Una mujer colgando ropa en el tendedero.

Una mujer colgando ropa en el tendedero. iStock

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Ni tendedero ni secadora: el sencillo truco neerlandés para secar tu ropa en tiempo récord este invierno

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Lavar ropa en invierno puede ser frustrante debido a las bajas temperaturas y la falta de ventilación adecuada en interiores. Este problema se agrava en espacios pequeños, donde las prendas tardan días en secarse y a menudo terminan con un desagradable olor a humedad.

El uso de secadoras o calefactores parece una solución práctica, pero también implica un consumo energético elevado. Esto no solo afecta al medio ambiente, sino que también incrementa significativamente las facturas del hogar, un gasto que no todos pueden permitirse.

Por eso, es importante explorar alternativas más económicas y eficaces para secar la ropa en invierno. Algunos métodos, como usar ventiladores estratégicamente o colocar la ropa cerca de una fuente de calor moderada, pueden ser igual de útiles sin disparar el consumo eléctrico.

Además, adoptar pequeños trucos, como escurrir mejor las prendas antes de tenderlas o colocarlas en perchas para optimizar el espacio, puede marcar una gran diferencia. Estas técnicas no solo aceleran el secado, sino que también ayudan a mantener un hogar fresco y libre de humedad.

El método neerlandés para secar la ropa

Una técnica de secado que es muy eficaz pasa por usar el método neerlandés para secar la ropa más rápido en invierno, que consiste en usar la técnica de la bolsa de agua caliente, gracias a la cual se puede acelerar mucho el proceso de secado.

Para ponerlo en práctica es suficiente con colocar una bolsa caliente cerca del tendedero de la ropa, lo que hará que crezca la temperatura en el entorno que se sitúa alrededor de las prendas de ropa, haciendo que se produzca un secado más rápido. Para ello, es importante situar las prendas de ropa en un área con circulación de aire fresco.

Más allá de favorecer el secado de las prendas de ropa durante el invierno, es un truco que contribuye a evitar los malos olores, así como la formación de moho y bacterias.

Otros trucos para secar la ropa

Más allá de recurrir a la alternativa neerlandesa para secar la ropa más rápido durante el invierno, hay otros muchos trucos que se pueden poner en práctica para un secado más rápido en esta época del año, en la que es muy difícil que las prendas se sequen al aire libre.

Cómo secar la ropa dentro de casa

Con el frío es muy complicado que las perlas se sequen al aire libre, por lo que se deben tener muy en cuenta las siguientes recomendaciones:

  • Tendero plegable: este es el utensilio más conocido, pudiendo encontrarlo en distintos tamaños e incluso modelos verticales que ocupan menos espacio. Se recomienda en este caso no poner lavadoras con mucha carga para evitar que se acumule la ropa y no se seque correctamente.
  • Tendedero eléctrico: una alternativa a la anterior es el uso de un tendedero eléctrico, que funciona igual que uno convencional, pero que cuenta con un interruptor que hace que sus barras de aluminio se enciendan y calienten, consiguiendo un rápido secado de las prendas.
  • Uso de radiador: es posible aprovechar el calor del radiador para secar la ropa en invierno. Sin embargo, no se debe colocar encima de él, ya que podría quemar las prendas. Lo ideal es situarla en una percha, silla o tendedero, cerca de la fuente de calor para favorecer un secado más rápido.
  • Secador eléctrico portátil: aunque muchos desconocen su existencia, este secador funciona como un pequeño armario en el que se puede introducir la ropa en perchas para que las prendas salgan secas y desinfectadas.

Cómo secar la ropa en invierno

Para secar la ropa y evitar el mal olor en la ropa mojada, hay que poner en práctica una serie de trucos sencillos:

  • Utiliza un deshumidificador: con la ropa mojada se sufre de bastante humedad, por lo que se recomienda usar un deshumidificador para que el ambiente esté más seco. Estos aparatos funcionan especialmente bien y, actualmente, se pueden encontrar modelos silenciosos con un bajo consumo eléctrico.
  • Escurre bien antes de tender: el principal responsable del mal olor es la humedad de las prendas. Cuanto más secas estén al tenderlas, más suave será el aroma que desprendan. Para evitarlo, se recomienda realizar un segundo centrifugado si la ropa aún tiene mucha agua una vez finalizada la colada.
  • Ciclos de lavado cortos: un buen conocimiento de la lavadora ayudará a cuidar la ropa. En invierno se recomienda hacer, siempre que sea posible, ciclos de lavados cortos, ya que así los centrifugados son más rápidos y las prendas salen con menor cantidad de agua.

Formas originales de secar la ropa en invierno

Finalmente, es necesario tener en cuenta algunos tips originales para secar la ropa en invierno:

  • Usa el congelador: el congelador sirve mucho más que para conservar la comida. Es suficiente con doblar y guardar la prenda en una bolsa de plástico, para introducirla durante unas horas en el congelador. Finalmente, solo habrá que darle un buen planchado cuando la saques.
  • Enrolla la ropa en una toalla: un truco para deshacerse de la humedad es extender una toalla y, sobre ella, la prenda a secar. Seguidamente, hay que enrollar y apretar con fuerza para que se absorba el excedente de agua.
  • Usa un secador de pelo: en ocasiones puntuales, podrás recurrir al secador de pelo, siendo muy útil para quitar la humedad superficial a prendas de ropa como las camisas, lo que además hará que te resulte mucho más sencillo plancharlas y que estén secas más rápido.