La Policía Nacional de Salamanca ha detenido un joven de 23 años tras una persecución en la madrugada del pasado 14 de junio. El individuo fue aprehendido por conducir de manera temeraria y, además, sin tener ningún punto en su carné de conducir.

El incidente ocurrió en una de las rotondas del polígono del Montalvo, cuando el vehículo del implicado aceleró bruscamente al notar la presencia policial y se alejó a toda velocidad en dirección a la entrada de la ciudad.

Los agentes iniciaron una persecución utilizando luces y sirenas, al mismo tiempo que solicitaban al conductor, a través de la emisora, que detuviera el vehículo. Finalmente, el individuo detuvo su marcha en el barrio de San José, en una zona de aparcamientos, dejando el automóvil mal estacionado, obstaculizando el tráfico y con las puertas abiertas, para luego dirigirse al interior de uno de los bloques de viviendas.

Pocos minutos después, el conductor, quien era conocido por los agentes, regresó al lugar donde había estacionado el vehículo, acompañado por otro hombre, para interesarse por él. En un principio, negaron "rotundamente" que el detenido fuera el conductor, aunque posteriormente admitió su responsabilidad.

Además, confesó que había emprendido la huida debido a que había perdido todos los puntos de su carnet de conducir y este le había sido retirado hasta el mes de julio. El acusado afirmó que "no quería hacer daño a nadie", pero tenía miedo de ser detenido, ya que "necesitaba el coche para desplazarse a trabajar" a una localidad cercana.

Los agentes procedieron a la detención del joven y lo trasladaron a dependencias policiales para realizar los trámites correspondientes. Además, solicitaron una grúa en el lugar para trasladar el vehículo al depósito municipal, el cual también presentaba la Inspección Técnica de Vehículos caducada.