La pugna entre PP y Vox por las consejerías retrasa la investidura de Alfonso Fernández Mañueco a la próxima semana. La sesión de las Cortes de Castilla y León en la que se elegirá al dirigente popular como presidente se celebrará, como pronto, el martes 29 de marzo, después de que no se haya reunido durante la jornada de este miércoles la Junta de Portavoces, un paso previo indispensable para la investidura, que debe producirse 48 horas hábiles antes de la misma. La fecha límite es el jueves 31 de marzo, una jornada en la que, si no se ha celebrado ya la sesión, deberá convocarse obligatoriamente.
El 25 de marzo, la fecha deseada por Mañueco que ya es inviable
De este modo, decae la posibilidad que parecía más probable durante las últimas semanas de que se celebrase este viernes 25 de marzo, una opción que comenzó a vislumbrarse como la más factible después de que UPL y Soria Ya registraran su grupo parlamentario conjunto el pasado 17 de marzo, lo que permitía acelerar los plazos, al estar configurados todos los nuevos grupos. La fecha del día 25 era, además, la preferida por Mañueco y el Partido Popular, cuya prioridad era configurar cuanto antes el nuevo Ejecutivo y alejar lo más posible la investidura del Congreso extraordinario del PP, previsto para los días 1 y 2 de abril.
El retraso en los plazos provocará que, finalmente, la conformación del Gobierno de coalición, fruto del incómodo pero necesario acuerdo del PP con Vox, pueda empañar el encumbramiento de Alberto Núñez Feijóo como flamante nuevo presidente del partido a nivel nacional. Después de que se convoque finalmente la Mesa de las Cortes y la Junta de Portavoces, es condición sine qua non que transcurran 48 horas hábiles hasta el día del pleno, motivo por el que, sin estar ambos órganos convocados para este jueves y sin una fecha concreta para su reunión, es imposible que la investidura pueda ser el día 25 o el 28.
PP y Vox quieren pulir los últimos flecos del Gobierno antes de la investidura
Este inesperado retraso de la sesión que permitirá a Mañueco revalidar su mandato como presidente de la Junta se debe a que PP y Vox están centrados en pulir los últimos flecos del Gobierno de coalición, el primero del que formará parte la formación de García-Gallardo en sus ocho años de historia como partido. Este martes, el presidente de las Cortes, Carlos Pollán, ya anticipaba que los dos partidos están buscando a "los mejores" para ocupar las consejerías y que esa era su prioridad en este momento.
La pugna por las consejerías entre ambas formaciones es otro de los hándicaps que están dilatando el proceso. VOX tiene gran interés en ocupar las carteras de Agricultura, Cultura y Empleo, además de la vicepresidencia. La formación de García Gallardo también reclamó el control de la Dirección de Comunicación, actualmente adscrita al presidente, pero fuentes del PP aseguran que se mantendrá en sus manos.
Tanto PP como Vox son conscientes de que la Consejería de Agricultura es un inmejorable escaparate de cara a conseguir un buen resultado en las elecciones municipales previstas para mayo de 2023, que se dirimirán, en gran parte, en el medio rural de la región.
Por otro lado, Vox no cesa en su empeño de aspirar a departamentos como Educación y Familia, que tratan asuntos clave para la formación como la "lucha contra el adoctrinamiento en las aulas" -aspecto que refleja el acuerdo de Gobierno con el PP- o políticas de natalidad que contribuyan a frenar la despoblación de Castilla y León.
Para Vox, fomentar la "natalidad nacional" es la fórmula más adecuada para combatir la despoblación y ha criticado que el resto de partidos optan por resolver este problema "trayendo inmigrantes". En materia educativa, el partido apuesta por "proteger el derecho de las familias a elegir el tipo de educación que quieren para sus hijos, desalojando a los activistas políticos de las aulas y garantizando la igualdad de oportunidades en la enseñanza mediante el cheque escolar, y mejorar la FP para facilitar la integración laboral de los jóvenes". Con todo, parece complicado que los populares cedan en dos departamentos con un fuerte trasfondo ideológico.
El nuevo vicepresidente de facto, Juan García-Gallardo, afirmaba el pasado viernes, tras su reunión con el presidente de las Cortes, que esperaba poder concretar las consejerías que ocuparía Vox a principios de esta semana, algo que no se ha cumplido. Cuando estos flecos terminen de pulirse, y se convoque la Junta de Portavoces –con lo que se sabrá por fin la fecha de la sesión de investidura– se resolverá definitivamente un periplo político que se inició el pasado 13 de febrero, tras las primeras elecciones anticipadas y en solitario de la historia de la Comunidad.