Soy nutricionista y esta es la receta con garbanzos que tienes que cocinar para subir tu energía

Soy nutricionista y esta es la receta con garbanzos que tienes que cocinar para subir tu energía

Actualidad gastronómica

Soy nutricionista y esta es la receta con garbanzos que tienes que cocinar para subir tu energía

Jaume Giménez, experto en nutrición de Nutritional Coaching y asesor de Dia, comparte sus recomendaciones para cargar las pilas de vuelta a la rutina. 

19 septiembre, 2024 07:00

Con la vida actual y sus múltiples exigencias, muchas personas se encuentran con una bajada en sus niveles de energía, especialmente al volver de las vacaciones o durante los cambios de estación. Jaume Giménez, experto en nutrición y parte del equipo de Nutritional Coaching, destaca tres consejos esenciales para incrementar la energía y mantener un estilo de vida saludable. 

1. Un desayuno energético para empezar el día con fuerza

El desayuno es fundamental para arrancar el día con buen pie. Según Giménez, una opción ideal sería una tortilla de atún acompañada de yogur con frutos rojos. Este tipo de comida no solo es nutritiva, sino que, según el experto, tiene un impacto positivo en el estado de ánimo.

El huevo, al ser una fuente rica en triptófano, ayuda a la producción de serotonina, un neurotransmisor relacionado con la felicidad. El atún, por su parte, es una fuente excelente de omega-3, una grasa saludable que contribuye a mantener el buen funcionamiento del cerebro. Finalmente, los frutos rojos aportan polifenoles, conocidos por sus propiedades antiinflamatorias, lo que mejora la salud general y, por ende, los niveles de energía.

2. Hidratación constante

Otro pilar fundamental es la hidratación adecuada. No esperar a tener sed es clave, ya que la sed suele ser un indicativo de deshidratación, lo que puede afectar negativamente la energía y el rendimiento cognitivo.

Giménez sugiere mantener siempre una botella a mano, ya sea con agua o con infusiones como el té verde, que además de hidratar, puede aportar antioxidantes beneficiosos para el cuerpo. Beber agua a lo largo del día ayuda a mantener el equilibrio corporal y favorece el rendimiento físico y mental, lo que se traduce en una mayor vitalidad.

3. Planificación y preparación de comidas

La planificación de las comidas con antelación es crucial para mantener un nivel de energía estable. Giménez subraya la importancia de controlar las porciones y planificar menús equilibrados que incluyan todos los nutrientes necesarios.

De hecho, propone seguir la Guía del Plato de Harvard, que divide el plato en tres partes: un 25% dedicado a cereales integrales como arroz o pan integral, otro 25% a proteínas saludables como el pescado o las legumbres, y un 50% a vegetales y frutas. Este balance asegura que el cuerpo reciba los nutrientes adecuados para mantener la energía a lo largo del día.

Ensalada de pollo a la plancha con quinoa y vegetales asados.

Ensalada de pollo a la plancha con quinoa y vegetales asados. null

Siguiendo estos pasos se puede elaborar un menú semanal que recoja una dieta equilibrada como este que proponen desde día: 

Lunes: Ensalada de pollo a la plancha con quinoa y vegetales asados.
Martes: Bol de salmón con arroz integral y verduras salteadas.
Miércoles: Tacos de tofu con vegetales y alubias negras.
Jueves: Ensalada de garbanzos con espinacas, cebada y queso feta.
Viernes: Wrap integral de pavo con hummus y vegetales.

Ensalada de garbanzos con espinacas

En Cocinillas nos sobran las recetas con garbanzos y algunas de ellas son con espinacas. Pero si nos vamos a lo sencillo nos quedamos como una ensalada. La que sugieren anteriormente se puede elaborar en no más de 2 minutos. Los garbanzos se pueden hervir previamente, pero si no se tiene ni tiempo ni ganas unos garbanzos de conserva harán el apaño. Recuerda no tirar el líquido, porque se puede aprovechar para otras muchas cosas. 

Con 200 gramos tendrás una buena ración, añade unas cuantas hojas de espinacas frescas, y una cucharada de cebada, un cereal ideal para la alimentación diaria que aporta hidratos de carbono de absorción lenta además de reducir el colesterol y los problemas cardiovasculares. Para terminar desmenuza en trocitos 80 gramos de queso feta que le aportan otra textura (y diferentes frescura) al plato. Si no nos queda tipo feta, el queso de cabra funciona igual de bien.