Rocío Carrasco y su hijo se ven las caras en un juzgado tras un año separados
David Flores ha llegado de la mano de Olga, la mujer de su padre Antonio David Flores. La hija de 'la más grande' ha entrado con su abogado y sin Fidel Albiac.
17 julio, 2017 12:42Noticias relacionadas
Una nueva cita judicial ha enfrentado este lunes a Antonio David Flores (41 años) y Rocío Carrasco (40). El colaborador de televisión se ha trasladado hasta los juzgados de Alcobendas para declarar por un supuesto quebrantamiento de custodia. La hija de 'la más grande' demandó a su exmarido y padre de sus hijos por no haberle devuelto al joven el verano de 2016, cuando éste era todavía menor y tenían un régimen de custodia compartida. Motivo por el cual aseguró que no pudo disfrutar de David, como era su deseo, el día de su enlace matrimonial con Fidel Albiac (44).
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La sorpresa a las puertas del juzgado la daba precisamente el joven, a quien los medios de comunicación no esperaban. Aunque siempre se había afirmado que los hijos de la expareja podrían ser llamados a declarar en el caso de solicitarlo alguna de las partes (Rocío o Antonio David) o bien si la Fiscalía así lo consideraba, no había constancia de la presencia de David en esta comparecencia.
El hijo menor de Rocío Carrasco y Antonio David ha llegado de la mano de Olga, la mujer de su padre, con la que mantiene una excelente relación, y de su padre, que iba con muletas. Por su parte, Rocío, ocultando su mirada tras unas enormes gafas de sol y con rostro serio, ha entrado a los juzgados de la localidad madrileña con su abogado. Ha llamado la atención que Fidel Albiac no haya estado a su lado en un día tan importante. Esta es la primera vez que madre e hijo se van a ver frente a frente después de un año sin hacerlo.
Ahora Antonio David y su hijo tendrán que explicar ante el juez los motivos que le llevaron a no entregarle al menor a su madre. En su día explicó que David le manifestó su descontento por tener que regresar al domicilio de su progenitora, y como sólo faltaban dos meses para que cumpliera la mayoría de edad, decidió que se quedara con él, incumpliendo así el convenio regulador.
Violencia de género
En la misma macroquerella también se recogen otros asuntos como el maltrato psicológico, al que según Rocío Carrasco, ha estado sometida desde que hace 18 años se separara de Antonio David. Un caso que está en manos de un juzgado de violencia de género. Concretamente le acusa de un delito continuado de maltrato tras años ofreciendo declaraciones en los medios de comunicación que le han ocasionado lesiones psíquicas.
La justicia decidirá ahora si archiva el caso o sigue adelante con él. El exguardia civil no ha querido hacer ningún tipo de declaraciones a la prensa, ya que según ha comentado su abogado, "quiere ser prudente" y considera que "el tema se está poniendo muy serio".
Antonio David Flores y Rocío Carrasco se casaron en marzo de 1996 en la finca Yerbabuena. Sólo tres años después comenzaron las desavenencias entre la pareja y decidieron poner punto final a su historia. Fruto de su amor son sus hijos Rocío y David, quienes viven actualmente con su padre. De hecho, Rocío Flores no quiere saber nada de su madre y no mantiene relación alguna con ella desde hace años.