Los pingüinos del Acuario Shedd de Chicago (Estados Unidos), en una situación normal, sin coronavirus mediante, son una de las atracciones más aclamadas por los visitantes. Pero el pasado domingo, mientras el centro permanecía cerrado para evitar la propagación del Covid-19, estos animales pasaron al otro lado de la cristalera y fueron ellos los observadores de la instalación.
Así, un grupo de pingüinos (de penacho amarillo o saltarrocas) pudo abandonar su hábitat y explorar el resto del acuario. "Sin público en el edificio, los cuidadores buscan formas creativas de enriquecer a los animales", ha dicho el centro al Chicago Tribune. "Introducir nuevas experiencias, actividades, alimentos para mantenerlos activos, animarlos a explorar, resolver problemas y expresar comportamientos naturales".
En un vídeo que ha difundido el acuario, se ve a uno de estos pingüinos, llamado Wellington, que parece sorprendido e interesado en los animales que se exhiben en una de las pecera. Esta grabación, en la que se aprecia al animal paseándose con sus aletas por la instalación, suma este martes millones de reproducciones y está animando a los usuarios de redes sociales en un momento complicado a nivel global a causa de la crisis del coronavirus.
EE.UU. declara emergencia nacional
"Gracias al Acuario Shedd por continuar publicando ... necesitamos sonrisas allá donde podamos conseguirlas", ha respondido un usuario de Twitter. Este centro, que en principio estará cerrado hasta el 29 de marzo, es solo una de las decena de atracciones que han cerrado en todo el país para mitigar la propagación del virus.
El pasado domingo, el gobernador de Illinois J.B. Pritzker ordenó que todos los bares y restaurantes del estado cerraran al público a partir del lunes por la noche y hasta el 30 de marzo. En Estados Unidos este martes hay más de 4.700 casos positivos y han fallecido 93 personas por coronavirus.
El presidente estadounidense, Donald Trump, declaró el viernes una emergencia nacional pero, al contrario que el estado de alarma anunciado en España, la medida de Estados Unidos no abre la puerta a limitar el movimiento de personas ni a intervenir hospitales privados.
La principal consecuencia de la declaración es el desbloqueo de fondos federales para ayudar a los estados y a las localidades afectadas a hacer frente a la crisis.