El mejor truco para cortar cebolla sin llorar

Hace más o menos un año os trajimos unos cuantos trucos populares para cortar cebollas sin llorar a moco tendido, pero hemos descubierto uno muy simple que es el mejor truco para cortar cebolla sin llorar.

Personalmente amo la cebolla y la odio a partes iguales, pues me encanta usarla para cocinar pero odio la irritación que me causa hasta el punto de que soy de esas que acaban con unas gafas de bucear puestas intentando cortar la cebolla sin rebanarme un dedo, porque en cuanto se empañan las gafas acabo a ciegas. Hasta que he descubierto este truco.

El mejor truco para cortar cebolla sin llorar

Ya sabemos que las cebollas nos hacen llorar por los gases que emanan los compuestos sulfurosos presentes en las cebollas. Pero es que estos compuestos se concentran en el “corazón” de la cebolla, por eso, cuando nos ponemos a la tarea, pelamos la cebolla y le quitamos la parte de abajo con las raíces lo que estamos haciendo es propiciar que salgan los gases en mayor cantidad.

En cambio, si a la hora de retirar las raíces hacemos un corte algo distinto, podremos retirar el corazón entero sin que desprendan los gases que tanto nos irritan las mucosas y nos lo hacen pasar fatal. Para hacerlo basta con que nos ayudemos de una puntilla y en vez de hacer el corte recto para quitar las raíces haremos el corte en ángulo hacia adentro como si fuésemos a hacer un hoyo y tiraremos de la raíz para sacar la parte central. Después ya podemos pelar la cebolla y cortarla con un cuchillo bien afilado.

Eso no quiere decir que haya que tirar el trozo que hemos quitado, podemos meterlo unos minutos en el congelador -otro de los trucos para cortar cebollas sin llorar- y cortarlo después rápidamente, que como es un trozo muy pequeño se cortará rápido y no dará tiempo a que nos haga llorar.

Para que veáis cómo se aplica el mejor truco para cortar cebolla sin llorar os dejo un vídeo en el que se ve perfectamente cómo hay que realizar el corte para retirar el corazón.

Como veis es facilísimo y creedme que se ahorra mucho picor de ojos.

Fuente | WonderHowTo