La Fundación Municipal de Cultura de Valladolid va a modernizarse para unificar a las entidades que dependen de ella, la Seminci, el Museo de la Ciencia, el Patio Herreriano y el Teatro Calderón. Así lo ha expuesto este lunes la concejala de Cultura y Turismo, Ana Redondo, que ha señalado que el objetivo es que “sea una orquesta mejor afinada, de cara al exterior no se notarán grandes cambios, se mantendrán las programaciones autónomas, pero va a mejorar la eficiencia y la gestión económica”.

De esta manera, la Fundación se convertirá en una gran entidad, con un presupuesto que rondará los 14 millones de euros al año y del que dependerán unos 70 trabajadores. Hasta ahora, estas entidades han prestado múltiples servicios de primer nivel, bajo distintos grados y formas de vinculación con el Ayuntamiento, si bien todos ellos se caracterizan por una creciente dependencia financiera, un progresivo debilitamiento estructural, de plantilla y de capacidad de gestión de áreas claves de su competencia, y una muy intensa demanda de servicios de apoyo públicos.

Por ello, Redondo ha planteado que esta unificación “va a permitir dar respuesta a una exigencia legal, con la normativa general de estabilidad presupuestaria del sector público”. Las restricciones para poder cubrir bajas y jubilaciones y la ausencia de la reposición de las plazas, “genera grandes problemas para que cuando se produce uno de estos casos se pueda mantener la carga de trabajo entre los empleados de cada entidad”.

Esta reorganización “permitirá que tengamos equipos de coordinación para la programación, con un nuevo programador que ayude a esta gestión conjunta y también preste especial atención al LAVA”, y también “equipos transversales para poder suplir esas bajas o jubilaciones, con una estructura más amplia que afectará positivamente a una gestión transversal de patrocinios”.

Nuevo gerente

La nueva Fundación estará encabezada por un gerente, puesto para el que hay presentados 35 aspirantes, tal y como ha desglosado Redondo, que ha puntualizado que tendrá una labor clave en el proyecto, que tras los obligados trámites administrativos, se prevé entre en funcionamiento a partir del próximo 1 de enero de 2018.

Garantías para los trabajadores

Respecto a los trabajadores de las distintas entidades, los informes previos garantizan la estabilidad en el empleo de todas las personas actualmente empleadas por las entidades que se incorporan a este proceso de modernización, abriendo, además, la posibilidad a mejoras en las condiciones de trabajo, valoración de puestos que llevan décadas sin ser modificados, y de desarrollo de una verdadera carrera profesional en una entidad que contará con cerca de 70 trabajadores.

Además, la integración de los equipos de estas cinco entidades permitirá cubrir los huecos de perfiles y conocimientos que ahora existen en cada una de ellas, pero que conjuntamente pueden complementarse. Incluso se podrá aprovechar la tasa de reposición que en estos últimos años no se ha podido emplear por la fragmentación en entidades independientes.

Esta cuestión se abordará a través de la negociación con los representantes de los trabajadores, en el marco del proceso de integración, siempre desde la base de la absoluta garantía del derecho de los trabajadores al mantenimiento de las condiciones de trabajo de origen y a las mejoras que en caso de integración en la plantilla de la FMC pudieran corresponderles, previos los procedimientos de consolidación legalmente establecidos.

En cuanto a las infraestructuras, la puesta en común de los recursos humanos de todas estas entidades permitirá formar un equipo único, con todos los perfiles técnicos necesarios para garantizar un adecuado mantenimiento y gestión del conjunto de infraestructuras fijas y temporales, contando con medios financieros igualmente suficientes a tal fin, y generando evidentes ahorros derivados de una gestión conjunta de contratos.