El ensanchamiento del calendario en el baloncesto mundial sigue trayendo consecuencias. No sólo físicas y deportivas ni únicamente a nivel de clubes, sino también desde el prisma de las selecciones. Hacía tiempo que en España no se oía hablar de un equipo nacional B que complementase al absoluto. Es algo que quedaba ya muy lejano, anclado a épocas en las que los Juegos Mediterráneos todavía importaban algo (y a alguien) o a experimentos que no tardaron en desvanecerse. Sin embargo, el panorama ha cambiado de forma radical: nuestra canasta vuelve a tener dos grupos de trabajo en lo que respecta a la selección sénior porque así lo demanda el futuro más inmediato.

Los jugadores que se concentrarán en la localidad malagueña de Benahavís entre el 16 y el 23 de julio no se van a reunir para jugarse un billete para el Eurobasket (que también). Lo van a hacer, en primera y última instancia, para empezar a trabajar de cara al nuevo escenario que abren los partidos de selecciones a disputar durante la temporada de clubes. Habrá dos encuentros internacionales de clasificación para el Mundial en noviembre de 2017 y otros dos más en febrero de 2018 (más los de junio de 2018, septiembre de 2018, noviembre de 2018 y febrero de 2019). Los NBA no serán de la partida en estos encuentros y se presume que ocurrirá lo mismo con algunas de las grandes figuras que compiten en Europa. De ahí la iniciativa de la selección B, impulsada para fomentar un relevo generacional calmado y, sobre todo, necesario.

Con Eslovenia, Montenegro y un equipo de la fase previa como rivales, España necesitará quedar entre los tres primeros de su grupo (hay cuatro, de ocho selecciones cada uno) para pasar a la segunda fase. En ella, los tres primeros de los cuatro grupos que se formarán (seis conjuntos por grupo, arrastrándose los resultados de la fase inicial) estarán en el torneo mundialista de China. Uno al que seguro que acudirán varios de los 16 integrantes del equipo filial de este verano. Analizamos ese medio-largo plazo.

Bases

Guillem Vives

Guillem-Vives en una concentración con España. FEB

Uno de los directores de juego más prometedores de nuestro baloncesto. Ya sabe lo que es jugar en la absoluta (oro en el Europeo de 2015) y juega minutos de mucha calidad en Valencia Basket, el equipo donde terminó de explotar. El físico ha sido motivo de preocupación para él recientemente, pero su talento es evidente: el Barça ha estado a punto de ficharle varias veces. Se formó en el Joventut de Badalona y ganó un oro europeo sub18 (2011) y un bronce sub20 (2013) en categorías inferiores. 4,6 puntos, 1,2 rebotes y 2,4 asistencias de media en Valencia Basket.

Alberto Díaz

Alberto Díaz, MVP de la final de la Eurocup. Eurocup

Estará con los mayores dentro de muy poco. Ya ha dejado muy claro que es un veterano en el cuerpo de un chaval de 23 años, sobre todo esta última temporada. En Unicaja no pueden estar más contentos con él, MVP en la consecución de la Eurocup. Formado en Málaga, pasó por Bilbao y Fuenlabrada para foguearse. Plata continental sub20 en 2014, es otro de los bases españoles con más futuro. Como Vives, tiene buen tiro exterior y pasa bien. 4,5 puntos, 2,1 rebotes y 2,3 asistencias de media en Unicaja.

Quino Colom

Quino Colom en un partido de esta temporada. Unics Kazan

El jugador andorrano estuvo a punto de ser internacional absoluto en el pasado, pero se quedó a las puertas. Se lo viene mereciendo desde su etapa en el Bilbao Basket, que le llevó a tener un puesto importante en el Unics Kazan ruso. Allí ha disputado tanto Eurocup como Euroliga a un muy buen nivel, por lo que no sorprendería que tuviese un papel importante en la clasificación para el Mundial si así lo desea. También pasó por Fuenlabrada y Estudiantes en la ACB, ganando un bronce europeo como sub20 (2008) y otro como sub18 (2006). Muy polivalente. 11,3 puntos, 3,9 rebotes y 5,7 asistencias de media en el Unics Kazan.

Jaime Fernández

Jaime Fernández en un partido de este curso con Estudiantes.

