Son varias las ciudades españolas que tratan de recuperar la normalidad cultural a golpe de concierto. Aunque sea con el público sentado, la música se convierte en una vía de escape nada descabellada cuando la Covid-19 sigue presente en nuestras vidas, a pesar del ritmo en la campaña de vacunación.

En este sentido, hay un artista que se está convirtiendo en uno de los grandes protagonistas de este verano. Se trata del colombiano Camilo (27 años), uno de los grandes ejemplos de que cuando una carrera musical despega puede describir una trayectoria fulgurante. Echando la vista atrás, el de Medellín era un cantante prácticamente desconocido en nuestro país hace apenas seis años.

Curiosamente, uno de los primeros grandes éxitos a nivel internacional que lleva su firma no fue interpretado por él mismo. La archiconocida Sin pijama, de Becky G (24), fue compuesta por Camilo, quien tuvo que esperar un poco más para obtener el reconocimiento deseado como solista.

Si el 2020 fue el año de la irrupción del coronavirus, a nivel personal Camilo tendrá unos recuerdos mucho más gratos. Además de haber contraído matrimonio Evaluna Montaner (24), el artista colombiano fue abriendo puertas a ritmo de colaboraciones con artistas tan reconocidos como Pablo Alborán (32) u Ozuna (29).

Del anonimato al estrellato

Con estos antecedentes, no había que esperar mucho para que Camilo lanzara su primer álbum. El 17 de abril del 2020 veía la luz Por primera vez, un disco que cedió el relevo apenas once meses después a otro LP, Mis manos, lo que demuestra el excelente momento creativo que atraviesa. Ese doble lanzamiento ha hecho que los escenarios españoles reclamen con insistencia sus actuaciones. Murcia, Valencia, Cádiz o Palma de Mallorca ya han disfrutado de una gira que, lejos de cerrarse, tiene aún paradas programadas en Madrid o Barcelona, ya de cara al mes de septiembre.

Quizás esta popularidad es la razón por la que vamos conociendo más detalles de nuestro protagonista de hoy, quien, según confesó su pareja en un programa de televisión en Argentina, padece narcolepsia. Según el Instituto del Sueño, se trata de un trastorno del sueño de origen neurológico caracterizado por excesiva somnolencia diurna, acompañada en la mayoría de los casos de cataplejías.

Por tanto, una de las primeras conclusiones que se pueden sacar de esta enfermedad que si bien no es grave en sí misma sí que puede tener serias consecuencias, ya que se puede manifestar en actividades monótonas, como ver la televisión, pero también en otras que requieren más atención, como conducir un vehículo. Afortunadamente, la narcolepsia es un trastorno que afecta a un número muy bajo de la población. De hecho, se estima que solo se da en cinco pacientes por cada 100.000 habitantes, siendo el factor genético una de las causas más importantes, ya que suele repetirse en personas que tienen antecedentes familiares.

Uno de los aspectos que más preocupan a los especialistas es su diagnóstico, no solo por la importancia de poder establecer un tratamiento adecuado, sino para descartar otros problemas relacionados con patologías neurológicas o el síndrome de apnea del sueño. Una vez realizado dicho diagnóstico, el tratamiento suele basarse en el uso de medicamentos, a la vez que se incide en una correcta higiene del sueño: evitar el alcohol y ciertos fármacos o establecer un horario regular a la hora de dormir.

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