Alberto Palomino, concejal delegado general de Salud Pública y Seguridad Ciudadana

Alberto Palomino, concejal delegado general de Salud Pública y Seguridad Ciudadana

Valladolid

Alberto Palomino: “Se ha creado una psicosis muy grande con los pinchazos”

El concejal delegado general de Salud Pública y Seguridad Ciudadana en el Ayuntamiento de Valladolid explica el dispositivo elaborado para la celebración de las Ferias y Fiestas de la Virgen de San Lorenzo que arrancan este viernes

31 agosto, 2022 07:00

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Alberto Palomino Echegoyen (Madrid, 57 años) trabaja desde hace meses para que no haya sorpresas desagradables en las Ferias y Fiestas de la Virgen de San Lorenzo. El concejal delegado general de Salud Pública y Seguridad Ciudadana en el Ayuntamiento de Valladolid nos recibe en la sede de su concejalía a pocos días de que la diversión invada las calles de la ciudad del Pisuerga.

Su preocupación es clara: que no pase nada. Su obsesión, como no podía ser de otra manera, la seguridad del 2 al 11 de septiembre. Pinchazos, agresiones sexuales, los conciertos de la Plaza Mayor… de todo esto y mucho habla con EL ESPAÑOL de Castilla y León en la siguiente entrevista tras abrirnos su despacho.

“Espero que todos disfruten al máximo, lo que puedan, pero con responsabilidad. No podemos vivir unas fiestas desagradables”, señala Palomino.

P.- Son las primeras fiestas de Valladolid “normales” que afronta como concejal delegado general de Salud Pública y Seguridad Ciudadana en el Ayuntamiento, tras la marcha de Antonio Otero. ¿Cómo las afronta?

R.- Con normalidad. He de reconocer que el trabajo lo simplifica mucho la experiencia que tienen los jefes de servicio. La jefa de la Policía Municipal: Julia, el jefe de Bomberos: Javier, o la jefa del Servicio de Limpieza: Pilar, tanto ella como los trabajadores y el subdirector: Ambrosio, que lleva muchos años. Esta experiencia que atesoran me da mucha tranquilidad a la hora de afrontar las fiestas de Valladolid.

P.- La semana pasada se celebraba la junta local de seguridad de cara a estos festejos, ¿Cuál va a ser el dispositivo que se va a plantear?

R.- Queremos controlar los grandes núcleos de concentración de personas. Plaza Mayor, Las Moreras, el recinto ferial y estar atentos a todo lo que ocurre. En coordinación con la Policía Nacional durante todos los días. Vamos a tener los drones volando a lo largo de todas las fiestas. Nos han dado muchas satisfacciones y muy buenos resultados los años anteriores. También mantendremos la coordinación con el Servicio de Limpieza. Todos los trabajadores van a estar muy atentos y en coordinación con los hosteleros para la implantación de puntos de recogida de residuos. Su objetivo será que todo esté limpio tras cada jornada festiva.

P.- En los últimos tiempos, en eventos grandes con masificaciones, se ha visto agentes a caballo. ¿Se va a hacer en Valladolid?

R.- Esto es algo que coordina y que es decisión de la Policía Nacional. En principio no está previsto. Como apuntaba, la Policía Municipal va a estar apoyada desde el aire por los drones y con la Policía Nacional colaboraremos con patrullas mixtas con un motorista de cada modalidad de agentes, lo que nos permite completar el espectro ante posibles actuaciones.

Alberto Palomino, concejal delegado general de Salud Pública y Seguridad Ciudadana en la sede de su Concejalía

Alberto Palomino, concejal delegado general de Salud Pública y Seguridad Ciudadana en la sede de su Concejalía

P.- ¿Qué es lo que más preocupa de las fiestas?

R.- El desparrame de la gente. Que haya personas a las que se les vaya la cabeza o que, simplemente, empiece a desvariar. Por regla general, la gente se comporta de manera racional y responsable. Siempre hay un grupo que se excede y monta broncas: esto es lo que tenemos que evitar.

P.- ¿Cómo se va a luchar para que no se produzcan agresiones sexuales durante las fiestas?

