Este año, nuevamente, los Reyes no se han desplazado a la isla, pero la emérita Sofía (84 años) no falta nunca a la cita. Acompañada de la princesa Irene (80), asistía en la tarde del 3 de abril al concierto de Semana Santa en la Catedral de Palma de Mallorca, el mismo lugar donde en 2018 se vivió aquel tenso rifirrafe entre ella y Letizia (50). Sin embargo, este 2023 todo han sido sonrisas, relax y cálidos gestos por parte de la madre de Felipe VI (55), que se mostraba encantada de atender un evento que para ella es muy especial.

No está sola, siempre cuenta con el apoyo incondicional de su hermana, que no se separa de su lado. La música es una de las grandes pasiones de la esposa de Juan Carlos I (85), así que disfrutó enormemente de la pieza 'Un réquiem alemán', de Johannes Brahms, interpretado por la Orquesta Sinfónica Illes Balears, dirigida por Pablo Mielgo, y la Coral Universitat de les Illes. Este concierto tiene un sentido benéfico para colaborar con la fundación Projecte Home Balears, que ofrece tratamientos para personas con problemas de drogadicción para ayudarles a salir adelante.

La reina Sofía llegó al templo muy relajada y luciendo una gran sonrisa en su rostro. Llamó la atención también su estilismo, aunque sigue vistiendo de luto por la muerte de su hermano, Constantino de Grecia, que falleció el pasado mes de enero, en esta ocasión aligeró un poco el tono monocromático y añadió un vistoso fular blanco con rosas negras. Este complemento es uno de sus preferidos, el que más usa encima de chaquetas y abrigos, aunque luego se lo quitó.

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Sofía y su hermana, Irene de Grecia. Efe

Una vez dentro de la catedral, la Emérita e Irene de Grecia se sentaron juntas, en los lugares destacados y reservados especialmente para ellas y disfrutaron de la música compartiendo algunos comentarios. El ambiente era distendido, nada que ver con aquella Semana Santa de hace cinco años cuando se produjo el enfrentamiento que dio la vuelta al mundo y que aún no se ha olvidado. La negativa de Letizia a que su suegra posara con sus nietas para la prensa y el manotazo de Leonor (17) aún resuenan en los innumerables titulares que provocó.

Ambas reinas sólo han vuelto a coincidir en la catedral de Palma en Semana Santa en 2019, cuando trataron de aparentar normalidad intentando que su rifirrafe quedara en el olvido, aunque la tensión estaba en el ambiente. Desde entonces, los Reyes no han vuelto a cumplir con la tradición de Pascua en Mallorca y este 2023 pasarán estos días de vacaciones en familia, de manera privada, sin actos en su agenda institucional.