La tarta de turrón blando sin horno que hacen las abuelas gallegas: fácil, rápida e ideal para triunfar en Navidad

En Galicia, la Navidad es un tiempo para las reuniones familiares, donde los postres caseros tienen un papel esencial. Las abuelas gallegas son las custodias de recetas tradicionales que, aunque se preparan con ingredientes simples, están llenas de sabor.

Entre los postres más característicos se encuentran la Tarta de Santiago, las filloas, las torrijas navideñas, los mantecados caseros, los dulces con membrillo y nueces, las castañas en almíbar, la bica gallega, los almendrados, las Orejas de carnaval o los rocos fritos.

Unos dulces que no solo alegran a toda la familia, sino que también reflejan el amor y la tradición que las abuelas gallegas ponen en la mesa durante la Navidad.Sin embargo, hay un clásico navideño que no puede faltar en las mesas: la tarta de turrón blando sin horno.

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La tarta de turrón blando es un postre típico de Navidad en Galicia, ideal para quienes buscan un dulce sencillo pero delicioso. Es un postre sin horno, que combina la suavidad del turrón con una textura cremosa. Las abuelas gallegas lo elaboran de manera fácil, con pocos ingredientes y mucha tradición.

Los ingredientes para elaborar una tarta de turrón blando son los siguientes:

• 1 tableta de turrón blando (aproximadamente 300 gramos)
• 500 ml de nata líquida para montar (bien fría)
• 200 ml de leche condensada
• 1 paquete de galletas maría (o galletas de tu preferencia)
• Un chorrito de licor de anís o ron (opcional)
• Cacao en polvo o virutas de chocolate (para decorar)
• Mantequilla (para engrasar el molde)

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En cuanto a los pasos para elaborar esta tarta de turrón blando, son los siguientes:

1. Preparar el molde: Engrasa un molde desmontable (puede ser de unos 22-24 cm de diámetro) con un poco de mantequilla o fórralo con papel de hornear para facilitar el desmoldado.
2. Base de galletas: Tritura las galletas maría hasta que queden bien finas (puedes hacerlo con un robot de cocina o metiéndolas en una bolsa de plástico y aplastándolas con un rodillo). Una vez trituradas, mézclalas con un poco de licor de anís o ron y un chorrito de leche para que se hidraten un poco. Extiende esta mezcla sobre el fondo del molde, presionando bien para que quede compacta. Reserva en la nevera mientras preparas el relleno.
3. En un bol grande, bate la nata líquida con la leche condensada hasta que la mezcla esté bien montada y forme picos suaves.
4. Desmenuza el turrón blando con las manos o tritúralo en un procesador de alimentos hasta que quede bien triturado. Incorpóralo a la nata montada, mezclando suavemente con una espátula o batidor hasta obtener una masa homogénea y cremosa.
5. Vierte la mezcla de turrón sobre la base de galletas que tenías reservada en la nevera. Alisa la superficie con una espátula.
6. Deja reposar la tarta en la nevera durante al menos 4 horas, o mejor aún, toda la noche. Esto permitirá que se asiente bien y que la textura se compacte.
7. Antes de servir, decora la tarta con cacao en polvo o virutas de chocolate para darle un toque festivo. También puedes añadir un poco de turrón rallado por encima para intensificar el sabor.

Algunos consejos para elaborar esta tarta son los siguientes: en primer lugar, puedes variar las galletas por otras como galletas Digestive o incluso galletas de chocolate para darle un toque diferente.

Igualmente, si no te gusta el licor, puedes prescindir de él o sustituirlo por un poco de leche normal. Y además, si deseas una tarta más firme, puedes añadir un poco de gelatina neutra disuelta en agua caliente antes de incorporar el turrón a la nata montada.

Este postre es perfecto para el día después de la cena de Navidad, ya que está tan delicioso como fácil de preparar. Además, es muy común en las casas gallegas como postre navideño, dada su sencillez y el toque dulce del turrón.