Restan sólo dos días para el 1 de octubre, la fecha que el Gobierno catalán marcó en el calendario para celebrar el referéndum ilegal de autodeterminación de Cataluña, y son muchas las preguntas y las incógnitas que están en el aire. Una de ellas es qué ocurriría con la comunidad científica catalana y el alto estatus adquirido por ésta en los últimos años en el caso de que se produjera una declaración unilateral de independencia.
La revista Nature, la Biblia por antonomasia de las publicaciones científicas, ha abordado el tema esta semana en un editorial equidistante, en el que advierte de las consecuencias que tendría la independencia para los científicos catalanes. "Muchos científicos han dicho a Nature que tienen puntos de vista contradictorios: la ciencia tendría mucho que ganar con la independencia, pero también mucho que perder", advierten.
Según relata la publicación, Cataluña ha conseguido situarse en el mapa científico mundial "gracias a la creación de algunos centros de investigación de alto nivel y una agencia que recluta y paga los salarios de los mejores científicos, que pueden elegir entre trabajar en los institutos catalanes de ciencia o en la Universidad". Estos movimientos, entre otros, han permitido a Cataluña "superar al resto de España" en algunos logros científicos y atraer a investigadores internacionales de primer nivel.
Nature apunta que una Cataluña independiente podría liberar a las universidades de "leyes nacionales anticuadas e inflexibles". Sin embargo, también explica que, en caso de independencia, se verían obligados a abandonar automáticamente la Unión Europea "y España se aseguraría de que nunca volviese a entrar". Esta nueva situación "debilitaría las investigaciones en esta región", ya que no se le permitiría acogerse a las abundantes becas del Consejo Europeo de Investigación (10 de las 22 que han recaído en España han ido a parar a investigadores que trabajan en Cataluña).
Pese a este panorama, la revista asegura que muchos investigadores catalanes se mostrarán a favor del sí. "Sus emociones han sido avivadas por el movimiento desde Madrid de bloquear los presupuestos de los organismos públicos, incluidos los institutos de investigación y universidades, en un intento por detener el financiamiento del referéndum", señala la publicación.
Según Nature, sea cual sea el resultado, es más que probable que la incertidumbre política se agrave. Una situación que traería consecuencias perjudiciales para el mundo de la ciencia. "Los presupuestos congelados amenazan el estatus de clase mundial de los institutos que la región ha construido tan cuidadosamente y que necesitará, cualquiera que sea la solución política que surja", finaliza.