Villagrasa, apoyado por alcaldes, diputados y militantes, apela a la unión del PSOE: “Superemos la división provincial”

Apoyado por medio millar de compañeros y militantes del PSOE, Darío Villagrasa se ha dado un baño de masas en su primer acto público como candidato a liderar el partido en los próximos años. Un discurso en el que ha apelado a la historia de la formación durante 140 años, a los gobiernos de Marcelino Iglesias y Javier Lambán y, sobre todo, a la unión, invitando a “superar la división provincial” para liderar un “tiempo nuevo” en el que “derrotar al PP y la ultraderecha”.

Un Villagrasa que se presenta arropado, sobre todo, por multitud de militantes y cargos de las provincias de Zaragoza y Teruel, y también con presencia de puntos de Huesca, destacando que viene “sin mochilas”, “libre de equipajes”, y erigiéndose como “heredero de un partido de 140 años” de historia. “Yo me ofrezco a la militancia del PSOE tal y como soy, con capacidad de unir, de tender puentes, convencer, generar ilusión y dar la cara por unas siglas más importantes que la suma individual de todos nosotros”, ha aseverado.

Una historia socialista en la que no le ha temblado la voz al hablar de otras facciones del partido, reconociendo que apoyó a Pedro Sánchez, Susana Díaz, Eva Almunia, Pilar Alegría o Javier Lambán, y sobre todo a un “socialista imprescindible” como Alfredo Pérez Rubalcaba. Ahora, quiere encabezar una nueva etapa del PSOE que esté marcada por la “igualdad, unidad, fraternidad” y que se base en la “suma de capacidades y talento”.

E. E.

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El acto se ha celebrado en el parque Tío Jorge, a donde se ha desplazado todo el público tras llenar la terraza del centro cívico ubicado ahí mismo. Junto a él, destacados líderes y cargos, encabezados por la secretaria general en Teruel, Mayte Pérez, que incluso se le ha visto visiblemente emocionada en algunos momentos de la intervención, o diputados como Leticia Soria, Sergio Ortiz o Ignacio Urquizu.

No ha estado presente Lambán, pero sí miembros de sus gobiernos como las oscenses Marta Gastón y Mariví Broto o Felipe Faci, además de diputados, concejales en el Ayuntamiento de Zaragoza, entre ellos la portavoz Lola Ranera, y alcaldes de las tres provincias. Tampoco se ha dejado ver el líder socialista en Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero, aunque sí su vicepresidenta en la DPZ y alcaldesa de Ejea, Teresa Ladrero, y más miembros del grupo provincial.

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Ante todos ellos, Villagrasa ha recordado a sus abuelos, que no han podido verle como candidato a liderar el partido, y que encarnan la generación que “nos abrió el camino” y que “trabajaron 12 o 14 horas para que sus hijos pudieran estudiar y no fueran peones de otros”. “En la dignidad de esa generación quiero edificar una nueva etapa en el PSOE, con esos valores, con honestidad, con memoria”, ha afirmado.

Con todo, el ya precandidato a liderar el partido quiere “dejar atrás” los “vicios del pasado”, el “sectarismo” o la “polarización”, y salir “unidos, fuertes, con mejores ideas y equipos”. “En este proyecto de tiempo nuevo, fraternidad y unidad, vamos a desterrar la apatía, descrédito y movilización. Vamos a ilusionar, a trabajar por convencer y vencer”, ha apuntado.

El adversario de Villagrasa

Porque, a su juicio, el “adversario” no está dentro de la “familia socialista”, sino la “desigualdad” y la “desmovilización”, y marcándose como objetivo la victoria ante “el PP y la ultraderecha”. “Hoy Aragón es una tierra menos prospera, con menos derechos y oportunidades, donde los de siempre han venido a mandar, y los socialistas debemos decir que no nos vamos a resignar”, ha remarcado.

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Por ello, Villagrasa quiere salir de este proceso de primarias con la “fuerza de los militantes” para ganar las elecciones en 2027 al PP de Jorge Azcón. “Aragón no se merece un gobierno que, con el mayor presupuesto, ha dejado de lado a los que más tienen, y que ha legislado para bajar impuestos a los más ricos. Ahí está el verdadero adversario”, ha insistido, comprometiéndose, además, a restablecer la Ley de Memoria Democrática derogada por PP y Vox.

Así, Villagrasa tiene la certeza de que ha llegado la hora de “un tiempo nuevo”, con “fortaleza, ideas y voz propia”, con “ganas, ilusión, hambre de ganar y, sobre todo, de convencer”. “Creo en el PSOE, en la igualdad, unidad, fraternidad, en el socialismo, en las ideas, en el debate, y la suma de capacidades y talento. Si estamos juntos, le daremos la vuelta a un tiempo nuevo por, para y desde Aragón”, ha concluido.