El zamorano Gregorio Álvarez Cabreros, CEO de Ibereólica

El zamorano Gregorio Álvarez Cabreros, CEO de Ibereólica

Empresas

El humilde zamorano que levantó un imperio de las renovables: "El tiempo me ha dado la razón"

Publicada
Actualizada

Noticias relacionadas

Gregorio Álvarez Cabreros (Cerecinos de Campos, 1968) es un auténtico pionero de las energías renovables en España. Presidente y fundador del Grupo Ibereólica, que impulsó en 1996, ha basado su trayectoria en un liderazgo visionario, un firme compromiso con la sostenibilidad y la creación de valor en el mundo rural.

Este ingeniero industrial con orígenes humildes, que logró estudiar en la Universidad Laboral de Zamora gracias a una beca, encontró su pasión por las renovables durante su estancia en la Universidad Politécnica de Madrid y ha logrado construir una empresa reconocida en el sector habiendo empezado desde cero.

Galardonado recientemente con el Premio Zamorano Ilustre de Caja Rural de Zamora, su mayor objetivo es seguir contribuyendo a la creación de valor y riqueza, dando respuesta a las nuevas necesidades que va detectando, generando riqueza y empleos de calidad en las regiones en las que opera Ibereólica.

Un compromiso con el territorio que se observa a través de proyectos tecnológicos, sociales e impulso de iniciativas locales con el objetivo de integrarse en las regiones en las que desarrolla los proyectos, que, para este zamorano, es la base para identificar las oportunidades de crecimiento.

Pregunta.- ¿Cómo se define Gregorio Álvarez Cabreros?

Respuesta.- Soy una persona disciplinada, ordenada y trabajadora, con mucha ilusión y ganas de crear proyectos nuevos y sobre todo soy un luchador y amigo de mis amigos, incluso de mis operarios. Empecé de cero y sin trabajo no hay nada.

P.- ¿Qué significa la provincia de Zamora para usted?, ¿cómo recuerda su infancia y juventud en tierras zamoranas?

R.- Para mí Zamora significa mucho, de hecho, todavía estoy empadronado en Cerecinos de Campos, mi pueblo natal, donde ahora estoy desarrollando una planta de biogás.

Mi infancia la recuerdo muy divertida, he sido una persona muy feliz, ayudando a mis padres, jugando con mis amigos, siempre me ha gustado trabajar y disfrutar.

"Para mí Zamora significa mucho"

Fui a las escuelas de Villalpando hasta 8º de EGB y después a la Universidad Laboral de Zamora donde hice FP1 y FP2, Ingeniería Técnica Industrial siempre a año por curso y mis buenas notas en Zamora me permitieron hacer el curso puente y estudiar ingeniería industrial en la Universidad Politécnica de Madrid en 1990.

Después, me quedé allí 10 años de profesor en el departamento de Ingeniería Eléctrica.

P.- Cuenta con un origen humilde, ¿cuáles cree que han sido las claves de su éxito?

R.- Creo que la clave ha sido hacer cosas que no ha hecho todo el mundo. Aposté por las energías renovables en un momento en el que nadie creía en ellas y tuve la suerte de venir a Madrid, de trabajar en el departamento de Ingeniería Eléctrica y vi una oportunidad y vi que había posibilidades de crecimiento en la energía eólica.

"Siempre he tenido ADN empresarial"

También suerte de estar en la mejor escuela de España de ingeniería que es la Escuela de Ingenieros Industriales de Madrid y también ver una oportunidad que no veían otros, porque siempre he tenido el ADN empresarial que me inculcó mi padre, que a pesar de ser humilde era un pequeño constructor.

P.- En 1996 impulsó Ibereólica con una visión pionera a la hora de apostar por este sector, ¿de dónde le surgió el interés por las energías renovables?

R.- En la Escuela de Ingenieros Industriales teníamos acuerdos con Red Eléctrica y tuve la suerte de que me encargaron una central hidroeléctrica de cinco megavatios en Potes y vi que había viabilidad y que había un Real Decreto que te compraba toda la energía.

Entonces pensé en desarrollar centrales por mi cuenta, impulsé Ibereólica Renovables y tuve la suerte de desarrollar el Canal de Castilla y más tarde conocí a mi mujer, que trabajaba en Acciona, y estaban desarrollando parques eólicos y es cuando me metí de lleno y me permitió empezar a desarrollar proyectos eólicos en 1999. 

P.- ¿Qué balance hace de estos 28 años de trayectoria?

