Matando vacas para pagar facturas: los ganaderos de Castilla y León se movilizarán ante una situación "desesperada"

La Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) anunció hoy movilizaciones de ganaderos de vacuno de leche en Segovia y Ávila los próximos días 25 y 26 de mayo, respectivamente, para exigir a las industrias que garanticen en sus contratos al menos los costes de producción. El coordinador regional de la UCCL, Jesús Manuel González Palacín, denunció una bajada unilateral de los precios que perciben los ganaderos de entre siete y ocho céntimos por litro el último mes lo que unido al aumento desmesurado de los costes de los forrajes y la paja para alimentar a los animales, está llevando a muchos profesionales a “matar vacas en producción” para poder pagar, lo que pone en jaque a las explotaciones, así como al abastecimiento de la industria.

Palacín y el responsable del Sector Lácteo de la opa, David Alonso, ofrecieron una rueda de prensa, para denunciar la situación generada, indicaron, principalmente por las distribuidoras, que están provocando, dijeron, una “situación desesperada” para el sector en un contexto de “tormenta perfecta”. Palacín exigió en este contexto la intervención inmediata de las administraciones para que se cumpla la ley de cadena alimentaria, y presionen a industria y distribución para que paguen precios justos.

El dirigente sindical también exigió ayudas y cargó contra los fondos previstos por el Gobierno para el sector por la sequía, que son “totalmente insuficientes” porque sólo dan “para paliar tres días de comida para los animales”. En este sentido, lamentó que se considere a Castilla y León, como una autonomía con afectación media por la sequía cuando más de la mitad está en situación extrema.

“Los productores pierden mucho dinero por litro”, dijo Palacín, quien insistió en que los ganaderos optan por “sacrificar vacas”, para precisar que sólo este mes han aumentado los animales a mataderos un diez por ciento en comparación a 2022. “O se vuelven a garantizar los precios o bajaremos más de un diez por ciento las producciones este año", en un país que ya es deficitario, ya que “sólo produce el 30 por ciento de los que consumimos”.

Palacín advirtió de que las movilizaciones son un “primer toque de atención” y consideró que aún se está a tiempo de reconducir la situación. “Sino se hace pronto estamos abocados a una reducción dramática de producción en un sector ya muy tocado por la crisis, que es el segundo en peso en España”, comentó.

David Alonso precisó, en este sentido, que según el observatorio alimentario de la Junta, los costes de producción de un litro de leche en la Comunidad se sitúan en los 58 céntimos, cuando los contratos medios se están suscribiendo a 54,5, lo que supone que el ganadero pierde 3,5 céntimos por litro. Al respecto, felicitó a la Junta por publicar el dato de referencia y sentenció que “todos los contratos por debajo de ese precio son ilegales”.

Alonso incidió en que no quieren la ayuda “insuficiente” de 30,5 euros por vaca del Ejecutivo central sino que se cumpla la ley de cadena alimentaria. Asimismo, exigió al Gobierno que devuelva el IVA del año pasado, ante la “situación crítica” de las ganaderías, con una caída de ingresos cuando, por ejemplo, la alfalfa ha pasado de 220 euros por tonelada el año pasado a 380.

El responsable agrario recordó que en Castilla y León subsisten 761 explotaciones ganaderas de vacuno de leche, cuando hace cinco años eran 1.140, y puso de relieve que sino se interviene “urgentemente” este año se seguirán perdiendo.

David Alonso recordó que la patronal láctea FENIL demandó hace una semana que se garantizase el suministro de leche que estará en peligro tras el verano, dijo, con “los sacrificios de vacas sanas en producción para pagar facturas” y la sequía.

Asimismo, cargó contra una multinacional francesa que está comprimiendo el mercado con importaciones de leche (Lactalis) así como contra las distribuidoras como las máximas responsables de la situación actual en un país donde se construyen los precios “de arriba abajo, y no al revés”. Así, precisó que las concentraciones se desarrollan en Segovia frente al Carrefour y en Ávila frente a un DIA.

"Medidas y dinero encima de la mesa"

Asimismo, en la rueda de prensa de este miércoles han exigido a Junta que “ponga medidas y dinero encima de la mesa” durante la reunión convocada para mañana del Consejo Agrario.

Palacín incidió en que la Junta debe complementar la partida aprobada por el Gobierno que es “totalmente insuficiente” tras “discriminar” a la Comunidad “de forma totalmente injusta” al situarla como de afectación media de la sequía, cuando su situación es “extrema”.

El líder agrario recordó que otras autonomías ya han puesto dinero para el campo en sus territorios y esperó que la junta siga ese camino mañana y complete los fondos del Gobierno para paliar una situación de sequía que es la peor d ellos últimos años. “Ni en el 92 fue tan dura”, dijo, para constatar que este año el campo “vive con la gravedad añadida de que los costes de producción no tienen nada que ver y han aumentado al doble”.

Jesús Manuel González Palacín concretó que “poner en marcha” un hectárea de cereal cuesta alrededor de 1.000 euros, lo que supone que “los primeros 3.000 kilos van a cubrir costes” y la media en amplias zonas de todo el sur de la Comunidad, “no llega a 800 kilos”.

Aseveró que este año se perderá dinero “incluso con el seguro” por lo que apeló a “dar una vuelta” a las pólizas; pero sobre todo, insistió, es preciso poner ayudas directas y liquidez para que los profesionales del sector puedan afrontar la campaña que viene.

Una situación de los cultivadores a la que se suma la de los ganaderos que “sufren la sequía dos veces”, dijo, porque “se quedan sin pastos y lo que compran está a precios altísimos”. “Sin agricultores y ganaderos no vamos a ningún lado”, sentenció.