Desde que en el año 1992 el programa de Telecinco La Máquina de la Verdad basara su funcionamiento en el uso de un detector de mentiras llamado 'polígrafo', este instrumento se ha convertido en un habitual en la pequeña pantalla. A tu lado, En Antena o, actualmente, Sálvame y Sábado Deluxe, son algunos de los formatos que han hecho uso de este instrumento. Una prueba que ha propiciado momentos dramáticos y desternillantes a partes iguales, cuyos protagonistas han sido algunos de los personajes populares de la prensa del corazón.
Desvelar secretos o aclarar situaciones de conflicto, han sido funciones de este curioso aparato en televisión. Siempre manejado por expertos en descifrar las alteraciones fisiológicas de los individuos a través de sus respuestas a las preguntas que se formulan. Cuestiones, casi siempre incómodas, donde la persona que se conecta a los cables pone en juego su credibilidad ante los ojos de la audiencia.
Conchita Pérez es actualmente la poligrafista más mediática de nuestro país. Su colaboración con el programa estrella de Telecinco, Sálvame, ha hecho que su popularidad haya aumentado sustancialmente en los últimos años. Una tarea encomiable en la que ha tenido que lidiar con rostros tan controvertidos como Belén Esteban (46), Kiko Matamoros (63) o el propio presentador del formato, Jorge Javier Vázquez (50).
Según la poligrafista, esta prueba tiene un cien por cien de fiabilidad en lo que a aciertos se refiere. Así se lo explicó Conchita a Bertín Osborne (65 años) hace algunas semanas en el programa Mi casa es la tuya, donde contó en qué consiste su profesión fuera de los platós. "Es una herramienta que vale para más cosas de lo que la gente piensa. Para aclarar problemas de pareja, familia, robos en negocios...", esbozó la zaragozana durante la entrevista a Lydia Lozano (59). Un trabajo totalmente desconocido por muchos cuya formación académica es, para muchos, todo un misterio.
Hoy por hoy, la American Polygraph Association (APA), ubicada en la ciudad de Chattanooga (Tennessee), es el único organismo autorizado para la concesión del título de poligrafista. Asociación que, a su vez, tiene acreditadas a otras academias como la Mastron, que fue la elegida por la propia Conchita, para la formación en dicha materia. Centros que no son muy abundantes y que ya han instruido a un total de 2.700 profesionales en todo el mundo.
El curso para ser poligrafista es de un año de duración y tiene un coste que ronda los 5.700 dólares -unos 4.895 euros-. Una cantidad de dinero que puede variar según la escuela acreditada que ofrezca estos estudios. Entrar en una de estas academias no es tan sencillo como a priori pueda parecer, ya que antes de comenzar es necesario realizar una prueba de acceso en la que hay que demostrar que se tienen las actitudes pertinentes para desarrollar esta actividad.
Para realizar estos estudios y convertirse en un poligrafista autorizado, es necesaria la presencialidad. Razón por la que todos aquellos que lo deseen, deben trasladarse a Estados Unidos para aprender a interpretar el funcionamiento de 'la máquina de la verdad'. Una tarea que la discreta Conchita confiesa que realizó para después comenzar a ejercer esta peculiar actividad a partir del año 2007. Un giro de 180 grados en su carrera profesional, que antes estuvo vinculada las estaciones de servicio que pertenecían a su familia.
Los polígrafos más polémicos
Este curioso aparato que recoge las reacciones fisiológicas de las personas que se someten a él, ha generado grandes momentos televisivos. Muchos rostros conocidos no guardan precisamente un buen recuerdo de 'los cables de Conchita', ya que gracias a ellos han visto aireados sus secretos más escabrosos. Antonio David Flores (44) ha sido recientemente uno de los famosos que ha tenido problemas en su matrimonio a consecuencia del veredicto de la zaragozana, que desvelaba que una de las supuestas amantes del colaborador, Isabel #vila, decía la verdad al afirmar que había mantenido relaciones extramatrimoniales con él.
Echando la vista atrás, caben destacar polígrafos tan impactantes como el de Belén Esteban, que en 2014, tras someterse a un tratamiento de desintoxicación por consumo de drogas, fue preguntada sobre el asunto. La de Paracuellos dejó claro que su decisión de abandonar esos hábitos había sido definitiva, cuestión ante la cual, la máquina de Conchita le dio la razón.
Una de las parejas que acabó rota tras el paso de uno de sus componentes por el 'Polideluxe' fue la que formaban Estela Grande (24) y Diego Matamoros (34). A finales del año 2019, el hijo del colaborador confiaba en que sería capaz de 'engañar' al sistema al que se sometía mintiendo sobre sus infidelidades, un intento que resultó fallido y que reveló que Diego había estado con otras mujeres durante su matrimonio.
Pero el polígrafo no solo acarrea angustia revelando verdades incómodas. En febrero de 2017, María Jesús Ruiz (37) se sentó en el plató de Sábado Deluxe para esclarecer la cuestión que la atormentó durante años: las acusaciones que la vinculaban con el mundo de la prostitución. La ex Miss España lloró de felicidad al comprobar que Conchita le daba la razón al negar que había ejercido dicha actividad, una prueba que la sirvió, según ella, para recuperar el honor de su familia.
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