El PSOE se encuentra en un momento de crisis. A las duras negociaciones con los independentistas que desembocaron en la investidura de Pedro Sánchez, con la polémica por la Ley de Amnistía y la condonación de la deuda a Cataluña, se han sumado en las últimas semanas la debacle electoral en Galicia, donde pasó de 14 a nueve diputados y no llegó al 15% de los votos, y el estallido del 'caso Koldo' que vincula a un asesor del exministro de Fomento, José Luis Ábalos, con una trama de venta de mascarillas en el peor momento de la pandemia.

En esta situación, las voces críticas en el seno de la formación se están haciendo notar cada vez más y el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ha convertido en el máximo representante de aquellos que buscan un cambio de rumbo en el partido. Page, contrario a cualquier tipo de acuerdo con las formaciones independentistas, se ha mostrado muy crítico con la Ley de Amnistía impulsada por el Gobierno del PSOE y, tras los resultados de Galicia, aseguró alegrarse de que "no hubiera ganado Puigdemont".

Otros dirigentes que han seguido al presidente castellanomanchego en sus críticas son el expresidente de Aragón Javier Lambán, también contrario a los acuerdos con los independentistas, que tras los comicios gallegos lamentó "profundamente" el avance del "nacionalismo soberanista gallego", o el exalcalde de San Sebastián Odón Elorza, que ha cargado contra la estrategia actual del PSOE de "subvencionar por necesidad" a los partidos nacionalistas. En este contexto, en Castilla y León también se ha alzado una voz discordante que lleva marcando un perfil propio desde que accedió al cargo: el alcalde de León, José Antonio Diez.

El regidor de la capital leonesa, en el cargo desde junio de 2019, se ha comportado como un verso suelto desde que fue elegido y su distanciamiento con el aparato del partido, tanto a nivel autonómico como nacional, se ha agrandado durante los últimos años. Esta misma semana, Diez ha pedido "respeto" para la gestión de Emiliano García-Page ante las críticas en el seno del partido y ha alertado de que "la falta de entendimiento de la política, de cercanía y problemas que le ocupan a la gente, y el desapego a los territorios, tendrá consecuencias electorales".

Además, se ha mostrado muy crítico con las afirmaciones del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de que el bajón del PSOE en Galicia se debió a una falta de liderazgo en los territorios. El regidor leonés ha asegurado que desde otras esferas no se puede "venir a decir a los alcaldes lo que es estar pegado al territorio" porque son "los cargos más cercanos a los ciudadanos" y ha defendido que "se les escuche". 

También ha considerado que las aseveraciones de Sánchez solo conducen a "debates estériles" y ha recordado que el liderazgo "se ejerce escuchando a la ciudadanía, no dándole la espalda", en una velada crítica al jefe del Ejecutivo. Diez ha insistido en la necesidad de la "cercanía", de "hablar con el ciudadano" y de "abogar por cuestiones pegadas al territorio" más allá de los partidos. Máximas que el regidor leonés ha llevado a cabo durante su mandato, en el que ha hecho hincapié en el sentimiento leonesista y en la defensa de la ciudad y la provincia más allá de la ideología.

La cruzada de Diez contra Puente

Especialmente intensa ha sido la cruzada del alcalde de León contra el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, que se remonta a la etapa en la que el vallisoletano era regidor de la ciudad. Esta misma semana, Diez ha asegurado que Puente es un ministro "que no está a la talla que se espera" y le ha instado a ejercer su cargo "para todos los españoles, sin sectarismo", asegurando "que no está siendo un buen ministro".

El alcalde de León acusó en el mes de enero a Puente de no ser "el ministro de todos" a cuenta de la expansión de Ryanair a Valladolid y ya amenazó en diciembre con pedir el cese de Puente si continuaba con su "deriva" y sus "ataques injustificados" hacia León. "No está representando los intereses por igual de todos los españoles y continúa siendo un político meramente centralista al que no podemos defender", aseguraba Diez. El regidor leonés advertía a Puente de que "ya tiene que tener la visión centralista que ha mantenido durante todos estos años".

"Ahora es un ministro de todos los españoles que está promulgando lo contrario a lo que siempre ha defendido este Gobierno, que es la vertebración del territorio y una discriminación positiva hacia los territorios con problemas demográficos", afirmaba. 

Pero la bronca entre estos dos enemigos íntimos socialistas viene de lejos. Ya durante la etapa en la que ambos eran alcaldes, Diez cargó en varias ocasiones contra el supuesto "centralismo" de Puente. La tensión llegó a su punto máximo cuando, en enero de 2023, el alcalde de León compartió en sus redes un vídeo que reflejaba un ataque nuclear a Valladolid, algo que el entonces regidor vallisoletano no se tomó nada bien. 

