Iñaki Urdangarin vuelve a ser libre: varias limitaciones y un asunto por resolver tras casi seis años de condena
Al exmarido de la infanta Cristina le impusieron una condena de cinco años y 10 meses por su implicación en el caso Nóos.
9 abril, 2024 01:39Día trascendental para Iñaki Urdangarin (56 años). Se termina la condena de cinco años y 10 meses que le impuso la Audiencia de Palma por su implicación en el caso Nóos. Este martes, 9 de abril, el que fuera yerno de los Reyes eméritos vuelve a ser un ciudadano libre. Sin embargo, todavía le queda un asunto por resolver.
Su libertad no implica la eliminación de sus antecedentes penales. Para ello deberá esperar otros cinco años siempre y cuando no vuelva a delinquir. Durante este tiempo, Urdangarin no podrá acceder a algunos trabajos, ser miembro de un jurado, desempeñar ciertas acciones de voluntariado o tener perros de razas potencialmente peligrosas. Incluso así, el fin de su condena no deja de ser una gran noticia para el exduque de Palma. Coincide, además, con un momento de significativos cambios.
Fue el pasado 24 de enero cuando se comunicó que había firmado el divorcio con la infanta Cristina (58) dos años después de anunciar su separación. Así, el exjugador de balonmano quedaba libre para rehacer su vida al lado de su actual pareja, Ainhoa Armentia (43). Desde entonces, tal y como revelaron a EL ESPAÑOL, Urdangarin se siente "liberado", pues previo a la disolución del matrimonio vivió momentos complicados, de acuerdos y consensos.
Hoy, la libertad de Urdangarin es doble. En un primer momento, el exmarido de la infanta Cristina fue condenado a seis años y tres meses de prisión por delitos de corrupción y fraude. Pero finalmente, el Tribunal Supremo rebajó la pena a cinco años y 10 meses al absolverle del de falsedad en documento público.
El 18 de junio de 2018, Iñaki Urdangarin ingresó en la cárcel de mujeres de Brieva, en Ávila, convirtiéndose en el primer familiar directo del Rey en entrar en prisión desde la restauración de la monarquía en democracia. Se le castigó por malversación, prevaricación, fraude a la Administración, dos delitos fiscales y tráfico de influencias por su papel en el caso Nóos. El exduque de Palma cumplió condena en un módulo especial y asilado del resto de celdas.
Un año y tres meses después, en septiembre de 2019, recibió un permiso para hacer voluntariado en la ONG El Hogar Don Orione, ubicada en Pozuelo de Alarcón y dedicada a la atención de personas con discapacidad. Así, se le permitió salir de prisión un par de veces por semana.
Una vez cumplida la cuarta parte de la condena, en diciembre de 2019, Iñaki Urdangarin disfrutó de su primer permiso penitenciario. Así, durante cuatro días que coincidieron con las fiestas de Navidad pudo estar con su familia en Vitoria.
En junio de 2020, dos años después de su ingreso en la cárcel de Brieva, se suavizó su encierro. Iñaki Urdangarin pasó a ser clasificado como interno de segundo grado y obtuvo el derecho de disfrutar de 36 días al año fuera de prisión. Sin embargo, los permisos y su actividad de voluntario quedaron suspendidas debido a la pandemia del coronavirus.
A comienzos de 2021, Urdangarin fue trasladado al Centro de Inserción Social (CIS) de Alcalá de Henares para continuar con su condena y someterse al programa de reinserción para condenados por delitos económicos. Fue su vía de rehabilitación y de alcanzar el tercer grado, que obtuvo pocas semanas después.
En marzo, al tener la opción de regresar a la vida laboral, volvió a cambiarse de prisión y pasó a la alavesa de Zaballa, donde solo tenía que dormir de lunes a jueves. Entonces, Iñaki Urdangarin se encontraba en régimen abierto.
El excuñado de Felipe VI (56) volvió al trabajo como consultor del bufete de abogados Imaz & Asociados, en Vitoria, donde conoció a Ainhoa Armentia. Por su buen comportamiento, a Urdangarin le permitieron no pernoctar en la cárcel y someterse sólo a un control por semana. Se presentaba en prisión o llamaba por teléfono si estaba fuera de la ciudad, además de seguir con el programa para condenados por delitos económicos.
En marzo de 2022, una vez cumplidos dos tercios de la condena, Iñaki Urdangarin obtuvo la libertad condicional, despidiéndose definitivamente de la cárcel. Sin embargo, ha tenido que esperar hasta este martes, 9 de abril, para volver a ser un ciudadano libre.