Tener mala mano para la jardinería no implica no querer tener plantas en casa. De hecho, a muchas personas les encantaría poder hacerlo, no sólo como ornamentación, sino también por los beneficios que suponen para la salud.
Por ejemplo, se ha comprobado que algunas son capaces de eliminar sustancias tóxicas del ambiente y regulan la humedad del aire. Tanto es así que cada vez son más comunes en las oficinas noruegas, cuyos trabajadores aseguran que les ayudan a sentirse productivos y saludables.
Pero, ¿qué pueden hacer los malos jardineros para no tener que prescindir de ellas? La solución la ha propuesto el experto en plantas Matthew Schechter en declaraciones recientes a Business Insider, que ha elaborado una lista con las plantas ornamentales más resistentes a las condiciones adversas y los olvidadizos de la regadera.
La planta del hierro fundido
Aunque es originaria de Taiwán y Japón, durante el siglo XIX se exportó a la Inglaterra victoriana, donde comenzó a considerarse como un símbolo de riqueza.
Desde entonces su uso como planta ornamental se ha extendido por todo el mundo, especialmente para los torpes de la jardinería, ya que son capaces de adaptarse a las condiciones adversas de casi cualquier tipo de clima.
Su nombre científico es Aspidistra elatior y se puede adquirir fácilmente en varias floristerías físicas y online.
Dracaena Janet Craig
Procedente del África tropical, esta planta, de hojas brillantes, grandes y tupidas es capaz de vivir incluso dos meses sin agua ni luz. Por eso, se considera una opción perfecta para aquellos que quieren en casa una bonita planta tupida, pero sin verla morir por falta de riego. También está disponible en las floristerías españolas.
Cola de caballo mejicana
Esta planta es capaz de resistir a la perfección en entornos extremadamente áridos y además se considera segura para mascotas, por lo que es ideal para personas con animales de compañía en casa. Su nombre científico es Equisetum arvense y es una especie de arbusto perteneciente a la familia de las equisetáceas.
Se trata, además, de una planta con propiedades medicinales en el campo de la herboristería.
Palmera cola de caballo
En la línea de la anterior, esta planta -cuyo nombre científico es Beaucarnea recurvata- tiene la capacidad de almacenar grandes cantidades de agua, de modo que un solo riego puede servirle para un periodo bastante grande de tiempo.
Sansevieria
Con nombres comunes tan curiosos como Planta de la Serpiente, Espada de San Jorge o Lengua de la Suegra, parece clara la gran dureza de esta planta, cuyas fibras llegaron a usarse en la antigüedad para hacer cuerdas para arcos.
También puede almacenar agua en sus hojas, por lo que resiste a la perfección en ambientes muy secos. Su nombre científico es Sansevieria trifasciata y existen tres variedades, todas aptas para manazas de las plantas: Laurentii, Hahnii y Golden Hahnii.
Cactus
Y como no hay nada mejor que recurrir a los clásicos, para los que piensen que el resto de nombres de la lista son demasiado exóticos la mejor elección será el cactus.
Basta con regarlo una vez al mes; pero, eso sí, es importante que el lugar elegido de la casa tengo acceso a la luz del Sol, al menos durante dos horas al día.