El Ayuntamiento de Pontevedra ha dado por finalizada la situación de prealerta por desabastecimiento de agua y, por lo tanto, retirará las restricciones que imperaban durante los últimos meses gracias a la mejora del caudal del río Lérez debido a las lluvias de las últimas semanas.

No obstante, la alerta por sequía prolongada, marcada por Augas de Galicia, organismo dependiente de la Xunta, continúa activa a día de hoy. Desde el Concello han especificado que lo que se ha desactivado es la alerta municipal "que viene marcada por un baremo propio del caudal del río" y que, principalmente, observa la capacidad que tiene el gobierno local de abastecer a la población.

Así lo ha anunciado este miércoles en rueda de prensa la concejala responsable del Ciclo del agua, Carme da Silva. Las lluvias de los últimos días propiciaron una mejoría en la cantidad de agua que lleva el río Lérez cuyo nivel "subió de forma importante".

El caudal medio del río el 14 de octubre era de 1,8 metros cúbicos por segundo y este martes 25 de octubre ya alcanzaba los 17,9 metros cúbicos por segundo, "muy alejado de la situación de prealerta", según ha señalado Da Silva.

"Tendremos que ver cómo evolucionan las lluvias a lo largo del mes de noviembre y si el río mantiene este nivel propio del otoño y del invierno", ha dicho la edil nacionalista, que también ha informado que el embalse de el Pontillón do Castro ha visto aumentado el nivel de agua que almacena. Así, ha pasado de estar al 81,12 % de su capacidad el pasado 10 de octubre al 86,67 % que registra a día de hoy.

En todo caso, Carme Da Silva ha indicado que los servicios municipales no emplearán los recursos del Pontillón "mientras no exista la seguridad de que el río pueda mantener sus niveles de agua de manera constante".

Con estos datos sobre la mesa, la concejala responsable del Ciclo del agua propuso en la reunión con el resto de ayuntamientos que se abastecen del Lérez desactivar la situación de prealerta, lo que deriva también en la eliminación de las restricciones que están vigentes por los distintos bandos de Alcaldía. La propuesta fue ratificada unánimemente.

Reapertura de Ence

Por otro lado, la concejala responsable del Ciclo del agua ha aprovechado su intervención para dar cuenta de la rotura de la tubería de abastecimiento de agua a la fábrica de Ence en Lourizán dentro de la galería de servicios municipal. Si bien en este momento el caudal del Lérez debería poder abastecer a la factoría al cumplirse con los datos del caudal ecológico mínimo, la vuelta de la actividad no parece posible a causa de esta avería, informan desde el consistorio.

La compañía informó de esta situación al Concello de Pontevedra el pasado 3 de octubre, solicitando hacer una reparación provisional a lo largo de 380 metros de tubería. "Estamos ya emitiendo los correspondientes informes, y entendemos que es una obra que tiene carácter de urgencia pues puede afectar a la red municipal", ha indicado Da Silva.

Ya fueron emitidos informes por las distintas áreas municipales, estando ahora pendiente de llegar el informe de Costas de la Xunta. El presupuesto que facilita Ence para esta reparación es de 459.000 euros.

Ence tiene parada temporalmente la actividad de su biofábrica de Pontevedra desde finales de julio, ante la necesidad de preservar el caudal ecológico del río Lérez y dar prioridad en todo momento al consumo ciudadano. Durante esta parada, explican desde la compañía, se detectó la avería y se informó al Concello, aunque Ence asegura que la biofábrica solo volverá a la actividad "una vez que se haya estabilizado el caudal del río" y se desactive la alerta por sequía mantenida por Augas de Galicia.

Recuerdan, además, que la compañía está ultimando el estudio que permitirá reanudar la producción utilizando aguas residuales de la EDAR de Praceres, lo que permitirá a la biofábrica "no tener que volver a parar en caso de sequía".