Las diez cosas que debes visitar en Ibi, la ciudad del juguete
Museos, parques y paisajes son los atractivos de esta ciudad en el interior de Alicante. La directora del Hotel del juguete cuenta lo más recomendado.
26 diciembre, 2022 06:20Visitar la que puede ser la capital del juguete en la Comunidad Valenciana es apostar por el disfrute. Situada en la comarca de l'Alcoià, rodeada de sierras como el Maigmó o la de Onil, Dolores Pérez se encarga de proponernos lo que más disfrutan las familias que visitan su Hotel del Juguete.
"Lo primero es escoger una habitación", explica. Uno de los rasgos más curiosos del espacio que dirige es que cada habitación es temática. Así se puede pedir estar en una ambientada con motivos de los muñecos de Playmobil o con las creaciones de Fisher Price. Esta es una de las últimas que ha montado junto a la de Barbie, la única oficial que hay en Europa.
Una vez establecido el punto de partida, al planificar la visita a Ibi ya hay cuatro museos que se deben tener en cuenta: el del juguete, el de la biodiversidad y el de los videojuegos.
Cuatro museos familiares
El primero es el más veterano de estos centros, que está celebrando su treinta aniversario. En el Museo Valenciano del Juguete se encuentran piezas históricas provenientes de fondos de fabricantes locales. De hecho, en la antigua fábrica de Payá Hermanos está su sede y se pueden ver los virtuosos trabajos que hacían en hojalata.
Siguiendo la temática, está Arcade Vintage. Este museo de los videojuegos representa un gran salto generacional ya que se centra en el ocio electrónico. Desde máquinas de los recreativos hasta las consolas familiares, su propuesta invita a ver en las pantallas (y a jugar) a las primeras representaciones de los personajes que hoy jugamos.
La tercera parada en lo que respecta a estos centros cambia de registro totalmente. Es el MuBio, Museo de la Biodiversidad. A través de sus salas se pueden ver ejemplares conservados de animales procedentes de África, Sudámerica o el Mediterráneo. Su colaboración con el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid les aporta también piezas espectaculares.
Igual de llamativas pero en el ámbito del vestuario son las creaciones que se pueden ver en el Museo de la Fiesta. Y cuando en Alicante se habla de ello, en muchas poblaciones se refieren a los Moros y Cristianos. Este es el caso de Ibi, así que en la llamada Casa Gran se pueden ver las indumentarias que lucen por las calles cada inicio de septiembre y entender mejor lo que representa esta tradición.
Parques tematizados
Cada una de estas cuatro paradas es obligatoria para disfrutar de una buena experiencia pero el trabajo en esta pequeña ciudad va más allá en lo que respecta a las familias. Prueba de ello es cómo han aplicado la tematización de sus instalaciones en los parques infantiles.
Los ocho parques distribuidos por el casco urbano son una curiosa atracción. En el de Giravela un impresionante barco pirata ocupa el centro del espacio para que los más pequeños puedan embarcarse en sus propias aventuras. En la glorieta Pío XI está un dragón por cuyos toboganes se pueden tirar, como también pueden hacer en la oveja de la glorieta España o el de Pocoyó en la plaza Mseyop.
Ibi realiza con estos parques un homenaje a las tradiciones infantiles y a los personajes que las han mantenido vivas a lo largo de las generaciones. Desde la Tartana de la plaza Sanchis Banús que recuerda el primer juguete que se fabricó en la ciudad, en 1905, hasta el payaso Fofó de la glorieta homónima. Si se visita la ciudad acompañado de menores de cinco años, son un recurso imprescindible.
El monumento a los Reyes Magos
En esa línea de homenajes se encuadra también la devoción a sus majestades de Oriente, los reyes magos. Mientras terminan las obras de la que será su parada en la ciudad, un bonito edificio al que Pérez recomienda echar un ojo, lo que está ya disponible para fotografiar es el único monumento en Europa dedicado a Melchor, Gaspar y Baltasar.
Sus majestades de Oriente tienen otra parada y está en las rotondas. Pérez invita a sus huéspedes a que hagan una ruta por las diversas instalaciones que lucen en el centro de estas glorietas. En una de ellas se puede ver una espectacular recreación gigante de las avionetas de hojalata que fabricaban los hermanos Payá mientras que en otra los paqueteros de los reyes están cargados de regalos.
Salir a las sierras
Hasta ahora todos estos recorridos que plantea la directora del Hotel del Juguete son urbanos pero como ciudad enclavada entre sierras, hay mucho que descubrir a su alrededor. La que más recomienda Pérez es la llamada ruta del barranco de los molinos. Siguiéndola se puede llegar hasta lo que allí conocen como La trompa del elefante, una gran roca muy plana cuya forma parece el enorme hocico de este animal. Quien se acerque podrá disfrutar de unas excelentes vistas.
[El Museo Arcade Vintage de Ibi celebra los 50 años del Pong, el primer videojuego de éxito comercial]
Y tras esa excursión o cualquiera de las propuestas, toca recuperar fuerzas. Tomar un helado en Ibi no es una cosa cualquiera. Como explica, estamos en una de las cunas de este postre. Y descubrir los pozos de nieve que hay por la zona son prueba de ello. En estos se guardaba la nieve para que aguantara más allá del invierno y entre las muchas cosas que con ella hacían estaban los sorbetes y helados. Tanto es así que los profesionales que los preparaban tienen un monumento propio, el de los Geladors.
Recorrer la ciudad y sus alrededores como si siguiera una yincana permite divertirse en familia. "Así ves que la gente disfruta", concluye Pérez. Con estas propuestas se pueden diseñar varias para aprovechar más la visita a la capital del juguete en la provincia de Alicante.