Jon Sistiaga: "Los hijos de puta que asesinan mujeres son simpáticos, siempre saludan"
"Aún no soy un hombre feminista, soy un machista que se está quitando" / "El porno crea hombres machistas y frustrados con su vida sexual" / "Se puede ser prostituta y feminista" / "El machismo considera galantería el acoso".
22 noviembre, 2017 04:24¿Saben ustedes que más de cincuenta palabras en castellano sirven para llamar “putas” a las mujeres, mientras que sus homónimas en masculino destacan cualidades positivas? El periodista Jon Sistiaga lo cuenta en Tabú Machismo, en 0#, el canal de Movistar+: la nueva temporada se estrena hoy miércoles 22 de noviembre, a las 22h, y el primer episodio cuenta con voces de excepción, en ambos sentidos del debate social. Desde Blanca Manchón, campeona de windsurf a la que los patrocinadores abandonaron cuando se quedó embarazada, a Cristina Seguí, ex militante de Vox y columnista política, que representa en este documental la mirada desinformada de las mujeres machistas.
María Riot, “puta feminista”, como se bautiza ella misma; María Castejón, historiadora y bloguera; Bebe, que reniega de que sus canciones sean himnos feministas o Clara Serra, diputada de Podemos. Entre los etcéteras: una Asociación de Hombres por la Igualdad y una abogada defensora de presuntos maltratadores.
Los datos que presenta este Tabú despedazan frontalmente el imaginario machista, pero -aquí un punto interesante- también se pregunta qué ha hecho mal el feminismo -o muy bien el patriarcado- para que no sea aún un movimiento ecuménico. ¿Por qué, si su definición es "deología que defiende que las mujeres deben tener los mismos derechos que los hombres", no todo el mundo dice a viva voz que es feminista?
¿Usted puede decir sin tabúes que es un hombre feminista?
(Risas). Bueno, aún no soy un hombre feminista, pero sin tabúes digo que soy un machista que se está quitando. Ser un hombre feminista es muy complicado, pero es la aspiración hacia la que vamos todos los hombres, aunque está claro que una educación de 50 años en una cultura machista deja posos.
¿Cuándo cambió usted el chip y se dio cuenta de que vivimos en estructuras machistas?
Bueno, nos damos cuenta muy a menudo en muchas cosas. Sobre todo cuando el machismo llega a su paroxismo, que es el asesinato a mujeres. Nos damos cuenta de que algo no funciona: los hijos de puta que asesinan mujeres son hombres simpáticos que siempre saludan, ah, resulta que el tipo era un cabrón dentro de su casa, un tipo deleznable. ¿Qué está pasando aquí? Son esas cosas. Hay 140.000 denuncias al año por malos tratos, hay muchos hombres cometiendo malos tratos… y todos tenemos hermanas, hijas y madres. Te pones a pensar un poco y no tienes más remedio que verlo claro.
El mayor problema del machismo es la pereza de pensar en quitarte esos privilegios. En pensar que, si esto sigue así, vas a tener que renunciar a tu posición de prevalencia, a un mejor trabajo y sueldo, o lo que sea. El sistema machista está muy bien montado, porque considera galantería cosas que son acoso, o considera educación ciertas señales… que son deferencias hacia esa parte de la humanidad que son las mujeres. Creen que abrirles una puerta es un síntoma de educación, pero no lo es si se supone que todos somos iguales.
¿Cree que le habrían dejado hacer este documental con la misma repercusión y crudeza si usted fuese una mujer?
A mí me dejan hacer siempre lo que propongo. Yo propongo historias y me van dejando hacerlas, por el momento. Aquí sí que no sabría decirte. Hay grandes periodistas en este país que podrían hacer un programa sobre machismo y no pasaría nada, aunque sí que es verdad que desde el mundo machista las acusarían de ser feministas encubiertas, etc. Siendo un hombre quien lo hace… no sé. Intento pensar que es un tema candente en nuestra sociedad, y yo como periodista me siento obligado a olfatearlo, a decir “aquí hay que hacer algo”. Este tema ocupa portadas dos veces por semana en el país.
Al menos no le llamarán “feminazi”.
No, no… “feminazi” sigue siendo un insulto desde el machismo más rancio, ni siquiera desde el posmachismo sutil, educado y tranquilo. Alguien que llama “feminazi” a una mujer está viendo cómo pierde privilegios. Es el machismo más duro, feroz y radical, el que trata a las mujeres como meros objetos sexuales.
¿Cree que la justicia de nuestro país es patriarcal? ¿Qué opina sobre el caso de la chica de San Fermín; cree que es lícito que no se hayan aceptado como prueba los whatsapps de ellos y sí el informe de la detective que la siguió a ella después del día de los hechos?
Bueno, el 52% de los jueces de nuestro país son mujeres, pero no están representadas en los órganos de decisión de la Justicia, como el Tribunal Superior o el Constitucional. No están en la misma proporción. La Justicia está básicamente dirigida por hombres. Mi opinión personal es que esos whatsapps del día anterior, de cuando estaban preparando “la juerga”, son muy clarificadores de las intenciones previas de estos señores. Indican el tono en el que están subiendo estos tipos a disfrutar de las fiestas de San Fermín. Por otro lado, todo el mundo tiene derecho a la defensa y están en su derecho de encargar el informe. Pero, ¿que ella tiene derecho también a reconstruir su vida? Por supuesto. Es horroroso indagar en su vida intentando buscar una actuación posterior a su supuesta violación que “muestre” que la ha fingido.
Entonces está de acuerdo en que ha habido un desequilibrio judicial al aceptar unas pruebas y no otras.
Sí, es obvio. Desconozco si el tribunal está formado sólo por hombres.
