Marius Borg, hijo de la princesa Mette-Marit, detenido de nuevo en Oslo por presunta violación: el comunicado de la Policía
- Høiby ha sido arrestado este pasado lunes, día 18, cuando iba en coche con su exnovia, protagonista ésta del incidente que dio lugar a la primera detención.
- Más información: Haakon de Noruega cancela su agenda para acompañar a su hijastro, Marius Borg, a un centro de rehabilitación.
Los problemas suman y siguen para la princesa Mette-Marit (51 años) y la Casa Real noruega está al límite y afronta su peor crisis. El díscolo y conflictivo hijo mayor de la Princesa, Marius Borg Høiby (27), ha sido detenido de nuevo este pasado lunes, 18 de noviembre, acusado -nuevamente- de presunta violación.
Según el comunicado que ha emitido la Policía de Oslo, el joven ha sido arrestado a las 23:12 -hora local- , en la calle Frogner de Oslo, cuando iba en coche con su exnovia, protagonista ésta del incidente que dio lugar al primer arresto. En esta ocasión, la Policía, además, ha acusado a Marius, de conducir sin permiso.
Se trata de su segunda detención en apenas tres meses. De acuerdo a este escrito, "la Policía ha ampliado los cargos contra Marius Borg Høiby. La imputación incluye también un caso de infracción del artículo 291 del Código Penal por mantener relaciones sexuales con alguien que está inconsciente o que por otros motivos no puede oponerse al acto".
Así las cosas, y siempre según los encargados de la investigación, el hijastro de Haakon de Noruega (51) mantuvo relaciones sexuales sin el consentimiento de la víctima, "que estaba inconsciente y no podía resistirse". Al cierre de este artículo, Marius se encuentra bajo custodia central en Groenlandia.
De momento, se desconoce si será presentado ante un juez o si se hará oficial la petición de prisión preventiva. "Aún no se ha tomado ninguna decisión sobre si debe comparecer en una audiencia constitucional. Volveremos sobre esto", ha asegurado el fiscal Andreas Kruszewski.
"Ella está pasando por un momento difícil y es difícil. Ella no denunció el incidente, fue la policía quien abrió el caso", ha dejado patente, en esta ocasión, la asistencia jurídica de la víctima, Hege Salomon. Conviene recordar que el propio Marius reconoció, semanas atrás, sus problemas de adicción. También se hizo público que su padrastro, Haakon, canceló su agenda y lo había acompañado a un centro de rehabilitación.
Según deslizó el medio Se og Hør, el marido de Mette-Marit y su hijastro, Marius, fueron vistos, en los primeros días de noviembre, en un avión comercial con destino la capital de Inglaterra y del Reino Unido. Era en torno a las 13 horas del pasado 7 de noviembre cuando Haakon y Marius tomaron el vuelo. Subieron al avión cuando ya todos los pasajeros ocupaban sus asientos.
Allí, en Londres, existe un centro de desintoxicación muy puntero, y al que se confió, inicialmente, el caso de Marius. Amén del comunicado que emitió, en el que reconocía su enfermedad, el pasado mes de octubre el abogado de Marius aseguró que en breve éste iba a someterse a un tratamiento.
"Han sido semanas duras y difíciles para todos, lo que le ha dificultado el hecho de centrarse en sus propios problemas", fueron las palabras que empleó el letrado. El protagonista dijo lo que sigue en su misiva: "He luchado contra el abuso de sustancias durante mucho tiempo, algo por lo que he estado en tratamiento en el pasado. Ahora retomaré este tratamiento y lo tomaré muy en serio".
No obstante, a la luz de su nueva detención, todo hace indicar que los problemas de Marius persisten y empeoran. El príncipe Haakon de Noruega habló en público, hace unas semanas, sobre el difícil trance por el que atraviesa su hijastro.
"Entiendo que hay muchas preguntas sobre esto. Como entenderán, por supuesto que es una situación difícil. Hay una investigación policial en marcha y no me parece correcto hablar sobre los distintos elementos", defendió el heredero al trono nórdico.
Por su parte, Mette-Marit, que estuvo varias semanas de baja por los efectos del tratamiento contra la fibrosis pulmonar que le fue diagnosticada en 2018, pidió "comprensión" para no hacer más declaraciones en su única aparición pública.