Un vuelo en parapente sobre Alicante.

Un vuelo en parapente sobre Alicante. Parapente Alicante.

Alicante

El parapente en Alicante, la actividad desconocida de volar en en entorno "único en España"

La provincia atreae a expertos nacionales e internacionales por sus especiales características, tanto paisajísticas como meteotológicas.

6 octubre, 2024 11:00

La provincia de Alicante es conocida por su gastronomía, sus playas y su clima, pero poca gente sabe que es una referencia en el mundo del parapente, un deporte de nicho que encuentra en el territorio un enclave de lujo debido a su variedad de paisajes y vientos.

Tanto es así que existe un desconocido turismo de personas que vuelan en parapente, e incluso se celebran competiciones en el cielo alicantino debido a su especial meteorología.

Para dar a conocer esta actividad, Juan Carlos Becerra, responsable de Parapente Alicante, explica sus principales características y cómo disfrutarla en una zona que califica como "única en España".

"Alicante tiene algo precioso, que es la combinación de costa y montaña, se juntan las dos cosas", señala el experto, quien destaca lo diferente que puede llegar a ser la experiencia de sobrevolar uno u otro lugar.

La clave está en el viento, y sus características en la provincia son "ideales" para la práctica del parapente, tanto si viene de Levante como del sureste. Las diferencias entre volar sobre el mar o la montaña, además de por el paisaje, las aporta el aire propio de cada zona.

Uno de los lugares donde vuelan desde Parapente Alicante es en Santa Pola, desde donde, como si de gaviotas se tratara, pasan por encima del faro y surcan desde las alturas de su cabo.

"Cuando se vuela en Santa Pola, el viento viene de Levante y es parecido al vuelo de las gaviotas. Desde allí tenemos vista de Tabarca, y es precioso", comenta Becerra.

El segundo de sus puntos clave para despegar se ubica en la montaña del Palomaret, cerca de Agost. Allí el aire que emplean para levantar el vuelo proviene del sureste, y la sensación es "como ser águilas".

Las corrientes térmicas que se forman en el suelo comienzan a elevarse y mantienen los parapentes en el aire durante los 15 o 20 minutos que dura la experiencia.

Miedo a volar

Este deporte es tan poco reconocido como lo es la sensación de volar para el cuerpo humano. "Es algo totalmente nuevo para los sentidos del humano. Cuando pones un bebé en el agua por primera vez, se siente cómodo porque venimos del agua, pero si lanzas a ese mismo bebé al aire, nunca intentará volar", apunta Becerra.

Precisamente es ese miedo a lo desconocido lo que echa para atrás al público en general. El especialista destaca que la sensación "inédita de volar" provoca cierto rechazo, en parte por el "riesgo controlado" que implica. "La gente que tiene miedo, al bajar, siempre dice que no se esperaba lo que iba a sentir, y lo encuentran hasta relajante", sostiene.

Aunque no lo parezca, el parapente es un deporte mucho más seguro de lo que se podría creer. La homologación europea exige unos estándares de calidad en los materiales y en la preparación de los pilotos que, sumado a las medidas de seguridad, hacen que un accidente sea una anomalía.

Becerra cuenta que en sus 24 años como piloto no ha presenciado la apertura de "ningún paracaídas", que junto a un airbag en la mochila, son los mecanismos de seguridad.

Promoción del parapente

El piloto considera la actividad como "un secreto" en Alicante, ya que los expertos conocen su potencial, pero este no llega a extenderse entre los alicantinos. Aun así, cree que "está en auge", si bien queda "mucho por hacer".

"Si el parapente llegara a conocerse al nivel que representa, se multiplicaría por diez la cantidad de turistas que nos visitan relacionados con él", manifiesta.

Para los aventureros, Parapente Alicante y la mayoría de las compañías del sector ofrecen vuelos de 15 minutos por un precio de entre 80 y 95 euros. Y para los más atrevidos, ofrecen la opción del paquete piloto. Esta modalidad permite llegar a pilotar el parapente, descubrir su funcionamiento y hacer una sesión de acrobacias.