Los avistamientos de nidos de avispa velutina se dispararon en 2023 en comparación al año anterior, creciendo un 40%. Los servicios especializados recibieron un total de 56.500 avisos durante todo el año pasado, por lo que la Xunta de Galicia prepara nuevas medidas de choque: Un trampeo geolocalizado y un refuerzo de la formación y la investigación. Las medidas, pensadas para frenar la expansión de esta especie invasora en la comunidad, han recibido el visto bueno del Consello del organismo autonómico.

Según ha podido saber Europa Press, el trampeo selectivo de este año tomará como referencia los nidos de 2023, estará geolocalizado y se centrará en la captura de reinas. Además, se adelantará la retirada de nidos primarios de pequeño tamaño.

Por quinto año consecutivo, será la empresa Seaga la que se encargue de la tarea de la retirada de nidos. En este sentido, también ha crecido el número de municipios gallegos adheridos al convenio: Son 313 frente a los 285 con los que se comenzó en 2020.

Durante el pasado año, el operativo de Seaga retiró o neutralizó un total de 29.500 nidos de velutina. En este extremo, la distribución por provincias fue la siguiente: A Coruña (12.294 nidos), seguida de Pontevedra (8.800), Lugo (4.638) y Ourense (3.707).

Seis sectores industriales estratégicos

En el Consello de la Xunta también se acordó la declaración de seis sectores industriales como estratégicos, con el objetivo de iniciar la elaboración de sus planes directores: Industria metalmecánica, automoción, construcción naval, sector forestal-madera, industria de las TIC y logística industrial.

Los planes buscarán el desarrollo de la actividad industrial con la definición de medidas necesarias. En la elaboración participarán las consellerías competentes, sector privado y representantes de trabajadores. Además, por medio de una consulta pública, cualquier persona o entidad podrá presentar aportaciones.

En la convocatoria de 2023 y según precisó la Xunta, este organismo destinó 3,7 millones de euros al fomento de la utilización de instalaciones y equipos en común en régimen asociativo en el agro gallego.