Para finalizar, está la tilapia, de la cual hablamos recientemente en EL ESPAÑOL. No son pocos los individuos que buscan en la tilapia una fuente de ácidos grasos omega-3, pero la realidad es que no es la mejor opción para dicha búsqueda, dado que es un pescado con una cantidad escueta de este nutriente, y destaca más por su contenido de ácidos grasos omega-6.
A diferencia de los ácidos grasos omega-3, que se han relacionado con una protección frente a las enfermedades cardiovasculares, los ácidos grasos omega-6 podrían aumentar el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares según algunos trabajos. Sin embargo, por el momento, queda mucho que investigar al respecto, como defiende la Clínica Mayo en sus recomendaciones.
Por el momento, dados los conocimientos actuales, sería más recomendable elegir otros pescados como el salmón, que sí es rico en ácidos grasos omega-3.