¿Por qué el Parque Científico de la UA es el primer ecosistema innovador de la provincia de Alicante?
- La vicerrectora de Transferencia, María Jesús Pastor, y el director del parque, explican las características que hacen único al PCA.
- Más información: El Parque Científico de Alicante, el mayor aglutinador de empresas de Economía Circular de la provincia
La semana pasada, el Parque Científico de Universidad de Alicante (UA) informaba de que se consolidaba como el principal ecosistema de innovación de la provincia tras alcanzar las 50 compañías vinculadas a su marca. Las últimas incorporaciones (Nest Biocontrol, Dropalia y Executive TIC), avalaban el trabajo realizado en trasferencia del conocimiento desde la fundación del PCA en 2010, hace 14 años.
"Queríamos ir más allá de las incubadoras de negocio que ofrecen todas las universidades a sus egresados y docentes durante un tiempo limitado. Por eso hablamos de un ecosistema de innovación, para atraer a pequeñas, medianas y grandes empresas al campus de la UA", señala María Jesús Pastor, vicerrectora de Transferencia, Innovación y Divulgación Científica de la UA.
El objetivo, resume la también vicepresidenta de la Fundación PCA, es "generar sinergias y que esas empresas puedan incorporar el talento de la universidad. Se trata de acercar posturas entre la academia y el mundo empresarial, que necesita constantemente de innovación". Una de los mandatos que la ley impone a los campus universitarios, que el conocimiento y la investigación se aplique y beneficie a su entorno.
Con esta estrategia "todos ganamos", incide Pastor: "nuestros titulados encuentran salidas profesionales, incluso creando empresas propias, y en la universidad se generan tesis, trabajos o formación específica en las demandas que tiene la empresa. Somos una herramienta enfocada a las necesidades de nuestro entorno, alineando la formación y las prácticas al trabajo demandado".
Esteban Pelayo, director del PCA, recuerda el distinto origen y hacia dónde van enfocadas estas 50 empresas del campus alicantino. Doce de ellas se han creado por personal investigador de la propia universidad, con una lata base tecnológica. Y otras cinco por parte de los estudiantes egresados de la UA. Así, 17 firmas han salido directamente del campus.
Las otras 33 empresas son de muy ditinto tipo, están instaladas o pertenecen al parque por sus servicios. Hay desde startups que llegan por servicios de asesoramiento para la inversión o búsqueda de subvenciones, para hacer pruebas de concepto o en búsqueda de sinergias con otras empresas, a firmas más grandes.
Se trata de empresas consolidadas que buscan este ecosistema abierto y colaborativo ya que consideran la I+D como algo relevante y necesitan atraer talento donde éste se forma.
En cuanto a su especialización también es muy diversa. Por un lado, hay 17 TIC, dedicadas al software. De otro, farmacéuticas, biotecnológicas, de la salud, o referentes en la economía circular.
La relación con el parque también depende del origen. Las 12 EBT (empresas de base tecnológica) surgidas de los departamentos e investigadores de la UA tienen una vinculación directa a través del 5% del accionariado que tiene la universidad. Un porcentaje que puede ir variando con el tiempo en función del aumento de inversiones pero que en cualquier caso permite que el personal funcionario de la UA pueda emprender pese a su dedicación exclusiva para la universidad.
Instalaciones y servicios
El buque insignia del PCA es su edificio empresarial, inaugurado el año pasado, con espacios privativos para las empresas y comunes para todo el parque, lo que permite el coworking (80 plazas) y el networking. "Es un edificio escalado a las necesidades del parque que cuenta con muchos espacios abiertos para hacer eventos, con espacios diáfanos y varios salones. Por el momento solo está ocupado al 30%", señala la vicerrectora Pastor.
Además, recuerda, "todos los terrenos en lo que conocemos como campus oeste coupan un millón de metros cuadrados, aunque por el momento sólo están urbanizados 160.000. Las posibilidades son muchas, pero siempre sabiendo que no es un polígono industrial al uso, va más a allá como ecosistema innovador. Y el Ayuntamiento de Alicante ya está trabajando en la recalificación de algunos de esos terrenos".
Los planes de futuro pasan incluso por llevar algún aulario o alguna facultad a este campus oeste si es necesario. Y es que los dos campus, este y oste, cada vez están mejor comunicados y hay más tránsito entre ambos. "Tenemos los terrenos pero no los recursos, así que estamos abiertos a cualquier colaboración público-privada", añade la vicerrectora en un contexto generalizado de problemas para la financiación universitaria.
El PCA surgió en buena parte de sus laboratorios e invernaderos con un alto nivel de tecnología científica que pudo obtenerse gracias a la financiación europea de parte de sus equipos. Y entre sus virtudes cuenta con muchos profesionales técnicos especializados en los análisis que son requeridos por empresas para sus estudios.
Pelayo destaca entre las 50 empresas del PCA varios modelos de éxito en sus campos de conocimiento y en su producto empresarial. Fych Technologies, creada por un catedrático de ingeniería química con dos alumnas de tesis doctoral, que ha creado una tecnología para recuperar los plásticos de varias capas. Este desarrollo empresarial ha sido premiado por la Comisión Europea con una subvención con crédito de casi 10 millones de euros.
O Medalchemy, una empresa basada en la síntesis de fármacos que atrae a otras grandes empresas al PCA. Pero las hay también TIC como LinxView, que ha realizado el chatbot del Ayuntamiento de Alicante, o de drones, como Weitec, que desarrolla agricultura de precisión gracias a sus análisis de los cultivos desde el aire. O Labqua, que es el mayor laboratorio de agua independiente de España.