Es la reina de la gastronomía española. Es una cuestión de huevos… y de patata. El debate de si con cebolla o si sin cebolla se abre ahora a rellena o clásica. La tortilla española triunfa en todos los hogares españoles y también en los establecimientos hosteleros de todo el territorio nacional.
El gusto por realizar rutas con la tortilla como protagonista de los diferentes bares de muchas ciudades crece. Valladolid cuenta con bares y restaurantes que elaboran, con mimo, las mejores tortillas con el fin de enamorar al comensal. Rellenas, clásicas con el interior poco hecho y algunas acompañadas por una salsa que quita el sentido.
Visitamos el Bar Piraña, ubicado en la calle Real de Burgos, 8, y especializado en tortillas rellena. El Bar Pedro, en pleno centro de la ciudad, y en la calle Felipe II, 13 que acompaña al producto estrella con un alioli casero único y al Bar Periquete en el Paseo Zorrilla, 29, con la tortilla clásica como bandera, para disfrutar de las mejores de la ciudad.
El Bar Piraña y lo mejor está en el interior
“Nuestras tortillas están hechas con un proceso artesanal, pochados propios y las mejores materias primas. Queremos darles a nuestros clientes las mejores tortillas. Tenemos 14 diferentes para que elijan la que más les guste”, confiesa en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León, Cristian Gómez Villarpriego, gerente del Bar Piraña situado en la calle Real de Burgos de la ciudad del Pisuerga.
Un negocio que suma tres años y medio de vida pero que goza de buena salud. No hay más que verlo el día que abre las puertas a este periódico, a eso de las 12.00 horas de la mañana, con decenas de estudiantes comiendo su almuerzo. Una tortilla mil quesos, de pollo con alioli, de cangrejo… o normal. Todas están para chuparse los dedos.
Abierto de lunes a sábado de 8 a 23 horas, a las 6 de la mañana ya están haciendo tortillas en el lugar. “Van bien cargadas de ingredientes. Nuestros clientes suelen dejar los platos limpios y nos dan ideas para seguir evolucionando”, nos cuenta Cristian, satisfecho por la buena salud de su establecimiento hostelero.
“Valladolid es un sitio con mucha calidad en lo que a las tortillas se refiere. La competencia es muy fuerte y nos encanta. Cuantos más tortilleros tengamos en la ciudad, mejor”, finaliza el dueño del Piraña.
El Periquete y una tortilla para chuparse los dedos
“Desde el mismo día de nuestra apertura la tortilla ha sido uno de nuestros platos estrella. Se pocha lentamente la patata y la cebolla, en proporciones prácticamente idénticas y con aceite de oliva, y a la hora de cuajarla la dejamos poco hecha”, asegura Jorge San Juan Calleja, de 39 años y que es el gerente del Bar Periquete, ubicado en el Paseo Zorrilla, número 29, de la ciudad del Pisuerga.
El negocio acaba de cumplir cinco años desde que abrió sus puertas a finales de 2017 y hace unas tortillas que quitan el sentido. “La clave está en la calidad de la materia prima que usamos y que para nosotros es algo innegociable”, confiesa el dueño del negocio.
Cuentan con muchos fieles que desde primera hora de la mañana van a tomar un café con su pinchito de un producto ‘made in Spain’ que también está muy demandado en las comidas y las cenas.
“En nuestra ciudad tenemos sitios muy importantes que ofrecen tortillas desde hace décadas, pero no me quedaría solo con las que se hacen en Pucela, también en ciudades vecinas como Palencia y Salamanca”, finaliza Jorge.
Bar Pedro y un alioli para acompañar único
Pasando desde San Pablo rumbo a la plaza de San Miguel nos topamos, en la calle Felipe II, con otro establecimiento con una amplia tradición hostelera y con la tortilla como producto estrella. Allí nos espera Miguel Ángel Escaño, de 54 años de edad y que suma diez en un bar que registra, en el momento de nuestra visita, un lleno en la terraza en un día soleado en Valladolid.
“Empezamos a hacer tortillas hace muchos años. Nuestro secreto es el huevo y la patata. Los mejores ingredientes. Luego un alioli casero que gusta mucho. Yo no destaco nada de ellas, ya lo hacen los clientes que salen encantados de nuestro negocio”, confiesa Miguel Ángel Orgulloso, mientras sigue poniendo pinchos cuando responde a nuestras preguntas.
Hace casi 20 tortillas diarias y la salsita está, simplemente increíble y enamora a todo el que la prueba. Incluso puede llevarse a domicilio y disfrutar de ella en casa. Ahora que el frío amenaza con llegar, puede ser una buena opción para una comida de domingo, por ejemplo.
En Valladolid, como se puede ver, nos chupamos los dedos con las mejores tortillas.