¿Por qué hay en Alicante una "Casa de las Brujas"?
- Es la sede de la Generalitat Valenciana en la ciudad de Alicante que comenzó llamándose Casa Martínez Azcoytia y luego tomó un título más popular.
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El imaginario popular muchas veces logra imponerse a la idea inicial de los creadores, arquitectos o artistas. Ese es el caso de la Casa de las Brujas de Alicante, un palacete que actualmente es la sede el Gobierno autonómico en la ciudad de Alicante y que incluso la Administración ha llegado a asumir como propio el nombre popular frente al original, Casa Martínez de Azcoytia.
Su historia surge tras el derribo de las murallas de la ciudad de Alicante en el año 1869 y la reurbanización de la zona con un "Ensanche", como se denominaron los nuevos barrios en muchas ciudades españolas en crecimiento en aquella época.
Según la ficha de Patrimonio de la Generalitat Valenciana, se trata de una extensión de la ciudad "con dos ejes ortogonales principales, a uno de los cuales presenta fachada el edificio de la 'Casa de las Brujas', conformando una unidad urbana como resultas de la confluencia de la prolongación de los trazados del viario de la ciudad vieja y el nuevo trazado con pretendida trama ortogonal".
En esa misma ficha se detalla que el edificio fue proyectado inicialmente en 1898 por el arquitecto Enrique Sánchez Sedeño utilizando una estética típicamente decimonónica. Y el mismo arquitecto remodeló el proyecto anterior en 1911 con una ampliación superficial, desplazando la línea de medianera hacia el interior de la manzana.
Esta remodelación "conserva el trazado clásico estructural, formalmente incorpora conceptos de lenguaje Art-Nouveau, enriqueciendo la concepción espacial del edificio al dotarlo de un torreón rematado con cubierta fuertemente inclinada, con reminiscencias de gótico nórdico y ventanas secesión vienesa".
Es este torreón y esta estética neogótica muy alejada del clasicismo arquitectónico mediterráneo y más parecida al modernismo valenciano, fue lo que con el tiempo influyó para que los alicantinos comenzasen a llamarla la "Casa de las Brujas", impresionados sin duda por la ornamentación con motivos florales, cabezas de león en los laterales y de elefante en las esquinas.
El interior tampoco se quedaba a la zaga, con decorados "neos", que en la década de los 70 del siglo XX se encontraban muy deteriorados, como el edificio en su conjunto. La decadencia del inmueble y los ruidos que se oían en su interior por el paso de las brisas que surcaban la avenida Doctor Gadea, terminaron por conferirle una fama terrorífica entre los vecinos.
La superficie construida del edificio es de 1.556 m2 y la inversión realizada asciende a 212.105.601 pta (1.274.780,34 €). Su remodelación en 1988 para acoger la sede del Gobierno autonómico, señala Santiago Varela Botella en La arquitectura de Enrique Sánchez Sedeño y el Modernismo en Alicante, le proporcionó un cambio de uso que "supuso introducir significativas modificaciones en el interior".