El vallisoletano que ficha a 600 enfermeras para trabajar en los hospitales de Cataluña
Jesús Jiménez es el encargado de contratar a los más de 600 andaluces incorporados al sistema sanitario, niega que haya un problema con el idioma
12 diciembre, 2021 06:00Noticias relacionadas
Desde hace unos días, los enfermeros y las enfermeras andaluces se han convertido en los protagonistas de los hospitales catalanes. Más de 600 profesionales han abandonado su tierra para trabajar en Cataluña ante su escasez y la demanda que se ofrece desde el Institut Catalá de la Salut. Una noticia que no ha sentado bien a la Plataforma per la Llengua que ha exigido a la Generalitat que «garantice» la atención en catalán, algo que ven peligrar por la llegada de los sanitarios de otras comunidades. La misma asociación que ha señalado a los profesores universitarios que dan clase en castellano.
Pues bien, detrás de todas esas contrataciones se encuentra un vallisoletano, Jesús Jiménez, que llegó a Barcelona hace ya siete años “porque necesitan gente para trabajar”. Jiménez es el delegado sindical de Comisiones Obreras y el representante de la acción sindical Hospital de la Vall d'Hebron donde trabaja como técnico en cuidados auxiliares de enfermería. EL ESPAÑOL Noticias de Castilla y León ha logrado hablar hace unos días con la persona más solicitada. El pasado verano comprobó que ante una posible ola de covid y con las vacaciones del personal, el hospital iba a necesitar más profesionales. “Pues si no hay, se buscan, yo me encargo”, afirmó el vallisoletano y se echó a sus espaldas la responsabilidad de buscar a enfermeras.
Escribió a muchas universidades y donde tuvo mucho éxito fue con las de Andalucía. “De Valladolid no recibí respuesta y de Ávila sí he logrado que venga alguna”, apunta. Y así es cómo se encargó de ser el ‘contratador’ de entre más de 700 currículums que llegaron. Como es lógico la primera pregunta que le hacían los aspirantes era “¿se necesita el catalán?”. Jesús contestaba por experiencia personal: “No, no es un problema, hay dos idiomas, y podéis hablar el que queráis”, era su respuesta.
Él, en sus siete años de vivencias en Barcelona, nunca ha tenido un problema con el idioma, aunque es cierto que se pone como “requisito” para la oposición. “Yo hablo castellano porque estoy más cómodo, pero es un idioma fácil y si tengo que usarlo, lo uso. La verdad es que lo aprendes sin querer”. Como anécdota recuerda que “salvo abuelos de la montaña nunca he me encontrado a un paciente que no me entendiera. Por aquí han pasado alemanes, ingeles, y jamás hemos tenido problemas y no han tenido peor asistencia”, por lo tanto niega que la atención sea peor por culpa del idioma.
Jiménez se niega a pensar que haya “un problema con el idioma en la Sanidad” y asegura que esta polémica surge de un grupo “externo” que no conoce su funcionamiento y que les conviene que “ahora salga esto”. Además recuerda que esta misma semana el conseller de Salud de la Generalitat, Josep Maria Argimon, ha trasladado su bienvenida a los enfermeros incorporados recientemente al sistema sanitario de Cataluña. “Las gerencias de los hospitales lo han pedido, porque son conscientes de que la salud está por encima del idioma. No puedo creer que alguien del Govern se involucre en esto”.
“En Cataluña hay mejores salarios que en Castilla y León”
Ahora bien, el delegado sindical es muy crítico con la gestión que se está realizando de la Sanidad en Castilla y León, a la que considera “obsoleta” en comparación con la de Cataluña. “Tenemos un gobierno antiguo, son demasiados años del mismo color, y no se ha hecho nada por innovar. Es cierto que la nueva consejera ha intentado hacer algo, pero no se la puede pedir que cambie todo de la noche a la mañana”.
Dicen que las comparaciones son odiosas, pero en este caso, el sindicalista no duda en poner ejemplos de “envidia” que tiene de la Sanidad catalana respecto a la castellano y leonesa. “Me da envidia todo. Desde los ratios de enfermera hasta de los técnicos de auxiliares de enfermería. En Cataluña son de ocho pacientes en Castilla y León de más de 15. En Cataluña hay más trabajo de equipo, en Castilla y León hay mucho clasismo en las direcciones médicas”, evalúa. Además, como experto en Urgencias, señala que en tierras catalanas “están bien estructuradas” y pone de ejemplo que en el Hospital Clínico de Valladolid, un paciente “puede pasar por tres habitaciones diferentes”.
Con todo esto, Jiménez abre las puertas a todos los castellanos y leoneses que quieran trabajar en Cataluña y lo hace con una oferta muy suculenta: “Aquí tendrán mejores contratos porque los salarios en Castilla y León son bajísimos y no existe una partida para objetivos y motivar al personal. Aquí la paga de objetivos se iguala a otra extra”. Y no, el idioma no es ningún problema.