Cuando Valladolid se vistió de plató de cine

El rodaje de la película 'Voy a pasármelo bien' en Valladolid, en los primeros meses de 2022, empapó de espíritu cinematográfico al centro de la ciudad tras dos duros años de pandemia para el sector. Las calles de la capital se trasladaron a los años 80 para la realización de este largometraje de David Serrano, ambientado en la música de la mítica banda Hombres G, con la colaboración de Valladolid Film Office, una oficina técnica que está sirviendo de imán de atracción para que cada vez más producciones decidan recalar en la ciudad.

Este mismo mes dio inicio el rodaje de una nueva producción en la ciudad castellana, la película 'Honeymoon', dirigida por Enrique Otero y protagonizada por los afamados actores Javier Gutiérrez y Nathalie Poza. Pero los vínculos de Valladolid con el séptimo arte no son nuevos. La ciudad ha sido escenario de muchas escenas cinematográficas en decenas de ocasiones en los últimos 60 años, en producciones de tanto renombre como 'El Cid' (1961) o 'Doctor Zhivago' (1965).

Mr. Arkadin (1955)

El irrepetible cineasta Orson Welles escogió Valladolid para rodar varias escenas de su producción de drama e intriga Mr. Arkadin (1955). Concretamente, el monumental Colegio de San Gregorio, en el que se ubica el Museo Nacional de Escultura, fue escogido por Welles como escenario para un multitudinario baile de máscaras, con casi 300 figurantes.

El baile de máscaras de Mr.Arkadin (1955), en el patio del Colegio de San Gregorio.

El director escogió ese lugar para representar el interior del Alcázar de Segovia y las escenas rodadas en la ciudad no pudieron visualizarse en España hasta entrados los años 80 por la tijera de la censura, ya que exponer escenas con temática de carnaval, y los carnavales mismos, estaban prohibidos durante el franquismo al considerarse una ofensa a la religión católica.

Una muchachita de Valladolid (1958)

La película 'Una muchachita de Valladolid' (1958), como su propio nombre hace intuir, tuvo varias escenas rodadas en la ciudad. Este largometraje, dirigido por Luis César Amadori, volvió a usar como decorado el ya citado Colegio de San Gregorio, al que se sumaron otras ubicaciones como la Academia de Caballería y la Plaza de Zorrilla o el Hotel Felipe IV. 

Además, en esta película se mostraron escenas de la Semana Santa vallisoletana por primera vez en la gran pantalla. En concreto, se puede visualizar en una escena el Pregón de las Siete Palabras y la procesión del Vía Crucis discurriendo por la calle María de Molina, la calle de Santiago y la Plaza Mayor de la ciudad. 

El Cid (1961)

Hollywood regresó a tierras castellanas con el rodaje de la película 'El Cid' (1961), del director Samuel Bronston. En un momento de auge del género peplum –cine histórico de aventuras– este cineasta eligió al mítico personaje castellano para dar rienda suelta a su creatividad. Un rodaje que trajo a Valladolid a actores de primer nivel como el carismático Charlton Heston o la despanpanante Sofía Loren. 

El actor Charlton Heston con el castillo de Torrelobatón al fondo, en la película 'El Cid' (1961))

El escenario escogido para la filmación de la película fue el castillo de la localidad vallisoletana de Torrelobatón, escenario idóneo para esa ambientación medieval que buscaba el cineasta. Durante los tres días que duró el rodaje se congregaron 600 figurantes procedentes de la localidad y de otros municipios de los alrededores. La caballería mostrada en la película procedió del Regimiento de Farnesio de Valladolid y los utensilios que se visualizan en la película los donaron los habitantes de Torrelobatón.

Doctor Zhivago (1965)

El mítico director británico David Lean escogió España para el rodaje de su 'Doctor Zhivago' (1965), a pesar de que la obra estaba ambientada en la Rusia prerrevolucionaria de principios del siglo XX. La compleja situación de 1965, en plena Guerra Fría, hacía imposible el rodaje de una película anglosajona en territorio de la URSS y se tuvieron que buscar alternativas.

Los campos sorianos se convirtieron en la película en las estepas nevadas de la Rusia zarista que daba sus últimos coletazos y Madrid capitalizó gran parte de la filmación. Pero aún quedaba hueco para Valladolid. La Estación del Norte fue la elegida para el rodaje de una escena en la que gran multitud de ciudadanos se agolpan en los andenes, en plena vorágine revolucionaria rusa, emulando la estación de tren de Moscú. 

Memorias de Leticia Valle (1980)

Otra importante película española que se rodó en Valladolid fue 'Memorias de Leticia Valle' (1980), dirigida por Miguel Ángel Rivas y protagonizada por actores de renombre como Emma Suárez, Fernando Rey y Ramiro Oliveros. La ubicación escogida en esta ocasión fue el Pasaje Gutiérrez, en el centro de la ciudad, y también aparece el Castillo de Simancas, que ubica el más antiguo archivo oficial de la corona de Castilla, fechado en 1540.

Escena de 'Memorias de Leticia Valle' (1980) rodada en el Pasaje de Gutiérrez de Valladolid.

El largometraje, basado en la obra de la escritora vallisoletana Rosa Chacel, cuenta la historia de Leticia Valle, una joven de 12 años de alta alcurnia que se enamora de su maestro, Don Daniel, un hombre casado del que se convierte en amante.

