No hay ninguna duda, a estas alturas, de que la reina Letizia (50 años) es un absoluto icono de moda. Las marcas, españolas e internacionales, se matan por que la esposa del jefe del Estado español luzca alguno de sus trajes, zapatos, complementos o joyas.

Y ella, con el buen tino de su estilista, Eva Fernández (40), no sólo lo hace mejor cada día, sino que se interesa por la industria desde dentro: cómo funciona el sistema, cuánta gente vive del sector, qué tipo de materiales se utilizan para cada prenda, cuánto se contamina si se hace un pedido de ropa a una firma extranjera...

Letizia lo intenta con todas sus fuerzas y, aunque odie que los medios de comunicación y las redes sociales hablen de sus looks, aprueba. Y con nota. Pero nadie es perfecto. A lo largo de estos 12 meses, la soberana ha regalado momentos gloriosos en el plano de moda, pero también ha cometido algún que otro desliz fashion. Por ello, EL ESPAÑOL analiza los 12 errores de estilo de la reina Letizia en este año 2022.

["El epítome de la elegancia" y "sus tonificados brazos": lo que prensa internacional destaca de la reina Letizia]

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    Enero - Su dos piezas de Felipe Varela

    Se trata de un clásico dentro del impresionante vestidor de la reina Letizia. Es un traje de dos piezas firmado por Felipe Varela, realizado en cheviot azul y bordado a mano con hilo, compuesto por una falda de vuelo y una chaqueta entallada gracias a un cinturón. Lo más tedioso de este outfit es que lo lleva siempre con los mismos complementos: stilettos de pitón azul y bolso a juego.

    El pasado mes de enero, para inaugurar su agenda en solitario de 2022, Letizia resucitó este look en Madrid, donde presidió el acto de entrega de la Medalla de Honor de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando a la Asociación Hispania Nostra.
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    Febrero - 'Tweed' y cuero

    En el mes de febrero, la Reina presidió el 150º aniversario del Patronato de Huérfanos del Ejército de Tierra, un acto que tuvo lugar en la capital de España. Para acudir a tan castrense evento, la soberana hizo una especie de mix de look, unificando su estilo working girl y reina moderna. 

    La protagonista absoluta del look fue la chaqueta. Se trata de una pieza confeccionada en tweed en tonos que bailan entre el morado y el azul marino, de lana fina, que crea bloques contrastados. La prenda original pertenece a una colección pasada de Carolina Herrera y es una de las piezas que Letizia mandó a customizar:  decidió prescindir de algunos de los flecos.

    Los pantalones de cuero en color azul fueron estrenados en 2018 y grandes cabeceras de moda alabaron la decisión de la Reina. La moda cambia cada cinco segundos y, cuatro años después del estreno, podría ser el momento de reinventarse.
    Gtres
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    Marzo - Flores XXL

    Sucedió en Málaga... Los reyes Felipe y Letizia viajaron para presidir la inauguración del Tour del Talento y la proclamación del Premio de Artes y Letras de la Fundación Princesa de Girona.

    Para aquella mañana aún de invierno, la Reina eligió este vestido firmado por Galcon Studio que lleva un maxiclavel XXL en jacquard blanco. Un guiño a la ciudad a la que visitaba aunque quizá habría sido más adecuado lucir una biznaga malagueña, la confección artesanal con flores de jazmín y tallo de nardo.
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    Abril - Un abrigo "demasiado infantil"

    Los reyes Felipe y Letizia recibieron en abril, en el palacio de La Zarzuela, al presidente de Bulgaria, Rumen Radev, y a su esposa, Desislava Radeva. Para el almuerzo, la soberana eligió un vestido-abrigo de Carolina Herrera estilo baby doll. 

    El cuello es tipo camisero y destacaban los botones-joya que lleva la pieza divididos dos filas. Este diseño reside en el vestidor de Letizia desde 2018 y cuando lo adquirió tenía un precio de 2.500 euros. Existe también la versión vestido aunque se desconoce si la monarca tiene el twin set. 

    Lo estrenó en otro almuerzo, pero esta vez con el que fuera presidente de México, Enrique Peña Nieto. En aquella ocasión, los medios de comunicación y las redes criticaron la elección estilística de la reina Letizia y tacharon al abrigo de "demasiado infantil". Se llegó a decir, incluso, que era más idóneo para Leonor. 
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    Mayo - Su vestido más polémico

    Se trata de uno de los vestidos más polémicos no de este año 2022, sino de la historia de Letizia desde que forma parte de la Familia Real. Era mayo, y la Reina viajó desde Madrid a Valencia para presidir un acto de la Cruz Roja.

    Como suele hacer con las ciudades españolas a las que se desplaza -en Sevilla con Cherubina o en Palma con Pablo Erroz, por ejemplo-, Su Majestad seleccionó una pieza de una firma valenciana.

    Se trata de un diseño de la marca Serendipia, que costaba menos de 65 euros, pero que tenía una particularidad: por su estilo 'cut-out' dejaba al aire parte de su abdomen. En este caso, el perfecto six pack de la reina de España.

    "¿Era necesario?", se cuestionaban muchos. Algunas voces la acusaron de ir "demasiado lejos" en el plano fashion y otras, en cambio, aplaudieron su labor por dar visibilidad a firmas pequeñas de moda local y abriendo, además, un nuevo camino en el plano del estilo dentro de una institución tan recta como la monarquía.
    Gtres
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    Junio - Cuero en verano

    El 23 de junio, la reina Letizia presidió la II edición de los Premios Retina ECO, organizados por PRISA Media en colaboración con la consultora Capgemini. Para aquel caluroso día de verano, la soberana decidió lucir un vestido de cuero, algo que para muchos fue inexplicable.

