El Estadio Municipal de Balaídos cerrará el año más extraño de su historia sin ser invadido y no se trata de una racha invicta del equipo de Coudet como local. La Fundación Celta no organizará este 8 de diciembre la que hubiera sido la sexta edición de la Invasión Celeste. El futuro de la misma es una incógnita, ya que desde la entidad no han especificado si se trata de una suspensión definitiva o solamente por la situación derivada del Covid-19.

Con más de 1.500 participantes año tras año, la prueba se había convertido en una de las más especiales para "runners" y celtistas de todas las edades. Mientras que los más pequeños copaban los flashes en sus carreras de 100 metros ante la grada de Río, los mayores mostraban un fondo de armario único con camisetas del club de todas las épocas, en el que tampoco faltaban las banderas y bufandas de las peñas.

Eduardo Berizzo saludando a los espectadores durante la I Invasión Celeste. Foto: F. Currás

Con una distancia de entre seis y siete kilómetros en su prueba absoluta y uno para los menores de 16 años, la Invasión Celeste permitía la participación incluso a aquellos que no entrenen habitualmente. En 2014 su meta se situó en la esquina de Preferencia con Gol, pero las obras en la nueva grada de Tribuna obligaron a su traslado al otro lateral del campo. Desde entonces, la salida y llegada de la carrera se efectúan sobre el antiguo foso del Lagares, utilizando la grada de Río como tribuna para el público,. De esta forma se ha mantenido el acceso al estadio a través de la "puerta de Bomberos", un momento muy emocionante para cualquier aficionado del club.

La gran fiesta de la familia celtista

Aunque la fecha escogida impedía un mayor protagonismo en el calendario, desde el club siempre se tuvo. Además de la presencia de Germán Arteta y otros directivos de la Fundación, el propio Carlos Mouriño participó siempre que fue posible por agenda. En su primera edición, el entonces entrenador Eduardo Berizzo no dudó en calzarse las zapatillas y recorrer sus 6 kilómetros saludando y sacándose fotos con todos los aficionados presentes. También Sergi Gómez o el legendario Vlado Gudelj entregaron las medallas a los ganadores en 2017.

Los voluntarios del Celta Atletismo y Celta Integra al término de la quinta edición. Foto: F. Currás

En esa misma edición, el club celebró dos días antes el "Family Day" en As Avenidas con actividades para los más pequeños. También los integrantes del Celta Integra, equipo campeón de La Liga Genuine en 2019, siempre han estado presentes en la prueba; tanto en la entrega de medallas a los más pequeños como animando al público. También el Celta Atletismo colaboró en la organización durante las cinco primeras ediciones.

Un cartel de nivel

Pese a que la prueba no figura en el calendario oficial de la Federación Galega de Atletismo, su recorrido se convirtió en un gran atractivo para los atletas más destacados del área de Vigo, que cada 8 de diciembre lideraban la serpiente celeste que formaba la prueba.

Gonzalo Basconcelo celebra su triunfo en la edición de 2016. Foto: F. Currás

Entre los ganadores y participantes de cada año destacan nombres como la medallista nacional absoluta Esther Navarrete, ganadora de las cinco primeras pruebas femeninas, vistiendo inicialmente la camiseta del Femenino Celta y más tarde la del F.C. Barcelona. En los hombres, el también céltico Gonzalo Basconcelo domina el palmarés con otros cuatro triunfos entre 2015 y 2018.