Se ha visto envuelto en un triángulo amoroso del que ha intentado salir airoso sin conseguirlo. Por el momento. Tan intensa ha sido la campaña sobre sus amoríos que tuvo que salir al paso en su último mítin. Emmanuel Macron (39) está casado desde hace 10 años con Brigitte Trogneoux (57), su profesora en el instituto, 20 años mayor que él. La relación ya ha dado que hablar en Francia, aunque parece que no tienen suficiente. Porque ahora, la prensa gala se ha hecho eco de un (falso) rumor que corría por los pasillos del Elíseo desde hace meses: Macron podría tener una relación homosexual paralela a su matrimonio.
El rumor no habría pasado de eso si no fuera porque el propio implicado lo desmintió en un mítin, dando así pábulo a quienes buscan noticias frescas y jugosas en una campaña electoral que todavía no ha empezado (las elecciones presidenciales son el 23 de abril). Lo hizo con sorna, en su estilo, pero sin querer agrandó la noticia.
"Si en alguna cena, o en alguna cadena de mensajes, os dicen que mantengo una doble vida con Mathieu Gallet o con cualquier otra persona, será que se me ha escapado un holograma pero sin duda no soy yo", dijo el candidato a la presidencia. "Este rumor no solo es desagradable para Brigitte, sino que además ella, que comparte mi vida de día y de noche, se pregunta cómo me las arreglo físicamente".
Mathieu Gallet (40) es el hombre de quien todos hablan. Gallet es el presidente de Radio France, el consorcio de radios públicas francesas, un cargo que detenta desde el 27 de febrero de 2014. Antes había sido el presidente director general del Instituto Nacional de Audiovisual.
Su carrera ha sido fulgurante y muchos han querido ver en su ascenso una relación directa con su entendimiento con Macron, aunque fue Frédèric Mitterand (exministro de Cultura y sobrino de François Mitterrand, expresidente francés) quien le propuso para su primer puesto de relevancia. Lo conocía por su labor al frente de los departamentos de prensa de algunos ministerios, como el de Industria y posteriormente el de Cultura.
Gallet tiene fama de trabajador incansable, de tipo brillante y encantador, tanto que suele aparecer en las listas de hombres más atractivos del país. La revista Têtu, por ejemplo, lo encumbró al puesto número uno del ranking de hombres más sexys de los medios de comunicación (noveno en la lista general).
Los rumores convertidos en actualidad han animado la campaña electoral francesa, ya de por sí movida. A la caída de los supuestos favoritos, como Manuel Valls, se suma la alta valoración que muchos tienen de Marine Le Pen, la candidata de extrema derecha que podría llegar a la presidencia francesa. Y en este punto en el que muchos han visto la sospecha: la posibilidad de que Macron sea homosexual le restaría muchos votos conservadores.
El candidato es un verso libre dentro del Partido Socialista -ha declarado que no es socialista- y se presenta con su propia plataforma, En Marché, una cuestión atractiva para los votantes de derechas que no ven con buenos ojos el discurso populista y trumpista de Le Pen. Pero un homosexual en el Eliseo… Eso ya es demasiado para algunos, por muy liberal que sea su política económica.