Nuevas medidas de tráfico en Alicante: más calles peatonales y limitaciones a 20 kilómetros hora
El Ayuntamiento quiere convertir todo el Casco Histórico de Alicante en zona residencial dando prioridad al peatón y reforzando la señalización.
9 junio, 2021 12:03Noticias relacionadas
Alicante quiere estrenar nuevas medidas de movilidad. Entre otras, una velocidad máxima de 20 km/h en las vías urbanas que dispongan de plataforma única de calzada y acera, va a convertir el Casco Histórico en zona residencial, y dos nuevos pasos de peatones en la plaza del Ayuntamiento frente a los pasajes de los pórticos.
José Ramón González, concejal de Movilidad y Tráfico, ha asegurado hoy que quiere "calmar el tráfico". Y para ello trabaja en tener peatonalizada una parte del centro tradicional con obras licitadas en 2021.
El objetivo es desarrollar un corredor peatonal entre el Mercado Central y la Explanada de España que discurriría por avenida de la Constitución, Bailén, Portal de Elche y la calle Bilbao, integrando la Plaza Ruperto Chapí.
Concienciación
El Ayuntamiento lleva trabajando varios años en cambiar Alicante y concienciar a los ciudadanos que es necesario lograr una mayor implicación de todos en conseguir tener una ciudad más sostenible y habitable.
Dando prioridad al peatón, habilitando más zonas verdes y reordenando del espacio urbano, considera que logrará reducir la utilización del vehículo privado por otros modos de desplazamientos como la bicicleta, el patinete, el transporte público o ir andando.
Los tramos de limitación de velocidad a 20 km/h se situarán en el entorno de la plaza de Séneca, la avenida de Periodista Rodolfo Salazar, la zona del Ayuntamiento de Alicante y el Casco Antiguo que se convertirá en zona residencial.
El concejal de Movilidad ha subrayado "la Ciudad 30 que ya es una realidad y las nuevas zonas 20KM/h, responden al desafío que plantea el nuevo desarrollo urbano, con el calmado del tráfico y la promoción de los modos de transporte no motorizados y más eficientes”.
La nueva medida se implementará con el cambio de la señalización en el tramo de la calle Rafael Altamira con plataforma única al mismo nivel de peatones y vehículos, reduciendo la velocidad a 20 Km/h, así como Jorge Juan, calle San Telmo, Gravina, Bendicho, Fray Juan Rico y plaza del Paseito Ramiro. En la Plaza de Séneca y en Periodista Rodolfo Salazar.
El Ayuntamiento convierte todo el Casco Histórico de Alicante en zona residencial dando prioridad al peatón y reforzando la señalización, en la plataforma única al mismo nivel de vehículos y peatones, disponiendo de accesos por la calle Lonja de Caballeros, calle Miguel Soler y calle Teniente Daoiz y salidas por calle Villavieja y calle General Primo de Rivera, donde se realizarán calles residenciales en todo el entorno.
Área libre de emisiones
El Ayuntamiento de Alicante también aborda el proyecto de tener en un plazo de menos de 2 años un Área libre de emisiones, con el objetivo de reducir el uso de los vehículos en sus centros urbanos, este proyecto se abordaría con las cámaras de Alicante se Mueve, y se crearía una Zona en el centro de la ciudad, que se podría controlar con estas cámaras tal y como avanzó el concejal de Movilidad, José Ramón González.
Estos corredores verdes también contemplan zonas peatonales y nuevos itinerarios peatonales que conecten el centro con los barrios, fomentando los desplazamientos a pie, y fomentar el transporte público.
Aparcamientos Disuasorios
Por su parte la concejalía de Movilidad también está trabajando en poner en marcha los proyectos de construcción de Aparcamientos Disuasorios y Reordenación del Tráfico, el proyecto del aparcamiento de San Gabriel – El Palmeral es uno de ellos se quiere tener licitadas sus obras en 2021, con un presupuesto de 713.254,14€, y un plazo de seis meses.
El área de Movilidad y Tráfico lleva adoptando medidas para hacer la ciudad más habitable desde hace varios años, siendo los principales beneficios que se quieren conseguir los siguientes: hacer las calles más amables para el peatón, mejorando la eficiencia social del espacio urbano, facilitando la integración del tráfico ciclista en la calzada.
Se pretende favorecer la disuasión del uso del vehículo motorizado, facilitar la creación de zonas con prioridad peatonal y zonas de coexistencia, sin segregación entre aceras y calzada, reducción del número y gravedad de los accidentes, reducción de la contaminación acústica, atmosférica y el consumo de combustible fósil.