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Salamanca

El Coro Universitario ensayará en la sala Jesús García-Bernalt

9 junio, 2018 18:21

La Universidad de Salamanca dedica la sala de ensayos de la Hospedería de Fonseca a Jesús García-Bernalt, fundador del Coro Universitario,segundo coro mixto del sistema universitario español. La también conocida como “sala redonda” llevará el nombre del que a su vez fue profesor del Conservatorio de Música de Salamanca desde 1950, ostentando la cátedra de Conjunto Coral e Instrumental, así como director del actual Conservatorio Superior de Música de Castilla y León.

El rector de la USAL, Ricardo Rivero, pronunció unas palabras y develó la placa conmemorativa acompañado del vicerrector de Política Académica y Participación Social, Enrique Cabero, del actual director del Coro, Bernardo García-Bernalt, familiares, amigos y miembros del Coro de la Universidad de Salamanca, que entonaron los acordes del himno universitario, “Gaudeamus Igitur”. Tras la ceremonia, el Coro ofreció su tradicional concierto de fin de curso.

Jesús García-Bernalt

Nacido en Salamanca en 1925, Jesús García-Bernalt fue el menor de los hijos de una de las personalidades musicales salmantinas de la primera mitad del siglo XX: Bernardo García-Bernalt. Inmerso en el mundo de la música desde su infancia, finalizaría sus estudios de piano en el Real Conservatorio de Madrid, simultaneándolos con los de Profesor Mercantil, profesión que nunca llegó a ejercer.

Desde muy joven trabaja como organista y como pianista en diversos grupos de cámara locales, junto a músicos como Antonio Arias, Gerardo Gombau o Juan Quintero. Profesor del Conservatorio de Música de Salamanca desde 1950, en el momento en que el Ministerio de Educación saca a oposición las correspondientes plazas obtiene la cátedra de Conjunto Coral e Instrumental, en la que permanecería hasta su jubilación. También fue nombrado director del actual Conservatorio Superior de Música de Castilla y León. Su actividad docente se extendió a numerosos centros religiosos y de enseñanza, siendo profesor de lenguaje musical de muchas generaciones de músicos y aficionados salmantinos.

En 1958, a la muerte de su padre, asume la dirección de la Coral salmantina, que mantiene hasta finales de la década de los setenta. Con este grupo realiza numerosísimos conciertos y aborda también numerosas producciones líricas, fundamentalmente de zarzuelas. Aparte del repertorio polifónico clásico, bajo su dirección la Coral hace un extenso trabajo de difusión de la música tradicional salmantina, en la estela del trabajo emprendido por Dámaso Ledesma y Bernardo García-Bernalt.

Coro de la Universidad de Salamanca

En 1950, junto a un grupo de estudiantes de diversos Colegios Mayores, Jesús García-Bernalt funda el Coro de la Universidad de Salamanca, que fue el segundo coro mixto del sistema universitario español, después del Orfeón Universitario de Valencia. Con este grupo inició un proceso de renovación del repertorio polifónico, abordando obras desde el Renacimiento hasta la composición contemporánea, y prestando siempre una especial atención a la música española. Obtuvo numerosos premios en concursos nacionales, y viajó ofreciendo conciertos por la práctica totalidad de la península, así como por Francia y Alemania.

En su larga trayectoria figuran también numerosas grabaciones para radios y televisiones de España, Portugal, México, Japón, entre otros. Paulatinamente el Coro se convirtió en un elemento básico del ceremonial universitario, participa en todos los actos solemnes y actúa frecuentemente como embajador cultural de la Universidad de Salamanca. Como reconocimiento de esta labor, en 1975 la Universidad de Salamanca otorgó a Jesús García-Bernalt su Medalla y, en 1990, en el momento de su jubilación, se le concedió el primer Diploma Especial por Méritos Universitarios. Asimismo, la Diputación de Salamanca le otorgó en 1980 la Medalla de plata de la Provincia.

El trabajo de Jesús García-Bernalt en el Coro Universitario propició también la formación de nuevos grupos (como el propio Coro de Cámara de la Universidad de Salamanca) y constituyó un elemento fundamental para la dinamización de la actividad musical de la Universidad. Fue, además, organista de la Real Capilla de San Jerónimo durante casi toda la segunda mitad del siglo XX y, en sus últimos años, un activo colaborador de la Academia de Música Antigua en tareas de recuperación de patrimonio musical universitario del siglo XVIII.