Soldados de plomo (1983)

En 1983 Valladolid sería escena de la primera película dirigida por el afamado actor José Sacristán, 'Soldados de Plomo', basada en una novela del barcelonés Eduardo Mendoza, con un reparto de lujo compuesto por Fernando Fernán Gómez, Silvia Munt y Assumpta Serna. Los escenarios escogidos para la filmación fueron la Plaza de la Fuente Dorada, la Plaza Mayor, el Pasaje Gutiérrez y la Plaza de la Universidad

El caserón de la calle Gondomar de 'Soldados de plomo' (1983).

Además, en la calle Gondomar esquina con Chancillería, en el barrio de La Rondilla, se ubicaba el caserón que hereda el personaje interpretado por Sacristán, que también actuó en la película, y que sería después rehabilitado y convertido en edificio de viviendas.

Caminos de tiza (1988)

José Luis Pérez Tristán escogió Valladolid para el rodaje de 'Caminos de Tiza' (1988), protagonizada por María Fernanda D’Ocón y Lydia Bosch. En la película se puede observar el interior del Ayuntamiento de Valladolid, el Palacio de Fabio Nelli, el Patio de las Francesas, la Plaza del Viejo Coso y la Plaza de la Universidad de la ciudad.

El largometraje cuenta la vida de una monja y profesora que parte en búsqueda de tres de sus alumnas favoritas para comprobar si sus enseñanzas han servido para algo positivo, después de ser diagnosticada de una grave enfermedad.

Monseñor Quijote (1988)

Ese mismo 1988 se rodó en Valladolid parte de el telefilme británico 'Monseñor Quijote', protagonizado por el oscarizado Alec Guiness, que tuvo como ubicaciones en la ciuidad la Plaza Mayor y el histórico Café del Norte ubicado en la misma.

Es una adaptación de una novela del escritor Graham Greene en la que Don Quijote es el párroco de un pueblo español, Sancho es un alcalde comunista y Rocinante es un Seat 600.

Hola, ¿estás sola? (1995)

La galardonada directora española Icíar Bollaín escogió Valladolid para rodar su opera prima, 'Hola, ¿estás sola?' (1995). La ciudad del Pisuerga era el escenario de la huída de dos amigas, representadas por las actrices entonces emergentes Silke y Candela Peña, que emprenden camino a Málaga con el objetivo de ser independientes, libres y adineradas.

Escena en la calle La Vía de la película 'Hola, ¿estás sola?' (1995).

Las ubicaciones escogidas para este film noventero fueron la Plaza de los Vadillos y la Calle La Vía, al lado de las vías del ferrocarril, la Plaza de San Bartolomé y el Puente Mayor. La película tuvo un gran éxito. En la 40ª Semana Internacional de Cine de Valladolid de 1995 Bollaín obtuvo el Premio a Nuevo Mejor Director y la película logró el premio del Público y la Mención Especial. La directora, además, logró una nominación al Goya a la mejor dirección novel por este largometraje.

Todo menos la chica (2002)

Esta obra del año 2002, dirigida por el vallisoletano Jesús Delgado, se rodó íntegramente en la ciudad del Pisuerga, gozando de gran protagonismo la Estación del Norte de la ciudad. 

Escena de 'Todo menos la chica' (2002), frente a la Estación del Norte.

Para esta película, que cuenta la historia de un grupo de jóvenes amigos, recalaron en la ciudad castellana intérpretes como Liberto Rabal, Álex Angulo, María Adánez, Fernando Guillén Cuervo, Nathalie Seseña, Duna Jové y Ramón Barea.

Un buen día lo tiene cualquiera (2007)

La película 'Un buen día lo tiene cualquiera' (2007), del cineasta Santiago Lorenzo, también se rodó de forma íntegra en Valladolid. Protagonizada por Diego Martín, la película tuvo como localizaciones predominantes el edificio Duque de Lerma, la Acera Recoletos y el Café del Norte de la Plaza Mayor.

Diego Martín y Roberto Álamo en el Café del Norte de Valladolid en 'Un buen día lo tiene cualquiera' (2007)

Lorenzo cuenta en esta obra la historia de Arturo, un joven treintañero que, tras quedarse en la calle, se acoge a un Plan Social del Ayuntamiento para hacer compañía a un anciano a cambio de alojamiento. El anciano en cuestión estaba interpretado por el mítico Juan Antonio Quintana, y actuaban en la película también afamados actores como Roberto Álamo o Antonio Molero.

Aficionados (2010)

'Aficionados', del cineasta vallisoletano Arturo Dueñas, se rodó íntegramente en la ciudad del Pisuerga, principalmente en la Universidad de Valladolid y, en concreto, en la Facultad de Filosofía y Letras. La obra habla de varias personas que acuden cada semana a un curso de teatro para desconectar de sus problemas. Entre los principales intérpretes del reparto se encuentran Jesús Burgoa y Nuria de Torres, entre otros. 

El impacto de la crisis económica de 2008 golpeó fuertemente al sector cultural, y al del cine en particular, y los rodajes en Valladolid se frenaron en seco. Durante la última década, la única excepción fue el bizarro aterrizaje de Bollywood en tierras castellanas con la producción india 'Devil in Palace' (2018), del cineasta Vikram Sandhu. Los rodajes de 'Voy a pasármelo bien' y 'Honeymoon' durante el último año parecen hacer presagiar una reconexión de Valladolid con su tradicional vínculo cinematográfico.