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Los últimos migrantes acogidos en Sanxenxo -llegaron 54 y, actualmente, residían en el municipio 22- han abandonado la localidad rumbo a Madrid, en donde se instalarán en el campamento permanente de Alcalá y tras pasar algo más de un mes por tierras gallegas. Durante estas semanas, los jóvenes participaron en diferentes actividades -la última, una jornada de convivencia con escolares del municipio- y aprendieron castellano.

Al filo de las 09:00 horas de esta mañana y antes de emprender camino a la capital madrileña, los migrantes se despidieron de los miembros de la ONG que les acompañaron en su estancia gallega. Según pudo saber Europa Press, los jóvenes se mostraban preocupados por el frío madrileño, pero "ilusionados" por poder avanzar en su proceso para conseguir un trabajo en el país.

Debido a la llegada masiva de migrantes a Canarias a finales del pasado mes de octubre, el Gobierno central adoptó la decisión de distribuir grupos por diferentes comunidades. En el caso de Galicia, llegó a hablarse de la llegada de 350 personas, sin embargo, tan solo se desplazaron 40 a O Porriño, 10 a Sobrado dos Monxes y 54 a Sanxenxo. Todos ellos eran originarios de Senegal, Mali, Guinea Bissau y Guinea Conakri.

Sanxenxo se volcó en su acogida

Durante su estancia en Sanxenxo, los migrantes, que fueron auxiliados por Accem y recibidos por miembros de la corporación local, llevaron a cabo distintas actividades: Clases de castellano, práctica deportiva en Dorrón, o formación en primeros auxilios junto a la Policía Local y el Grupo de Emerxencias.

La última iniciativa tuvo lugar ayer en el colegio Magaláns de Dorrón, en donde se celebró una jornada de convivencia entre el grupo y los escolares.