La Junta llama al confinamiento voluntario de Burgos y prohíbe las reuniones de más de 3 personas
La Junta de Castilla y León ha hecho un llamamiento urgente hoy a los habitantes de Burgos, especialmente a la capital, para el "confinamiento voluntario" y anuncia más medidas restrictivas ante la situación epidemiológica "muy, muy preocupante" en relación a los casos de COVID. Según datos aportados por el vicepresidente, Francisco Igea, la capital acumula en 14 días una incidencia acumulada que superará en unos días los 1.800 casos por cada 100.000 habitantes.
Se realizarán rastreos masivos entre la población, como ya se ha hecho en la localidad leonesa de San Andrés del Rabanedo, y se restringen aún más los aforos, celebraciones religiosas y civiles, y se incrementan los puntos de toma de aguas residuales para su análisis. Asimismo, se prohíben las reuniones de más de tres personas no convivientes "en cualquier ámbito", incluido el domiciliario.
La Junta ya ha comunicado al alcalde de la ciudad, Daniel de la Rosa, estas medidas. "Tras varias conversaciones, esta mañana le he trasladado formalmente al Gobierno autonómico la honda preocupación del Ayuntamiento ante la grave situación epidemiológica en Burgos y varias sugerencias de medidas que puedan ayudarnos a revertirla. Confío en una pronta respuesta", comunicaba esta mañana el regidor a través de sus redes sociales.
Esta tarde hay prevista una reunión con responsables del Ministerio de Sanidad, con el objetivo de analizar todas las medidas posibles para reducir los contactos y los contagios. La consejera de Sanidad, Verónica Casado, ha reclamado nuevamente una herramienta legal que permita a las Comunidades Autónomas ordenar el confinamiento domiciario e ir "más allá" en Burgos.