"Con este tuit te has puesto a la altura de los que fantaseaban con colgarme en el Ayuntamiento como a Mussolini. Hay límites que no se deben sobrepasar por un mínimo de responsabilidad de la que, evidentemente, careces. Me parece gravísimo. Decepción absoluta", publicaba Puente en su cuenta de X. Solo dos meses antes, en noviembre, tras la aprobación de los presupuestos autonómicos, Diez se quejó de las pocas inversiones en León, algo que Puente negó.

"Los leoneses no somos ni quejosos, ni lloricas, ni victimistas", aseguraba el regidor leonés en respuesta al actual ministro de Transportes, asegurando que no tenía "sentido entrar más en este tipo de discusiones" con alguien a quien "le gusta mucho polemizar". Una relación tirante entre Diez y un destacado miembro del Gobierno de España que ya se dejó entrever cuando Puente y su compañera Ana Redondo fueron nombrados. "Me choca un poquito que haya dos ministros de Valladolid", aseguró Diez.

Un alcalde con un perfil leonesista

Diez se ha caracterizado durante su mandato por una férrea defensa de la autonomía de la Región Leonesa –que estaría compuesta por las provincias de León, Zamora y Salamanca– en el momento más álgido de este movimiento. En las elecciones autonómicas del 13 febrero de 2022, la Unión del Pueblo Leonés (UPL) logró su mejor resultado en más de dos décadas –logrando tres procuradores y más de 52.000 votos– y se convirtió en una fuerza determinante en las municipales de mayo de 2023 en varias localidades de la provincia.

Además, la formación leonesista desbancó al PSOE como partido más votado en la ciudad de León en la cita electoral autonómica y Diez tomó nota de la capacidad de movilización del voto con la que cuenta el leonesismo en su ciudad. Un auge electoral que vino precedido de un claro resurgir de este movimiento en los últimos años, promovido por varias mociones de apoyo a la Región Leonesa en diferentes ayuntamientos, entre ellos el de León.

En diciembre de 2019, el propio Diez impulsó, junto a sus socios de UPL, una moción favorable a la creación de la autonomía de la Región Leonesa en el Consistorio que generó una gran incomodidad al aparato del PSOE, iniciándose el distanciamiento entre el regidor y el partido. Además, tras conocerse los resultados de los comicios autonómicos de 2022, Diez aseguró que el éxito electoral de UPL en León se había debido a que había sido el único partido que había defendido ese "derecho a otra autonomía".

El alcalde lanzó entonces un dardo a su propio partido y afirmó que "los partidos mayoritarios, tanto PP como PSOE" no habían sabido "captar y recoger ese mensaje" y ese "sentimiento" que tienen los leoneses. Una cercanía a los postulados de la UPL y un alejamiento del PSOE por parte de Diez que ha ido siendo cada vez más pronunciado y que se mostró de forma aún más visible durante la campaña de cara a las elecciones municipales del próximo 28 de mayo, en las que fue reelegido en el cargo.

La distancia con el PSOE y la victoria sobre el aparato

En aquella campaña, prescindió de las siglas del PSOE y apostó por un discurso centrado en León y en los leoneses. Diez trataba así de desmarcarse de la línea oficial de los socialistas de la Comunidad, que se oponen a la creación de la autonomía leonesa que el regidor tanto anhela, y optaba por un lema que mostraba de forma poco velada sus intenciones: 'Solo León'.

Una campaña especialmente personalista y centrada en su figura, de hecho, el cartel electoral estaba presidido por su nombre en letras de gran tamaño y, como logo de campaña, eligió un estilizado león púrpura, símbolo de la provincia y de la Región Leonesa, dejando claro el carácter identitario y regionalista con el que pretendía encarar la campaña de las municipales. Unos comicios en los que logró revalidar el cargo e iniciar una nueva legislatura de la mano de la UPL hasta 2027, cuando cumplirá ocho años al frente del Consistorio leonés.

Además, su figura se vio reforzada en el año 2022 tras unas tensas primarias que amenazaron con resquebrajar el PSOE de León. El aparato del partido, dirigido por el secretario provincial Javier Alfonso Cendón, postuló a Pilar Carnero para disputar al regidor leonés la dirección local y, por tanto, la candidatura a la Alcaldía en los comicios de este año. Diez se había convertido en un elemento incómodo para la dirección provincial y regional por esa deriva leonesista que le estaba alejando cada vez más la línea oficial de la formación.

Durante esa disputa, en la que Diez llegó a denunciar afiliaciones irregulares impulsadas por Cendón, el regidor llegó a amenazar con presentarse con otras siglas en el caso de no ser reelegido, dejando entrever su posible aterrizaje en la Unión del Pueblo Leonés (UPL). Finalmente, el alcalde de León se impuso en las primarias y derrotó al aparato del partido, reforzando así su postura dirigida a profundizar en ese perfil personalista y leonesista que continúa incomodando a la dirección. Un alcalde rebelde en un momento en el que al PSOE parecen estarle creciendo por momentos los García-Page en el seno del partido.

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