Una de las eternas promesas del baloncesto nacional. Lleva toda la vida en Estudiantes, del que es capitán. Nombre propio del mercado de verano en la liga española, ya que todavía no se sabe si continuará o no en la escuadra colegial. Todos los años parece merecer jugar más. Estar en esta selección puede venirle muy bien para seguir ganando confianza. Tiene uno de los mejores palmarés de este equipo B en categorías inferiores: dos oros (sub18 2011 y sub16 2009) y dos bronces europeos (sub20 2013 y sub20 2012). 7,9 puntos, 1,8 rebotes y 1,6 asistencias de media en Estudiantes.

Escoltas

Pau Ribas

Pau Ribas con el Barça la pasada temporada.

Si hubiese estado sano y a buen nivel, incluso podría haber sido fijo con la absoluta. Imposible olvidar su buen papel en la consecución del oro europeo de 2015. Sus buenas prestaciones en el Joventut (canterano), el Baskonia y el Valencia Basket le llevaron al Barça hace dos veranos. Tiene que olvidar cuanto antes la lesión que le ha tenido de baja casi toda la temporada. Volverá al primer plano sí o sí y será pieza importante en el futuro del equipo. Plata sub20 en el Europeo de 2007. 6,7 puntos, 1,3 rebotes y 1,3 asistencias de media en el Barça (lesionado desde octubre).

Aleros

Joan Sastre

Joan Sastre defendiendo a Rudy Fernández. EFE

Parte con muchas posibilidades de ser el elegido para entrar en la plantilla de cara al Eurobasket. Ha protagonizado un curso de muy buenas sensaciones en Valencia, adonde ya llegó con un buen bagaje previo en Zaragoza y Sevilla. Su recta final de temporada, sobre todo el cuarto partido de la final liguera, le hace ganar muchos puntos. Destacó en el oro europeo sub20 de 2011 y el bronce de 2010. Claro integrante futuro de la absoluta. 7,4 puntos, 1,8 rebotes y 1,8 asistencias de media en Valencia Basket.

Dani Díez

Dani Díez con Unicaja este curso. Europa Press

Mucho recorrido en las categorías inferiores de la selección (dos oros europeos sub16 y sub18 y dos bronces sub20 2012 y 2013). Ha logrado hacerse un hueco en Unicaja después de ser protagonista en San Sebastián y formarse en el Real Madrid. Invitado a la concentración de la absoluta en anteriores veranos, llegó a ser mejor joven de la ACB e incluso ha tenido workouts en Estados Unidos. Otro nombre a tener en cuenta. 5,4 puntos, 3,3 rebotes y 0,4 asistencias de media en Unicaja.

Xavi Rabaseda

Rabaseda, a la izquierda, en un partido contra el Baskonia. CB Gran Canaria

También se quedó a las puertas de participar en un gran torneo en su momento. Formado en el Barça y con pasos exitosos por Fuenlabrada, Estudiantes y Gran Canaria, las ventanas le ayudarán a hacerse un hueco como internacional. Uno de los jugadores más curtidos de la convocatoria B. Mucha y buena competencia en su puesto, eso sí. Otro palmarés brillante en categorías inferiores: oro en las Jornadas Olímpicas de la Juventud de 2005 y cuatro bronces europeos (sub20 2009, sub20 2008, sub18 2006 y sub16 2005). 4,5 puntos, 2,3 rebotes y 0,8 asistencias de media en el Gran Canaria.

Alberto Abalde

Alberto Abalde con el Joventut esta temporada.

Viene pisando fuerte en los últimos años, como demuestra su fichaje por el Valencia Basket. Su carrera en Badalona, el club de su vida hasta ahora, le ha ratificado como uno de los proyectos de futuro más interesantes de nuestro baloncesto. Tanto es así que fue invitado a la preparación olímpica del año pasado. Uno de los tapados para hacerse con la plaza número 12 para el Eurobasket. Dos platas continentales (sub20 2014 y sub20 2015) y un bronce (sub18 2013) como avales en las categorías inferiores. 10,1 puntos, 3,5 rebotes y 1,8 asistencias de media en el Joventut.

Oriol Paulí

Oriol Paulí, a la derecha, celebra una victoria. CB Gran Canaria

Apenas ha contado con minutos desde que está en el Gran Canaria. Formado en la cantera del Barça, se trata del jugador, de cualquier disciplina deportiva, que más años ha pasado en La Masía. Buenas actuaciones en categorías inferiores, llevándose la plata europea sub20 de 2014. Disputará una de las ligas de verano de la NBA dentro de unos días. Muy atlético, habrá que seguirle de cerca. 3,3 puntos, 1,7 rebotes y una asistencia de media en el Gran Canaria.

