Miles de ejemplares desaparecidos, 104 kilómetros cuadrados de extensión despoblados y la amenaza de que sean cada vez más. Esta es la situación del pika americano (Ochotona princeps) en la zona de California (EEUU) debido al cambio climático.
Esta especie, del grupo de los roedores y con similitudes con el conejo y la liebre, ve como poco a poco se queda sin un lugar donde vivir. Durante los meses más fríos del año no hibernan, como sí hacen otros animales de tipología similar, lo que les ha llevado a desarrollar un metabolismo para combatir el frío que les hace más vulnerables a las altas temperaturas.
Según un estudio, publicado recientemente en la revista PLOS ONE, el número de ejemplares que habitan en la zona de las montañas de Sierra Nevada se ha reducido drásticamente. Esto se debe a que, por el efecto del cambio climático, zonas que durante todo el año presentaban unas características aptas para la vida de estos animales ya no las tienen debido al aumento de temperatura.
Para llevar a cabo esta investigación, miembros del Departamento de California de Pesca y Vida Salvaje han revisado la zona durante seis años (2011 a 2016) en busca de pruebas de vida del pika. En su lugar, solo han encontrado heces, inconfundibles por su aspecto similar a un grano de pimienta, pero con muchos años de antigüedad.
Para datar con exactitud el volumen de ejemplares en la zona, aprovecharon la radiación dejada por pruebas nucleares anteriores al año 1963. Debido a estos tests, el ambiente quedó cargado de partículas radioactivas, y según su presencia hoy en día puede calcularse de qué año son las deposiciones de pika, y por tanto en que época había mas animales de esta especie.
"Encontramos antiguos restos fecales de pikas casi en cada parte del hábitat en la que buscamos, pero los animales estaban manifiestamente ausentes", ha afirmado Joseph Stewart, coautor de la información.
Mientras que en otras especies en peligro, como el salmón, el carcayú, el tigre o los arrecifes de coral se pueden poner en marcha actuaciones para adecuar mejor el hábitat a lo que necesitan, en el caso del pika hay poco por hacer.
"Cuanto más calor, los sitios más bajos se convierten en restringidos para los pikas y deben ir más hacia arriba. Además, al final las partes más elevadas también se convertirán en demasiado calientes", sentencia Stewart.
Las estimaciones realizadas gracias a los datos de radiación muestran que antes de 1955 ya habían desaparecido muchos ejemplares de las zonas más bajas de la montaña y que hasta el año 1991 se ha mantenido el ritmo de 'desapariciones' de pikas con rumbo a zonas más altas.
Según los últimos datos, los pikas han desaparecido desde las zonas de Tahoe City a Truckee, a más de diez millas de distancia. Esta es la mayor área de población de pika extinguida en la Era Moderna.
"Nuestra esperanza es que correr la voz de que están desapareciendo especies icónicas de animales salvajes, para que las personas hablen sobre esto, contribuya a que los políticos traten de revertir el cambio climático. Necesitamos que nuestros líderes tomen medidas firmes ahora", ha afirmado Stewart.