La Comunidad Valenciana y Murcia, excluidas de la reunión de Santiago, hacen su propia cumbre

Ocho presidentes de Comunidades Autónomas se reúnen hoy en Santiago de Compostela para hallar posiciones comunes ante la negociación del nuevo sistema de financiación autonómica. La Comunidad Valenciana y la Región de Murcia no han sido invitadas. Por eso, han decidido tener una cumbre aparte para analizar la situación "buscar soluciones a sus problemas comunes". Aunque afirman: "La elección del día ha sido casual".

El conseller de Hacienda de la Comunidad Valenciana, Vicent Soler (PSOE) y el de la Región de Murcia, Luis Alberto Marín (PP), han comparecido para detallar los contenidos de su cumbre en Alicante: "No queremos hacer frentes de ningún tipo, queremos diálogo para desarrollar la Constitución y la LOFCA". Pero aseguran que reivindicarán "lo que es justo" con "lealtad, serenidad y contundencia". 

La reunión entre ambos gabinetes puede anteceder una reunión entre los presidentes autonómicos Ximo Puig y Fernando López Miras, todavía por concretar. Según expresaron los consejeros, porque quieren mantener un "planteamiento multilateral" porque "todas la comunidades quieren lo mismo, mejorar su financiación para mantener la sanidad, la educación y el escudo social". 

Marín, señaló, que previamente se había reunido con el presidente de la Diputación de Alicante y presidente regional del PP en la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón. Y valoró que en este asunto haya "unidad" porque "es muy bonito que fuerzas políticas de distinto signo reclamen lo que es justo para sus ciudadanos". 

"Población ajustada"

Ambos dirigentes políticos valoraron positivamente que el Gobierno plantee la reforma bajo el criterio de "población ajustada", teniendo como base el número de ciudadanos pero ajustando el reparto por otros factores como la despoblación o la dispersión de ésta.

De hecho, Soler señaló que cuando se ha reunido con representantes de Extremadura, Galicia o Castilla y León, es más lo que les une que lo que les separa. "Parece que somos prisioneros de nuestra historia anterior", dijo el conseller valenciano, "pero lo nuclear son las personas y los servicios que prestamos desde la Comunidades".

Por su parte, Marín ha resumido las reivindicaciones de ambas regiones en cuatro puntos: un fondo Covid, la reforma del sistema de financiación, un fondo de equiparación transitorio y la condonación de la deuda histórica.

Soler ha matizado la palabra "condonación" por la de "compensación", coincidiendo con el murciano en que parte de la deuda histórica de ambas regiones tiene que ver con la infrafinanciación. "Debemos saber qué parte de esa deuda se generó así para compensarla, porque si no la nueva etapa estaría lastrada por la anterior", ha manifestado. "Compensación es una palabra suficiente".

Además, el valenciano ha recordado que compensar la deuda histórica no supone más deuda para España de cara al extranjero, sino un reparto de la misma.

Reunión con Mazón

Mazón ha manifestado al término del encuentro que con Murcia “nos unen muchísimos frentes comunes más allá de la vecindad. Hoy estamos hablando del trasvase Tajo-Segura que es fundamental para nosotros, como estamos defendiendo nuestras tierras frente a los ataques que recibimos desde el Gobierno de España y es fundamental que profundicemos en esa vía y en la defensa del agua y de nuestras infraestructuras comunes”.

Reunión previa del consejero murciano Marín con Mazón.

El responsable alicantino también ha explicado que “hemos hablado especialmente de economía y de financiación. La Comunidad Valenciana y la Región de Murcia son autonomías infrafinanciadas y no están siendo tratadas con justicia ni con igualdad”.

El responsable provincial ha persistido en la idea de que, si la Generalitat Valenciana “es dura, es firme y reclama como se merece la justicia de nuestra financiación, tendrá a la Diputación de Alicante como un socio leal, pero exigente, con respecto a lo que demandamos las comunidades que estamos infrafinanciadas”.