R.- Con la normativa que hay vamos a establecer los puntos violetas, que de eso también se ha hablado en la junta local de seguridad. Además, del acuerdo que se acababa de sellar esa mañana con las farmacias y que nos proporciona 185 puntos más de control para atender a personas que puedan sufrir cualquier tipo de agresión de este tipo. Lo más importante es eso y que todo sea muy rápido.

Todo combinado con un protocolo que ha creado la Junta de Castilla y León de atención a posibles víctimas para que la policía pueda desplegarse y detener a los presuntos autores de estos actos.

P.- ¿Preocupa el tema de los pinchazos? ¿Cómo se pueden combatir?

R. Se ha creado una psicosis muy grande con los pinchazos y los datos no acompañan a esta psicosis. A día de hoy, en la provincia de Valladolid y sin incluir a la capital, ha habido un caso en Peñafiel donde se apuntaba que había sustancia. Están pinchando por pinchar, con aparatos para inyectar insulina o con alfileres. Es gente que está colaborando en la creación de esta psicosis. Los casos son contados y se detectan ya que una persona, al ser pinchada, lo nota y es fácil dar con la persona que lo ha hecho. Insisto, los casos en la provincia de Valladolid son muy pocos y en la ciudad, escasos.

P.- ¿Qué mensaje mandaría Alberto Palomino a la sociedad para que no se produzcan?

R.- Me gustaría decirle a la gente que si uno quiere mantener relaciones sexuales es mucho más divertido cuando es consentido. Que dejen de hacerlo, porque no lleva a ninguna parte. Lo único que genera es miedo y psicosis.

P.- En la ciudad de Valladolid, ¿Cuántos se han registrado?

R.- El número exacto no lo tengo porque son datos de Policía Nacional, pero son muy poquitos. Pueden haberse registrado media docena. Muy pocos.

P.- Las farmacias, como apuntaba, van a ser utilizadas durante las fiestas como puntos violetas. ¿Qué importancia tiene?

R.- Son 162 puntos más de control. Sobre todo, es para que una persona que haya sufrido cualquier intento de sumisión química o de agresión sexual tenga un punto cercano en el que sentirse más segura. La mayoría de las farmacias tienen horarios de apertura amplios y eso ayuda. El objetivo es acceder a un lugar en el que se sienta segura. Es muy importante para nosotros porque pueden dar asesoramiento y atención. Un momento de charla tranquilizadora, un efecto psicológico.

P.- En cuanto a la seguridad en los conciertos de la Plaza Mayor, ¿Está garantizada?

R.- Está garantizada. El despliegue va a ser tremendo. 

P.- ¿Cómo va a funcionar el dispositivo para los eventos musicales en la Plaza Mayor?

R.- Habrá un aforo que está establecido en 26.760 personas. Se van a desarrollar diferentes controles. Para los conciertos, sobre todo para los que está prevista una masificación mayor, se reducirá el acceso a la Plaza Mayor. Se cortarán algunas calles para que no se permita el acceso. En el resto, los agentes controlarán las personas que están cercanas a ese punto. Se utilizarán drones desde el cielo para medir. Estará la Policía Nacional, Local, voluntarios de Protección Civil y Seguridad privada. En el momento en el que se vea que el aforo está al límite o completo, se impedirá el paso a la Plaza Mayor.

Alberto Palomino durante la entrevista con EL ESPAÑOL

Alberto Palomino durante la entrevista con EL ESPAÑOL

P.- ¿Les preocupa el concierto de Jason Derulo? ¿A cuántas personas puede llegar a reunir según las estimaciones del Ayuntamiento?

R.- Más que preocupar, nos ocupa. No sabemos la cifra exacta de personas a las que puede congregar.  Aunque es el día grande y festivo en Valladolid, no lo es en el resto de las ciudades de España. Entendemos que tendrá un atractivo fuerte para gente joven. Pensamos que será uno de los días en los que tengamos que cerrar la Plaza Mayor pero no nos preocupa especialmente. Sobre todo, por el tipo de público. Puede oscilar entre los 24 y 30 años y en esta franja de edad no destacan por montar broncas.

P.- Mensaje del concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana a toda la población vallisoletana para estas fiestas.

R.- Mi mensaje es que disfruten al máximo, todo lo que puedan. Llevamos tres años de retención y contención. También, que lo hagan con mucha responsabilidad porque esas ganas de disfrutar no nos pueden llevar a vivir unas fiestas desagradables.