No sé si recuerda el caso de la jueza que le dijo a una mujer en juicio por violación que si había cerrado bien las piernas.
Casos de estos hay muchos. Mucha hemeroteca. Quiero creer que hay jueces y juezas mucho más serios con su trabajo y más respetuosos con la presunta víctima.
¿Cómo se explica a sí mismo discursos como el de Cristina Seguí, que después se ven desacreditados con los datos que mostráis en el documental?
Mujeres como Cristina en este país hay muchas. Su discurso es muy ideológico, pero sí creo que hay muchas mujeres machistas en este país, no sé si eso ha sido problema del feminismo por no haber sabido convencerlas o un éxito del machismo por mantenerlas en su lugar. Cristina refleja la opinión de gran parte de las mujeres de este país. Mira, uno de los supuestos violadores de la joven de Pamplona ha tenido un hijo con él en la cárcel, en un vis a vis. Es una mujer que ha aceptado que es como es, o que cree en su inocencia… y además tiene un hijo que probablemente se socializará con la visión del mundo que tiene su padre. O las mujeres que defienden al famoso alcalde del PP que dice que todas son no sé qué, o que incluso le votan. Comentarios como el del alcalde de Valladolid o el de Granada, que son sexistas pero son considerados chiquilladas o pequeñas gamberradas.
¿Puede el feminismo ser liberal, o como el liberalismo parte de que todos tenemos las mismas oportunidades de prosperar jamás podrá ver la desigualdad de género?
Eso es entrar ya en filosofía feminista. El feminismo, según la RAE, es el movimiento que aboga por la igualdad de derechos, y no dice si es liberal, socialista o comunista. No dice si es progresista o conservador. Es evidente que en los últimos años ha surgido una corriente feminista que considera que los males de las mujeres vienen de un sistema patriarcal basado en el neoliberalismo, y hay una connotación ideológica, eso es así.
Estará de acuerdo conmigo en que a las políticas de partidos de la derecha les cuesta reconocerse en público como “feministas”.
Sí. Probablemente el feminismo ha hecho cosas mal a la hora de atraer a todas las mujeres. Pero también te digo: no se me ocurre ninguna política de derechas que no esté de acuerdo en que las mujeres tengan las mismas oportunidades que los hombres. Mira el caso de Bebe, que también sale en el documental. Ella cree en la igualdad pero dice que no quiere etiquetarse como “feminista”.
¿Usted considera a Pablo Motos machista?
No veo su programa.
Cómo que no. ¿Y no está informado del debate social que señala sus comentarios sexistas y sus toqueteos con las entrevistadas de El Hormiguero?
No.
Tampoco del caso de Cárdenas o de Bertín Osborne.
Prefiero no meterme en dar nombres, porque es jugar en una liga que no me gusta. Ya me preguntaron en la SER. Me pidieron que me pronunciara sobre un personaje de los que has nombrado y me cayó la del pulpo. Cada uno hace su trabajo y lo intenta hacer lo mejor que puede.
¿Y como espectador? Teniendo en cuenta que la televisión educa y es democrática, ¿qué tipo de parrilla le parecería adecuada?
Pues como espectador me gustaría que las televisiones transmitieran los valores de la igualdad. Sobre todo las televisiones públicas, que se supone que son para todos los ciudadanos. ¿Que no hacen programas feministas? Bueno, pues no pasa nada, pero si hacen un programa machista habrá que acotarlo, tematizarlo y decir: “Este tipo de programa sale en determinadas horas y va para un público machista y facilón de risa gorda”.
Hablan en el documental sobre crear un nuevo modelo de masculinidad.
Sí, y ahí intento incluirme yo también. El hombre machista no tiene que ser un cazurro, ni un casposo ni un tío antiguo, igual que el feminista puede ser musculado y viril, pero consecuente con las ideas de la igualdad. Aunque sea un granuja, o un ligón… que no te quepa la mínima duda de que ese hombre también puede entender perfectamente que “no es no”, y puede querer la equiparación salarial con sus colegas mujeres, y quiere cogerse la baja de paternidad el mismo tiempo que su pareja.
¿El porno crea hombres machistas?
Es un hecho verídico. El porno es intrínsecamente machista, es la quintaesencia del machismo. Genera unos patrones de relación sexual en muchos jóvenes que no son reales. El porno es ficción, y el porno que se ve gratuitamente en internet, en el 95% de los casos, está hecho por hombres y para hombres, con una visión masculina y subjetiva en la que un tipo se está follando a una mujer a la que somete, seduce, humilla, una mujer totalmente plegada a sus placeres sexuales que siempre hace lo que él le pide, con una serie de posturas imposibles que no son reales. Luego hay muchos jóvenes que no sólo son machistas por el porno, sino que están frustrados con su vida sexual, porque su mujer no le pide ni hace lo que hacen las actrices porno, lo dicen los sociólogos.
¿Ser prostituta es servir al patriarcado?
Bueno, suscribir eso… no lo voy a suscribir. Es lo que dice el feminismo de tercera ola, el más feroz, pero es un debate absolutamente abierto. Sin embargo, todas las feministas que aparecen en el documental, desde María Castejón a Clara Serra, dicen que sí, que se puede ser prostituta y feminista, siempre que lo hagas como un trabajo donde no estás esclavizada ni obligada.
¿Cree usted en las cuotas?
Creo que las cuotas son necesarias de alguna manera, pero a corto plazo. Tiene que llegar un momento en el que tengamos un acuerdo donde coincidamos y estemos nivelados por meritocracia. Sí creo en las listas cremallera en los partidos. Me parece bien. Estamos muy cerca de poder pensar socialmente que hay tantas mujeres como hombres válidos para esos puestos, ¡y es que es así! Desde los políticos a los ingenieros.