Durante la celebración de San Roque los servicios de urgencias del área sanitaria de Pontevedra y O Salnés en Vilagarcía de Arousa atendieron un total de 1.554 asistencias.

En concreto, en el Punto de Atención Continuada del centro de salud de San Roque en Vilagarcía de Arousa se atendieron un total de 769 urgencias extrahospitalarias entre las guardias del pasado miércoles 15 hasta las de este domingo. A esto hay que sumarle las 785 urgencias hospitalarias atentidas en el Hospital Público de O Salnés.

Debido a la gran cantidad de asistencias, el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés ha destacado en una nota de prensa que reforzó la presencia de profesionales de varias categorías tanto en el centro hospitalario como en los PAC durante el jueves 15 y el viernes 16 de agosto.

En este sentido, el PAC de Vilagarcía contó el día 15, según el departamento autonómico, con un facultativo y un profesional de Enfermería más, con cobertura adicional de personal de Seguridad, en horario de 15.00 a 08.00 horas, y el viernes 16 con un facultativo y un profesional de Enfermería más en horario de 08.00 y 22.00 horas, con cobertura de personal de Seguridad en horario de día.

Por su parte, en Urgencias del Hospital de O Salnés se sumó el pasado día 15 un profesional de Enfermería, un TCAE, un celador, un auxiliar administrativo adicional, un técnico de Radiología, así como personal de Seguridad en el turno de noche. Del mismo modo, el viernes 16 hubo un profesional de Enfermería y un TCAE en turno de día, un celador en horario de 8.00 a 22.00 horas, un auxiliar administrativo en horario de 8.00 a 11.00 horas y personal de Seguridad en turno de día.

"No" a las agresiones

Por otro lado, el área sanitaria ha vuelto a condenar los "últimos episodios de violencia externa" ocurridos en el Punto de Atención Continuada en Vilagarcía, "sufridos por parte de profesionales en acto de servicio asistencial".

"Desde la Dirección del área Sanitaria de Pontevedra y O Salnés se reitera su firme apuesta por la seguridad para los profesionales y usuarios, como máxima prioridad. De este modo, la Administración Sanitaria Pública gallega insiste en su firme compromiso de no tolerar ningún tipo de agresión verbal ni física, recordando que se tomarán todas las medidas legales posibles para erradicar este problema reincidente, más si cabe cuando los profesionales sanitarios tienen consideración de autoridad en la Legislación vigente", ha manifestado.