"Sus cualidades son numerosas: su fortaleza, su dignidad, sensibilidad, capacidad de superación, sentido de la justicia y determinación por llegar a la excelencia de lo que se propone siempre me ha impresionado. Y no sigo, porque nunca acabaría de hablar'. El entonces príncipe de Asturias, Felipe de Borbón (48 años) elogiaba así a la modelo noruega Eva Sannum (41) mientras anunciaba el fin de su relación, un romance nunca reconocido oficialmente y que había comenzado cuatro años antes, concretamente en 1997. Los presentó el príncipe heredero Haakon de Noruega (43), pues Sannum era muy amiga de Mette Marit (43). De hecho, la boda de los noruegos, de la que este jueves se cumplen exactamente 15 años, fue el escenario elegido para dar visibilidad a una relación que nunca oficializó la Casa Real española.
Don Juan Carlos (78) nunca vio con agrado que una modelo de lencería extranjera que había posado en topless pudiera convertirse en la futurible reina de España. Por eso, no es de extrañar la sorpresa y el impacto que supuso que el heredero al trono patrio y Sannum fueran retratados de forma tan relajada mientras disfrutaban de consumiciones diversas durante el enlace. Y mucho menos que la maniquí luciera lo que se consideró un 'estilismo poco apropiado' para una ceremonia regia debido principalmente al amplio escote.
Prácticamente se desencadenó un debate nacional que don Juan Carlos cortó de raíz gracias a la mediación de algunos consejeros. Todos ellos consideraban "inapropiada" a aquella modelo para reinar.
El entonces príncipe mantuvo un tenso encuentro con su padre que le llevó a plantearle una especie de últimatum. En juego estaba la corona y uno de los amores de la vida de don Felipe, que acabó renunciando a este último en aras de la institución, un gesto que fue alabado en privado por el entonces jefe de la Casa Real, Sabino Fernández Campos, quien consideró que el actual rey se planteó incluso renunciar a sus derechos dinásticos por amor.
Por su parte, José María Aznar (63) también mantuvo una conversación con don Felipe en la que le trasladó lo que muchos pensaban: se trataba de una cuestión de estado en la que debía prevalecer el interés general de España por encima de cualquier sentimiento personal.
Sea como fuere, don Felipe y Eva Sannum decidieron emprender caminos separados. El actual monarca había optado por la permanencia de la estabilidad familiar y sobre todo de la corona.
¿Qué fue de Eva Sannum?
La ex modelo tenía sólo 26 años cuando puso punto final a su relación con el actual monarca. El propio don Felipe pidió que los medios la dejaran tranquila para que pudiera continuar con sus estudios. Sannum, que había estudiado español en la Universidad Complutense, retomó entonces la carrera de publicidad en Noruega, donde trató de recuperar su condición de ciudadana anónima.
Tiempo después conoció a Torgeir Vierdal, un publicista que dirige la agencia Anorak y con el que actualmente comparte su vida y con el que tiene dos hijos pequeños a los que suele deleitar con sus creaciones culinarias.
La mujer que se quedó a las puertas de ser princesa vive en Oslo junto a su familia, en un palacete de tres alturas y de estilo renacentista edificado en 1880 y valorado en 1,6 millones de euros. Hay que tener en cuenta que sus ingresos oscilaban en los últimos años en torno a los 45.000 euros.
Sannum lleva una vida tranquila, centrada en su trabajo como directora creativa en la compañía Geelmuyden Kiese, donde llegó procedente de la agencia de comunicación Try, tal y como ella misma señala en sus perfiles profesionales y en la web de la empresa.
En Noruega ha encontrado la paz y el reconocimiento que se le negaron en España. De hecho, ganó el Lápiz de Oro como escritora de textos así como otros galardones reconocidos en el mundo de la publicidad.
Pero no es lo único a lo que se dedica Sannum, pues su paso por España le marcó tanto que se ha convertido en representante de la opinión pública en la Comisión Profesional de Prensa, desde donde arbitra quejas a los medios de comunicación con el fin de defender los derechos a la intimidad y el honor.
La ex modelo dedica su tiempo libre a su familia, suele realizar escapadas al campo y disfrutar del mar.
Sannum no es ajena a las nuevas tecnologías y, a pesar de encabezar la Comisión Profesional de Quejas de la Prensa que protege el derecho a la intimidad, es consciente de poder de las redes sociales y las usa frecuentemente. En Twitter, cuyo perfil hace tiempo que no actualiza, cuenta con más de 10.000 seguidores, mientras que se muestra más asidua a Facebook, donde cuelga a menudo fotografías de sus hijos.
Su marido es también muy activo en esta red social: tiene casi medio millar de amigos y suele compartir instantáneas de sus viajes y otros momentos con amigos.