Este valle pirenaico sorprende por su gran valor natural y paisajístico. En concreto, uno de los puntos que destaca es el Parque Nacional de Aigüestortes y Lago de Sant Maurici. Es el único parque nacional que hay en el Pirineo catalán y uno de los catorce de España. Fue catalogado con este distintivo en 1955 para preservar su gran riqueza natural, histórica y cultural y fomentar un turismo sensible y respetuoso con el entorno. Cumbres que superan los 3.000 metros de altura, ríos, barrancos, cascadas y ciénagas son algunos de los elementos que se encuentran en este territorio protegido.
También se trata del único espacio natural protegido del sur de Europa que posee más de 200 estanques de formas y colores diversos, además de contar con una gran diversidad de flora y fauna. Uno de los escenarios más fotografiados y símbolo representativo del parque es el macizo Els Encantats, frente al lago San Mauricio. Se pueden hacer numerosas rutas de senderismo y montañismo por el parque, algunas de ellas por el valle de Unarre, el lago de San Mauricio, el puente de la Gorga, el estanque de Gerber o el batlliu de Sort.
El Valle de Àssua es un escenario espectacular para disfrutar de diversas rutas de senderismo y montañismo envueltas en un paisaje auténtico de montaña pirenaica. También se encuentran otros pueblos de gran belleza por su carácter rural, como Altron, Sorre, Bernui o Llessui.
En este valle se encuentra un conocido pueblo: Sort, una rica y pintoresca localidad en los pirineos catalanes de Lleida. Es también la capital de la Comarca del Pallars Sobirà. Su riqueza paisajística y en naturaleza la convierte en uno de los destinos más populares de Cataluña para disfrutar de espacio natural protegido.
Se trata de un pueblo de aproximadamente 2.145 habitantes y es uno de los más importantes de la comunidad en cuanto a la práctica de rafting y piragüismo por la cercanía con el río Noguera Pallaresa. Un tramo de unos 18 kilómetros de pura adrenalina convierten a este río en uno de los mejores lugares de Europa para disfrutar de estos deportes. Su administración de lotería, La Bruixa D’or, también ha permitido que muchos conozcan a este pueblo ya que ha sido agraciada con grandes premios en varias ocasiones.
Este pueblo cuenta con un patrimonio monumental destacable. Su arquitectura antigua medieval romana atrae las miradas de todo tipo de visitantes, amantes no solo de la naturaleza y los paisajes preciosos, sino también de un cálido ambiente rural que se respira en este municipio leridano. La Plaza Mayor se encuentra en la parte más antigua, la tradicional zona comercial donde se aprecia la magnífica arquitectura y alberga la Iglesia de San Feliu de Sort, levantada sobre una iglesia anterior que data de 1280.
A lo largo de su historia sufrió la destrucción y el paso del fuego, por ello se han perdido varias imágenes del siglo XIII y parte del encanto de su arquitectura, pero su historia y su entorno la llenan de vida y la convierten en uno de los principales atractivos del pueblo. Otro elemento patrimonial importante es el Castillo de los Condes de Pallars, de la Edad Media. Fue la antigua residencia de los Condes de Pallars y hoy se encuentra en ruinas. Se pueden apreciar sus muros y desde la plaza se divisa el pueblo, unas bellas vistas del entorno de Sort.
Pasear por el casco antiguo para apreciar cada detalle es una de las mejores actividades que hacer en el pueblo. No hay que olvidar la calle Mayor, llena de comercios antiguos y más modernos. También cuenta con varios destacados museos. La Prisión-Museo ‘El camino de la Libertad’ es un museo de la Paz en la frontera. Se trata de la antigua prisión de Sort y donde entre 1939 y 1944 estuvieron encarcelados refugiados extranjeros que huían del nazismo. Hoy se muestra el lado más humano de este trágico periodo histórico, traducido en las experiencias de los fugitivos.
Por su parte, el Museo de los pastores del Valle de Àssua enseña y explica testimonios de la forma de vida en la montaña y las diferentes tareas que realizaban los pastores de la zona, así como la evolución y los cambios tecnológicos que han experimentado. Finalmente, uno de los museos más bellos y famosos es el Museo de las Mariposas de Catalunya, que se encuentra en pleno Pirineo de Lleida a unos 1.200 metros de altitud. En sus salas muestra los secretos y el fascinante mundo de las mariposas y los insectos a través de más de 4.000 ejemplares.
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