Ala-pívots

Pierre Oriola

Pierre Oriola anota sin oposición. Carlos Bernabé

Una de las sorpresas más positivas de la temporada. Los éxitos de Valencia Basket no se habrían entendido sin su aportación, a veces más en la sombra y otras a ojos de todos. Un proyecto que tenía buena pinta en Sevilla y ha acabado de explotar a orillas del Turia. Jugador muy interesante de cara a los próximos años. Fue bronce continental sub20 en 2012 y pasó por Manresa y la LEB Oro (Lleida, donde se formó, y Huesca) antes de llamar la atención de todos en la ACB. 7,7 puntos, 3,1 rebotes y 0,6 asistencias de media en Valencia Basket.

Sebas Sáiz

Sebas Sáiz en un partido con los Rebels este curso.

Su carrera en Estados Unidos, sobre todo a nivel universitario, ha sido muy meritoria. Tanto como para haberse presentado al Draft NBA de este año, aunque sin éxito (jugará las ligas de verano con los Miami Heat). Segundo reboteador, quinto taponador y quinto en dobles-dobles a nivel histórico en su universidad, Ole Miss, se le ha llegado a considerar el mejor interior europeo de la NCAA. Físico portentoso y aptitudes más que contrastadas. Acabe donde acabe, jugador a seguir de cerca. Se formó en Estudiantes y ganó una plata (2014) y un bronce europeo sub20 (2013). 15,1 puntos, 11,4 rebotes y una asistencia de media en Ole Miss Rebels.

Nacho Llovet

Nacho Llovet, a la izquierda, en un partido de esta temporada. EFE

Nuevo canterano sobresaliente del Joventut que aparece en esta selección B. Estuvo en Badalona, con capitanía incluida, hasta el verano pasado, cuando se marchó al Obradoiro. También presenta un buen historial en categorías inferiores: oro europeo sub20 en 2011, plata sub16 en 2007 y bronce sub20 en 2010. Se ha hecho un nombre entre los interiores españoles de cierto futuro, aunque parezca partir en desventaja con respecto a otros. 5,8 puntos, 3,2 rebotes y 0,7 asistencias de media en el Obradoiro.

Pívots

Ilimane Diop

Ilimane Diop en un partido con Baskonia. EFE

Ya fue de la partida en la concentración absoluta del verano pasado. Cada vez va dejando mejores sensaciones en el Baskonia. Se ha formado allí y en los clubes de la zona, con unas prestaciones bajo tablero más que aptas para dar alegrías al baloncesto nacional en un futuro no muy lejano. Posee una plata europea sub 20 (2015), un bronce sub16 (2011) y otro sub18 (2013) en su haber. 4,3 puntos, 2,8 rebotes y 0,4 asistencias de media en el Baskonia.

Rubén Guerrero

Rubén Guerrero con South Florida este curso. USF Athletic Communications

Quizá sea el jugador más desconocido del equipo nacional B. Es el otro NCAA del grupo y ha pasado tres temporadas en South Florida. Ahora le toca afrontar un año sin jugar al cambiarse de centro (Samford). Tiene una envergadura de 2,20 metros y es realmente avasallador cerca del aro. Se formó en Unicaja y su proyección apunta maneras. Plata en el Europeo sub20 de 2015 y bronce sub18 en 2013. 5,4 puntos, 5,1 rebotes y 0,7 asistencias de media en South Florida.

Víctor Arteaga

Arteaga con Estudiantes. ACB Media

Único jugador de esta lista que no ha ganado ni una sola medalla en categorías inferiores con España. Formado en el Real Madrid, con pasos por LEB Plata (Guadalajara) y LEB Oro (Lleida). Debutó en ACB con el UCAM Murcia y allí estuvo hasta que llegó a Estudiantes en octubre del año pasado. También tiene mucha envergadura (2,25 metros) y no lo ha hecho nada mal en sus minutos como estudiantil, aprovechando la lesión de su compañero Balvin. 4,7 puntos, 2,8 rebotes y 0,1 asistencias de media en Estudiantes.

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