Molinos de viento. Enormes estructuras de hasta 1.500 toneladas de peso que con sus gigantes aspas dibujan un nuevo horizonte al que, poco a poco, los ciudadanos van acostumbrándose y que han modificado sustancialmente el paisaje de Castilla y León.

Paisajes que en la Comunidad conviven ahora con grandes parques eólicos cuyas turbinas y palas aprovechan la fuerza del viento para generar más electricidad verde que nunca. 

España es ya la quinta potencia mundial en generación de energía eólica, sólo por detrás de China, EEUU, Alemania e India; y la segunda de Europa tras el país germano. 

La comunidad autónoma que tiene mayor potencia instalada de energía eólica es precisamente Castilla y León, origen de casi el 23% de la electricidad cinética generada en España con 13.257 Mw, según datos de Red Eléctrica de España.

Concentraciones de aspas y torres que perfilan un nuevo horizonte en los campos de Castilla y León, con un total de 284 parques en funcionamiento de los 1.345 que hay en España, según el último informe de la Asociación de Energía Eólica (AEE). 

Lo vasta extensión de su territorio ha permitido a Castilla y León convertirse en los últimos años en objeto de deseo de las multinacionales que apuestan por este sector. Una economía que no sólo viene amparada e impulsada por los objetivos del PNIEC (Plan Nacional Integrado de Energía y Clima) que persigue una reducción del 23% de los gases de efecto invernadero en 2030 sino que, además, cuenta con la presión de las principales multinacionales (Google, Apple, Amazon...) que exigen contratos de compra de energía verde a largo plazo (PPA). Sólo el gigante fundado por Jeff Bezos ya había alcanzado el 85% de energía verde en todos sus procesos hace ya dos años.

En este escenario cobran especial protagonismo territorios que cuentan con los elementos necesarios para una inversión segura en parques eólicos y que han encontrado en el aprovechamiento del viento, una nueva economía.

Así, el mapa de los parques eólicos se dibuja especialmente concurrido en Burgos, Palencia y Soria, con una capacidad de generación de energía eólica capaz de abastecer de toda la electricidad que necesitan los 2,5 millones de hogares de Castilla y León.

De hecho, es ésta la Comunidad cuyo sector eólico más contribuye al PIB nacional con 776 millones de euros, lo que consolida a este territorio como la mayor potencia de este sector en España. Unos aerogeneradores que evitan la emisión de más de 6 millones de toneladas de CO2 al ambiente gracias a sus 6.507 MW acumulados, situándose así en el primer puesto de este ránking.

Sin embargo, el ritmo de nueva potencia eólica instalada en Castilla y León ha ido perdiendo fuelle en el último ejercicio. Mientras Castilla La-Mancha ponía en funcionamiento 837 nuevos Mw y Aragón hacía lo propio con 492 nuevos Mw, la comunidad castellana y leonesa sumó sólo 105 nuevos Mw a su parque eólico.

Del listado de las diez provincias de España que más eólica generan, hay tres de Castilla y León. Mientras Zaragoza lidera este filtro con 8.419 Mw generados, Burgos se coloca en tercera posición con 4.511 Mw, Soria en octavo lugar con 2.402 Mw y Palencia penúltima con 1.800 Mw.

Dónde se concentra la mayoría de parques eólicos

Los datos del Anuario Eólico 2023 elaborado por la AEE indican las zonas donde hay una especial concentración de parques eólicos en Castilla y León, principal generadora de esta energía limpia en España.

Así, destaca la zona burgalesa comprendida entre Merindad de Montija, río Ubierna, Valdeporres, Valdivieso y Valle de Valdecabeza, con 15 parques eólicos con una potencia de cerca de 220 MW, si bien estos gigantes molinos se encuentran dispersos por otras áreas de la provincia como Alfoz de Quintanadueñas y Carcedo de Burgos. Destacan también los otros tres parques eólicos ubicados en La Riba de Valdelucio.

El paisaje burgalés comparte escenario con estos aerogeneradores también de manera especial en Castrojériz y alrededores, con otros 8 parques eólicos que cuentan con una potencia de casi 170 Mw. En total y según datos del Eren (Ente Público Regional de la Energía de Castilla y León), en Burgos había 2.140 Mw de eólica en funcionamiento a cierre del año pasado.

A este mapa se le unen los cuatro parques de aerogeneradores que hay en el área de Huérmeces, con más de 65 Mw.

Lo mismo ha ido ocurriéndole al horizonte palentino con una zona de Ampudia y alrededores donde se concentran seis importantes parques eólicos que suman 187 Mw, otros tres parques en Astudillo y los cinco de Fuentes de Valdepero. A estos hay que sumarles otros seis parques eólicos en Hornillos de Cerrato, Baltanás y la zona de Torquemada, con una potencia de 166 Mw.

Los viandantes y conductores que cruzan Magaz de Pisuerga, también van acompañados de los aerogeneradores que recogen la fuerza del viento en los cuatro parques eólicos con que cuenta esta zona palentina, al igual que quienes hagan lo propio en Monzón de Campos, con otros cuatro parques eólicos de 23 Mw aproximadamente, pasen por Aguilar de Campoo, que cuenta con otros tres u observen el movimiento de las gigantescas aspas de los de Paredes de Nava.

La provincia de Soria se ha ido llenando también con los años de estas gigantes estructuras hasta alcanzar los 1.263 Mw, concentrados especialmente en el área de Medinaceli, Adrada, Alcubilla y Ágreda. En Ólvega, Oncala y Borobia también ha ido abriéndose paso esta industria con seis importantes parques cinéticos.

En Valladolid los cielos también se mezclan a lo largo de muchos kilómetros con aerogeneradores de energía limpia. Las áreas con una mayor concentración de parques eólicos están en Castromonte y alrededores (La Mudarra, Villalba de los Alcores, Peñaflor de Hornija, Torrelobatón...), con 18 parques eólicos. 

Zamora es la otra de las provincias de Castilla y León que cuenta con un mayor peso en este aspecto, con 612 Mw de potencia eólica en funcionamiento según el Eren. Con 29 parques eólicos de los 284 que hay en la Comunidad, tiene en la zona de Hermisende, Pías y Lubián, su mayor concentración de parques cinéticos con 15 unidades.

El resto de las provincias de la Comunidad también cuenta con distinos parques eólicos diseminados por sus territorios que poco a poco van fundiéndose con el paisaje castellano y leonés, pero su peso es, por ahora, significativamente menor.