Duro golpe al organigrama de Carnero: Seminci deberá gestionarse por Cultura, en manos de Vox

Duro golpe al organigrama planteado por el nuevo alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero. El informe jurídico que ha presentado el secretario general del Ayuntamiento de Valladolid, que solicitó el Grupo Municipal Socialista, es claro con respecto a los cambios planteados por el nuevo equipo de gobierno y ha confirmado que la Seminci seguirá dependiendo de la Concejalía de Cultura, en manos de Vox, en concreto de la concejala de Educación y Cultura, Irene Carvajal, que también es teniente de alcalde. Así lo han confirmado desde el Grupo Municipal Socialista en el consistorio pucelano.

Fue el pasado 19 de junio cuando Carnero firmaba un decreto en el que delegaba las competencias de la Alcaldía en los diferentes concejales dentro de su equipo de gobierno. El primer edil establecía la creación de la nueva concejalía de Turismo, Eventos y Marca Ciudad, que fue a parar a la también portavoz del grupo, Blanca Jiménez. Entre las competencias en dicha área se incluía la Seminci de tal forma que el festival dejaba de estar en manos del Área de Cultura.

El grupo socialista solicitó a la Secretaría General un informe de legalidad sobre la cuestión al considerar que la Seminci estaba adscrita a la Fundación Municipal de Cultura, en manos de Vox y no podía ser gestionada por Blanca Jiménez.

La Secretaría General ha confirmado que Seminci dependerá “financiera, orgánica y funcionalmente de la Fundación”, como apuntan los socialistas y que “tiene que encajarse orgánicamente en sus órganos de gobierno”, es decir, que “la concejala del área de Turismo, Eventos y Marca Ciudad no puede llevar a cabo su dirección política y administrativa”.

El secretario advierte de que para cambiar la situación tendrían que “modificar los estatutos de la Fundación” y concluye que Seminci “atendiendo a su contenido, es una actividad cultural de competencia municipal que se gestiona a través de la Fundación Municipal de Cultura-Ayuntamiento”.

Tres claves

En el escrito del secretario, compartido por los socialistas, hay tres puntos claros. El primero respecto a la dependencia financiera, orgánica y funcional de la Seminci que ha de ser gestionada “por la Fundación Municipal de Cultura” por su carácter cultural. Que las decisiones tienen que encajarse en “los órganos de gobierno de dicha fundación”.

“Que la dirección política y administrativa de la Seminci atribuida al Área de Turismo, Eventos y Marca Ciudad no la puede llevar a cabo directamente la concejala delegada general de ese Área en cuanto que, como se dice en el Decreto de delegación, ha de hacerse en coordinación con el Área de Cultura atendiendo al contenido de los Estatutos del Organismo Autónomo. Será la aplicación de esos estatutos lo que pueda determinar la posibilidad de que una concejala diferente de la delegada de cultura realice actuaciones, de dirección política y administrativa, en relación con la SEMINCI”, afirma el tercer punto.

Cambios en VIVA no posibles

Los socialistas también solicitaron un informe de legalidad sobre las atribuciones que el alcalde realizó a través del mencionado decreto a la Sociedad de Municipal de Suelo y Vivienda (VIVA), relativas, entre otras a la gestión del patrimonio municipal de suelo, gestión del patrimonio histórico, proyecto de soterramiento o ciudad de la justicia.

Desde el PSOE apuntan que la respuesta del secretario general “va en una línea similar, si bien no tiene trasfondo político por cuanto no afecta más que a un área, la nueva de Urbanismo y vivienda, cuyo titular es José Ignacio Zarandona (PP)”.

Para que la Sociedad asuma esas competencias son necesarios dos pasos: la modificación de los estatutos de VIVA y la posterior encomienda de gestión de la concejalía en la Sociedad para esas funciones.

El decreto del alcalde expone el secretario general del Ayuntamiento de Valladolid, “no permite entender que VIVA, SL pueda llevar a cabo, en estos momentos, las actuaciones que se dicen en el mismo respecto a las materias referidas en cuanto que ha de cumplirse, previamente lo ya indicado (modificación de los estatutos, en lo que sea necesario, y decisión administrativa sobre encomienda de una actuación para actuar como “medio propio”).