    En concreto, se trata de un vestido kimono firmado por & Other Stories que estrenó en febrero de 2019 y que generó muchas noticias fuera y dentro de nuestras fronteras por tratarse de una elección que muchos consideraron demasiado moderna para una Reina. Es de manga corta acampanada, lleva escote en V y falda midi con una buena abertura posterior. Además, el diseño trae consigo un cinturón ancho que la Reina suele apretar para marcar cintura.

    Lo estrenó en la inauguración de ARCOMadrid, donde siempre apuesta por estilismos rompedores y donde hacía el tiempo justo para llevarlo, pues era invierno. Después, lo rescató en septiembre del año pasado, durante la entrega de otros premios, los Famelab.
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    Julio - Traje de chaqueta en plena ola de calor

    Era el primer acto que la reina Letizia presidía después de haber superado la Covid-19. Días antes, presidió junto al Rey y sus hijas, las infantas Leonor y Sofía, los actos relacionados con los Premios Princesa de Girona y la propia ceremonia de galardones.

    Para esta calurosa mañana de julio, en plena ola de calor africana, Letizia decidió lucir un traje de chaqueta de dos piezas firmado por Adolfo Domínguez y que estrenó un año antes.

    Para los 40 grados de temperatura que marcaban los termómetros a la sombra, eso sí, Letizia dejó en casa los zapatos de tacón y recurrió a unas cuñas de esparto en color rosa de Macarena Shoes. 
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    Agosto - Más 'cut-out'

    A estas alturas, la reina Letizia hace poco caso de aquello que puedan decir los medios de comunicación, al menos en el sentido fashion. Para su verano en Mallorca, los 10 días aproximadamente que estuvo junto a su esposo, sus hijas, la reina Sofía y la princesa Irene de Grecia, Su Majestad volvió a recurrir al estilo cut-out, aunque de una manera más discreta.

    La Reina seleccionó este vestido negro, de Mango, con estampado de flores blancas, sin mangas, de cuello redondo y que dejaba al descubierto sus tonificados brazos y parte de su abdomen. Y volvió, una vez más, el debate.
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    Septiembre - Mejor con otra blusa

    Tras la vuelta del verano y tras haber pasado más de 27 días sin que nadie -sólo gente muy cercana como su familia o el presidente del Gobierno por cuestión de seguridad- supiera de su paradero por hallarse en sus vacaciones privadas, la Reina llegaba muy bronceada y con ganas de recuperar su actividad institucional. 

    En esta ocasión, el error que encontramos en su outfit de working girl es la blusa: quizá demasiado baggy para una falda lápiz. La falda, efectivamente, la de Hugo Boss que comparte con otras royals europeas como Mary de Dinamarca o Sofía de Suecia, es un sueño. 
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    Octubre - Dos guiños fallidos

    A mediados de octubre, los reyes Felipe VI y Letizia realizaron su último viaje de Estado. Fue a la República de Alemania y allí, la Reina entregó una colección de momentos estilístico para el recuerdo: más que sobresaliente.

    Sin embargo, en su último acto en solitario, cuando acudió a conocer el Instituto Cervantes de Frankfurt, dio un pequeño resbalón con este outfit. El guiño a España por el rojo de su dos piezas de cuero y el homenaje al país visitado por ir de la firma Hugo Boss no fueron suficiente y algunos medios titularon que Letizia fallaba con este look. 
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    Noviembre - 'A wardrobe malfunction'

    El, 2 de noviembre, para presidir la 22.ª edición del Festival de Cine Ópera Prima en Tudela, Navarra, Letizia estrenaba una falda midi en colores blanco y azul, con agujero a la altura de la rodilla y de estilo vanguardista.

    Se trata de una pieza que corresponde a la colección Toga x H&M y que lleva algo más de un año en armario de la Reina, pero ¿era realmente así como estaba diseñada la falda para ser lucida? 

    Según comprobó EL ESPAÑOL, en la campaña que la firma japonesa lanzó en colaboración con la sueca, la modelo introduce la pierna por dentro del orificio y muestra su extremidad al lucir una bota de caña alta.

    Una opción que tiene mucho más sentido que esta. No resultaría nada extraño que en próximos actos, también por su sentido común a la hora de repetir prendas, luzca Letizia esta pieza con algunas de sus botas mosqueteras OTK -over the knee-. 
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    Diciembre - Tonos que se matan

    Es de primero de moda saber que dos colores en diferente tono acaba matando visualmente a un outfit que, como el de la reina Letizia, a priori es perfecto. Además, es inexplicable que, en Los Ángeles, California, que es donde está tomada la fotografía -a donde fue la soberana para presidir la inauguración del Instituto Cervantes- tuviera la necesidad de llevar un abrigo. Y de estreno. 

    Habitan en el vestidor de Letizia un sinfín de piezas de abrigo que habrían sustituido perfectamente a esta de Carolina Herrera que tiene un precio de 990 euros. Es un error de formas y de fondo estilístico, pese a que su imagen y  labor de representación, dentro y fuera de nuestras fronteras, sea siempre encomiable.
    EFE