores, creencias y hábitos del consumo de yogur por el público infantil en España, elaborado por la Asociación Española de Fabricantes del Yogur y Postres Lácteos Frescos (AEFY), que ofrece un diagnóstico de los hábitos de consumo de este lácteo en el contexto de los hábitos de alimentación infantil entre los niños y niñas de 3 y 14 años.

La investigación también revela la escasa presencia del yogur en los centros escolares, ya que solo un tercio de los menores, un 32,8%, lo toma, a pesar de que sus progenitores reconozcan su importancia para la dieta infantil.

Asimismo, este estudio de AEFY manifiesta la importancia del desayuno, la primera comida del día que debería aportar la energía y nutrientes necesarios para toda la jornada. En España, el 88% de los niños y niñas desayunan antes de ir al colegio y solo el 3% dice no hacerlo nunca. En este sentido, casi la mitad de los padres y madres considera que el yogur formaría parte de un desayuno equilibrado para sus hijos, ya que se trata de un alimento nutricionalmente completo, que gusta mucho a los más pequeños y que ejerce como facilitador para introducir otros alimentos adecuados para su dieta como son la fruta y los cereales. A pesar de este reconocimiento, son muy pocos los progenitores que se decantan por esta opción, solo uno de cada diez niños consume este lácteo en este momento del día.

Según la Federación Española de Nutrición (FEN), la dosis de lácteos recomendada para los más pequeños es de entre 2 y 4 al día, garantizando así la ingesta de los nutrientes necesarios para su correcto crecimiento y desarrollo. El yogur es uno de los lácteos más aceptados por los pequeños, conclusión que también se extrae del informe al considerar los padres y madres que es un alimento práctico. Además, su mezcla con frutas y cereales permite obtener una opción de comida completa en cuanto a aportación de nutrientes y facilita que los niños y niñas consuman estos alimentos que suelen ser más complicados de introducir.

Un desayuno saludable debería incluir un alimento lácteo, una fruta y cereales. El yogur es un alimento que facilita la introducción de la fruta en el desayuno, por ejemplo, ofreciendo un bol de yogur con fruta y cereales.

Escasez de yogur en los colegios españoles

El estudio de AEFY también constata que el yogur tiene una buena penetración en los hogares españoles, casi el 42% de los niños lo toma en casa entre tres y cinco días a la semana, siendo la recomendación de consumo de un yogur al día. No obstante, cuando se analiza la presencia de este alimento en el desayuno, vemos que tan solo el 16,5% de los niños y niñas lo consume en este momento del día. El número de menores que lo toman a diario es moderado, tres de cada diez, frente al 23,1% que lo consume al menos de tres veces a la semana.

El contraste lo encontramos al analizar el consumo de yogur en los colegios, al 32,8% de alumnos no se les ofrece esta opción de alimento lácteo. Siendo el yogur un alimento indicado para la dieta infantil, parte de las 2-4 raciones de lácteos diarios recomendados por los expertos, llama la atención que el 70,7% de los niños menos de 3 yogures a la semana en el colegio.

Esta escasez de yogures en los colegios contrasta con el deseo de más de la mitad de los padres de incrementar este alimento en los menús de los centros escolares. Esta menor presencia es más relevante en los centros públicos, que dan menos de tres yogures a la semana en un 76,6% de los casos. A la pregunta de por qué se reclama ese aumento de consumo de yogur en los colegios, más de la mitad de los padres lo relaciona con la contribución de este alimento a la mejora del crecimiento y desarrollo general de los pequeños y más de un tercio con un favorecimiento a su alimentación.

“Desde AEFY tenemos el objetivo de recomendar y asegurar unos patrones de alimentación saludable entre la población infantil. Por eso queremos promover la accesibilidad a de alimentos de alta densidad nutricional s y que benefician al correcto desarrollo de los más pequeños. Este estudio concluye la importancia de garantizar el acceso a este tipo de alimentos y el papel fundamental que tienen los centros escolares en ello”, afirma Antoni Bandrés, presidente de AEFY. “Más de la mitad de los padres de nuestro país considera necesario aumentar la oferta de yogur en las escuelas, lo que pone de manifiesto la necesidad de revisar los menús escolares por parte de las diferentes administraciones públicas, como el Gobierno central y las Comunidades Autónomas, así como trabajar de manera conjunta y coordinada, junto con los expertos, para impulsar unos hábitos de alimentación saludable entre los más pequeños”, señalaba.

El yogur como aliado saludable

Al profundizar en las aportaciones del yogur en la alimentación infantil, el estudio refleja una valoración positiva por parte de los padres de los beneficios de dicho alimento para la salud de los más pequeños. En concreto, el 80% de los padres que tienen hijos que consumen un mínimo de tres yogures por semana, considera que la alimentación de sus pequeños es equilibrada. Del mismo modo, el consumo de yogur en el colegio se relaciona también con una mejor alimentación de los niños, favoreciendo un buen desarrollo tanto físico como cognitivo.

Los padres y madres españoles hacen un reconocimiento positivo del yogur que se sustenta en la aportación de calcio (constatado entre el 84,8% de los padres), en su importancia para la dieta infantil (80,9%) y en que es práctico (84,9%).

Con estos datos, AEFY pone de manifiesto su voluntad de asegurar unas pautas de alimentación saludable entre los niños y niñas desde edades tempranas, con la intención de garantizar su correcto crecimiento y el desarrollo de una buena cultura de la alimentación. El yogur es una de las opciones de lácteo más adecuadas entre el público infantil, tanto por su densidad nutricional como por la versatilidad del alimento, que permite introducirlo en diferentes momentos del día y que ejerce de facilitador de otros alimentos.