R.- El tiempo me ha dado la razón, porque yo antes era un incomprendido cuando iba a ver a las empresas porque pensaban que las energías renovables eran una cosa de poco y alternativas y hoy nadie habla de otro tipo de energía en el mundo.

"El tiempo me ha dado la razón"

Mi empresa ha ido siempre creciendo, siempre he tenido resultados positivos gracias al esfuerzo que hemos hecho y hoy tenemos casi 200 empleados. Eso me permitió pasar del primer megavatio a tener hoy 1.100 megavatios en explotación, habiendo construido casi 2.000.

P.- ¿Qué significó para usted la concesión del Premio Zamorano Ilustre de Caja Rural de Zamora?

R.- Fue muy bonito, muy significativo y muy importante porque fue como consolidar una trayectoria y ver a esas 2.200 personas que estuvieron en el acto fue espectacular y pude dar las gracias a políticos muy relevantes que en su momento no confiaron en mí pero ahora se han dado cuenta de que Ibereólica es una empresa de largo plazo.

"Ser profeta en tu tierra no es fácil"

Me han dado premios nacionales e internacionales más importantes pero ser profeta en tu tierra no es fácil y eso lo valoro mucho. Sigo creyendo en la provincia de Zamora y creo que hay oportunidades.

P.- A su juicio, ¿cuál es el potencial de Castilla y León en el sector de las energías renovables?

R.- Castilla y León es una de las regiones más importantes del mundo y la más importante de España en energía eólica porque tiene grandes superficies de terreno, grandes líneas de alta tensión y si se hacen las cosas bien los pueblos tienen ganas de que hagamos energías renovables porque generamos ingresos. Es un círculo virtuoso.

La tecnología, además, ha venido a mejorar mucho porque la eólica antes solo se ponía en zonas de Aragón, en Tarifa o Galicia, pero hoy en día las máquinas han evolucionado tanto que es mejor un parque eólico en Valladolid que en las montañas de Cantabria porque tiene menos impacto ambiental y produce lo mismo.

P.- La despoblación es uno de los problemas más graves que adolece Castilla y León, ¿qué papel juega Ibereólica a la hora de asentar población y dar futuro a los territorios en los que se encuentra?

R.- Es uno de los principales nichos de mercado. Hace años vi que había una oportunidad en los pueblos y tras la pandemia recorrí Castilla y León y otras comunidades como Extremadura y empecé en Paredes de Nava con una planta de girasol, oliva y colza y generamos 200 puestos de trabajo de largo plazo.

"Tratamos de desarrollar algo diferente, que aporte tecnología al campo"

Después, en Villalpando y Cerecinos, en mi tierra, vi la oportunidad de hacer plantas para la producción de gas renovable y fertilizantes orgánicos, llegando a un acuerdo con el Consorcio del Ovino de Villalpando.

También en Lerma, en la provincia de Burgos, y en Galicia empezamos con el aprovechamiento del agua para hacer un hotel-balneario. Tratamos de desarrollar algo diferente, que aporte tecnología al campo, a las áreas logísticas y a las renovables, y nunca pienso en el corto plazo, pienso a largo plazo.

P.- ¿Cuáles son las principales líneas de trabajo de Ibereólica en estos momentos?, ¿y sus proyectos a medio plazo?

R.- En España estamos haciendo proyectos de energía eólica y ahora vamos a empezar a desarrollar centros de datos alimentados con energía eólica y algo de hibridación solar y almacenamiento. 

También tenemos un principio de acuerdo con Cepsa para suministrarles parte de la energía para el hidrógeno y estamos hablando de la friolera de 4.000 megavatios a desarrollar en los próximos seis años.

Y también desarrollar la planta de aceite de Paredes de Nava, que es nuestro gran proyecto agroalimentario, y tenemos una planta de hidrógeno en Lerma que está a punto de ser autorizada.

"La planta de Paredes de Nava es nuestro gran proyecto agroalimentario"

Tenemos un proyecto muy avanzado en Cáceres y tenemos 1.200 hectáreas de olivar y estamos centrados en hacer un aceite de calidad y con huella de carbono muy bajo.

También el proyecto inmobiliario con una gasolinera, un área de descanso y un museo en Villalpando y, a nivel internacional, estamos construyendo un proyecto de 364 megavatios en Chile y otro de 1.200 híbrido eólico-solar con almacenamiento en el desierto de Antofagasta.

