Los mejores planes para disfrutar de la Semana Santa en Andalucía

Andalucía es uno de los lugares de España más especiales para vivir la Semana Santa en todo su esplendor. La emoción de las procesiones, el sentimiento de cánticos como las saetas o la alegría del Domingo de Resurrección, son solo algunas de las experiencias que se pueden encontrar en el territorio andaluz y que impresionan a todos sus visitantes.

Todo ello, sin olvidar además de la belleza que caracteriza a la comunidad autónoma. Y es que Semana Santa, que este año empieza el domingo 10 de abril, Domingo de Ramos, hasta el día 17 de abril, puede ser también una fecha ideal para conocer las ciudades y pueblos andaluces: disfrutar de su gastronomía y su buen tiempo, contemplar sus paisajes naturales, ver sus museos y, por qué no, incluso darse un baño en alguno de sus más de 800 kilómetros de costa. 

Este año, la Semana Santa se convertirá en un punto de encuentro para miles de personas tras dos años de restricciones por la pandemia y la pasión y la tradición volverán con más fuerza que nunca. Los pasos saldrán a las calles junto a las cálidas luces de los cirios, el colorido de las túnicas de los nazarenos y la música de las bandas de tambores y cornetas. Disfrutar de estas fiestas se puede hacer en cualquiera de las provincias andaluzas. 

Lo mejor de cada provincia

En Almería, por ejemplo, destacan los encuentros con las Hermandades, que recorren durante los días Santos las calles de la ciudad ataviados con el hábito nazareno. Se trata de una tradición con un importante significado, pues el origen de algunas de las cofradías y hermandades se remonta a los siglos XIII y XIV, cuando aún se era territorio musulmán. Los días más importantes son el Viernes Santo, cuando los cantos gregorianos cobran protagonismo, y el Domingo de Resurrección, el que los encuentros van acompañados con subastas o con gastronomía de la zona.

La celebración de Cádiz es una de las más atractivas, ya que se caracteriza por la pasión y entrega de sus cofrades y hermandades, unida a la devoción por parte de los espectadores. Sobresalen las conmemoraciones de la Pasión y Muerte de Jesús, cuando sus Hermandades, Cofradías y Congregaciones, junto a cientos de penitentes, siguen al Nazareno o a la Dolorosa. 

Más allá de procesiones como la Veracruz, El Nazareno y el Cristo de la Buena Muerte, que se pueden contemplar en la capital gaditana, también es recomendable acercarse a otros lugares de la provincia que están catalogadas como Fiestas de Interés Turístico Nacional. Concretamente los municipios de Alcalá del Valle, Arcos de la Frontera, Jerez de la Frontera, San Fernando, Sanlúcar de Barrameda, San Roque y Setenil de las Bodegas.

En Córdoba, el aroma a azahar e incienso, junto al sonido de las bandas de cornetas y tambores, crean un escenario único en el que la penitencia, desde el Domingo de Ramos hasta el de Resurrección, marca la Semana Santa. Procesiones como la de las Ánimas o el Rescatado son las más multitudinarias. Sin embargo, no hay que perderse aquellas en las que los costaleros recorren de rodillas la ciudad hasta las puertas del templo.

La celebración granadina es particularmente hermosa. Entre palmas y olivos, la ciudad se viste con sus mejores galas el Domingo de Ramos, para despertar con el primer redoble de tambor los días de la Pasión, Muerte y Resurrección. Algunos de los pasos más originales son el del Cristo de los Gitanos, para el que se prenden fogatas inmensas entre las “cuevas”, viviendas y moradas de los gitanos, donde se desarrollan las zambras llenas de duende; o la procesión del Cristo del Silencio. De ella, impresiona el silencio que solo es roto por un redoble de tambor.

En Huelva, el olor del incienso se mezcla con el sabor de los dulces y postres artesanos. Algunos de los momentos de más interés son las Cofradías que salen en la madrugada del Viernes Santo como El Perdón, Misericordia y El Nazareno. Asimismo, en la provincia de Huelva se puede visitar la localidad de Ayamonte, cuya celebración está catalogada como Fiesta de Interés Turístico Nacional de Andalucía.

La Semana Santa de Jaén se caracteriza por unir la sobriedad de Castilla y el esplendor de Andalucía. En la localidad jienense, el Viernes Santo es uno de los días claves, con la salida de la procesión de Nuestro Padre Jesús Nazareno, más conocida como "El Abuelo", a la que acompañan más de 7.000 penitentes. Después de ver las procesiones, es necesario reponer fuerzas disfrutando de ‘el hornazo’ o huevo santo, típico por estas fechas en la ciudad. 

Las cofradías malagueñas se conocen por su variedad, sobriedad, respeto y perfecto desfile. Hay muchas cofradías espectaculares como la de Jesús Cautivo y María Santísima de la Trinidad o la de Los Gitanos. No obstante, hay que destacar los acompañamientos militares. Concretamente la llegada de la Legión, en la que el mar cobra protagonismo ya que su barco llega al puerto de Málaga el Jueves Santo.

Finalmente, y para los que quieran vivir el máximo exponente del fervor de Semana Santa, se encuentra Sevilla. Entre el Domingo de Ramos y el de Resurrección salen a la calle cerca de sesenta cofradías que dan vida a la pasión y muerte de Cristo. Sin duda, la celebración sevillana es un fenómeno único y auténticamente popular en el que participa el pueblo entero. Tiene más de cuatrocientos años de tradición y no emociona únicamente a los creyentes.

Para poder contemplar de la mejor manera las imágenes y los pasos, es recomendable buscar zonas alejadas de la carrera oficial, por donde pasan obligatoriamente todas las cofradías. Los días de Viernes Santo y Sábado, después de la madrugá, son de los mejores para poder disfrutar con tranquilidad de las celebraciones. Algunas de las procesiones más importantes son la de La Macarena, La Esperanza de Triana o La Borriquita.

Más allá de Semana Santa

Además de los actos propios de la Semana Santa, no hay que olvidar la gran oferta cultural de Andalucía, de la que también se puede disfrutar en estas fechas. Por ejemplo, no se puede dejar Granda sin haber visitado la Alhambra. Lo mismo ocurre con la Mezquita de Córdoba o la Giralda de Sevilla.

Los que se quieran alejar del tumulto de las grandes ciudades, también pueden visitar localidades más pequeñas como Úbeda y Baeza (Jaén), ambas Patrimonio de la Humanidad, o Arcos de la Frontera (Cádiz), Ronda (Málaga) o Moguer (Huelva).

Los amantes de la naturaleza pueden visitar las playas amplias playas de fina arena de las provincias de Cádiz o Huelva, o las calas de la costa de Granada, Costa del Sol o Almería. También, aprovechar para conocer las cumbres más altas de Sierra Nevada; extensos humedales como las Marismas del Guadalquivir; bosques mediterráneos como el del Parque Natural Sierra de Cazorla, Segura y las Villas; o desiertos volcánicos y tramos de costa sin habitar, como el Parque Natural de Cabo de Gata en Almería. A nivel deportivo, Andalucía es además la mejor región española para practicar golf. 

Todos estos planes irán siempre acompañados de su increíble gastronomía. El pescaíto frito o los serranos del interior, junto a productos típicos como el jamón o el gazpacho, son platos que hay que degustar, sin olvidar la cocina tradicional propia de esta Semana Santa tan única.

**Contenido ofrecido en colaboración con la Consejería de Turismo de la Junta de Andalucía.