En Perú tenemos un desarrollo inmobiliario muy bonito y también un parque eólico en desarrollo de 220 megavatios, otro que hemos vendido a una empresa y una planta fotovoltaica de 675 megavatios. Y en Brasil estamos desarrollando un proyecto eólico y solar muy grande.

P.- ¿Cuál es su valoración de la importancia del hidrógeno verde?

R.- Creo que es futuro pero no es presente, porque los números no están. La tecnología está, pero es cara, aunque donde pienso que el hidrógeno verde triunfará es en las grandes petroleras.

Hay otros combustibles sintéticos y renovables que utilizan hidrógeno que creo que van a tener futuro, nuestro objetivo es promocionarlo y vender energía para que se produzca el hidrógeno. Los que tienen que cambiar la matriz y que se reduzca la huella de carbono son las grandes petroleras, que tienen que acelerar.

Me interesa que crezca el hidrógeno verde porque es un gran consumidor de energía renovable, aunque veo más futuro a los gases renovables y aprovechamiento de residuos porque es biometano o biogás que lo inyectamos en la red y lo único es que se produce de forma renovable, pero es el mismo gas.

P.- ¿Qué importancia tienen la digitalización y la innovación para Ibereólica?

R.- Hay una oportunidad en la digitalización en el mundo del campo, en productos como la aceituna para producir aceite, para que se controle el producto y tenga la máxima calidad. La digitalización en el eólico es algo habitual, pero hay mucho que digitalizar.

"Para competir hoy día en los mercados es necesario optimizar los procesos"

Nosotros hemos creado un área de sistemas que no teníamos hace dos años y hemos digitalizado todos los procesos contables, financieros y todas las obras. Es cierto que cuesta adaptarse a ella y tiene un coste pero es clave para ser competitivos, para competir hoy día en los mercados es necesario optimizar los procesos.

P.- Ibereólica es conocida por su compromiso social, ¿podría resumirnos algunas de las iniciativas más importantes en las que se encuentran embarcados?

R.- A mí siempre me ha gustado mucho el deporte y me interesan los valores del deporte, como la competición sana o el trabajo en equipo. Somos patrocinadores del Comité Olímpico, del Leyma Coruña o del Tizona Burgos en baloncesto, y prefiero invertir en eso que en otras cosas.

"Allá donde vamos apoyamos iniciativas deportivas y culturales"

Lo considero una forma de ver la vida que aporta un valor a la sociedad. También invertimos en cultura, por ejemplo, hemos contribuido a impulsar a los gaiteros de Lubián. Allá donde vamos apoyamos iniciativas deportivas y culturales.

P.- ¿Qué tipo de liderazgo intenta ejercer en el día a día?

R.- Me gusta mucho la técnica, me gusta tanto y me divierto con lo que hago, con la creación de los proyectos, que me implico en ellos y apuesto también por respetar mucho el medio ambiente y las costumbres de los territorios en los que nos encontramos.

Cada día voy creando líderes pero todavía me necesitan, sobre todo para crear los proyectos, no tanto para explotarlos ya que tenemos la suerte de que, una vez que se ponen en marcha, lo que hay que hacer es cumplir con los acuerdos con propietarios y con la administración y cuidar tu maquinaria.

Participo en todos los proyectos nuevos y en los que funcionan tengo reuniones cada tres meses con los directores de explotación.

P.- ¿Qué futuro le pronostica a Ibereólica y al sector de las energías renovables?, ¿qué retos tiene el sector en la actualidad?

R.- El futuro es esperanzador, porque hoy día no cabe hacer ningún tipo de energía que no sea renovable. Del 100% de la energía solo el 33% es eléctrica y el reto ahora es descarbonizar y reducir la matriz a través de las energías renovables.

Hay un futuro brutal y hay un reto muy importante que es el almacenamiento de la energía, que todavía es caro y hace falta trabajar en él, hay que reducir los costes y creemos que la única solución para reducir los combustibles contaminantes es la energía renovable con almacenamiento.

"Hay que descarbonizar la matriz y reducir los residuos"

Pero hay que saber con quien se está, hay mucho especulador que no trabaja y hay que estar con empresas de largo plazo, a las que nos gusta lo que hacemos y que tenemos una trayectoria.

Hay un futuro impresionante, hoy solo se habla de sostenibilidad en el mundo y hay que descarbonizar la matriz, reducir los residuos y hacer que tengamos un planeta más limpio y más cuidado, que se puede hacer y se puede hacer a buen precio. Creo que el mundo va encaminado por esa línea.