“¡Un debut estelar!”. Estas palabras, acompañadas por la sinceridad de los números (10.2 puntos, 8.2 rebotes y 1.8 asistencias de promedio), servían a los Denver Nuggets para felicitar a Juancho Hernangómez por su concurso en la Summer League. El ala-pívot madrileño de 20 años apenas lleva un mes en Estados Unidos (contando las pruebas con diversas franquicias antes del Draft), pero ya ha enamorado a propios y extraños en la Liga de Verano de la NBA. Y no en una cualquiera, sino en la más importante: la que se celebra en Las Vegas.
Parece mentira que hayan pasado menos de 30 días desde que el comisionado Adam Silver pronunciase su nombre en decimoquinto lugar del último Draft. Pero, efectivamente, así es. El menor de la pareja de hermanos llamada a suceder a los Gasol en el baloncesto español ha llegado a USA pisando fuerte.
Tanto que el sueño de convertirse en jugador de la mejor liga del mundo es más real que nunca para Juancho a día de hoy. No es de extrañar teniendo en cuenta que el aro, la red y la pelota naranja le persiguen desde que tuvo uso de razón.
El Draft que dio pie a soñar
La familia Hernangómez Geuer siempre ha vivido por y para el baloncesto. El padre, Guillermo senior, jugó en el Real Madrid y en el Estudiantes, además de en las categorías inferiores de la selección española. La madre, 'Wonny', fue una de las jugadoras que conquistó el primer oro europeo de la selección femenina de baloncesto (Perugia '93).
Por su parte, el hijo mayor, 'Willy' (Guillermo), se formó y jugó en el Real Madrid, también en el Baloncesto Sevilla, para unir su destino a la NBA y a los New York Knicks este mismo verano. ¡Hasta la benjamina de la saga, Andrea (2000), juega al baloncesto, y bien, en la cantera del Estudiantes y en las selecciones españolas de su categoría!
Entonces, ¿cómo no iba a salir airoso también Juancho, el mediano de la saga, en el deporte de la canasta? Militó en Las Rozas, el Madrid y el Majadahonda antes de llegar al Estudiantes. Incluso sufrió una lesión de rodilla importante y pasó sin pena ni gloria por el primer equipo colegial en sus dos primeras temporadas en la élite. Sin embargo, sus logros y buen desempeño con la selección española sub18 (bronce europeo en 2013) y sub20 (platas continentales en 2014 y 2015) le auguraban un buen porvenir.
Así lo ha demostrado en un 2016 hasta ahora impecable. De hecho, podría decirse que Hernangómez fue la mejor noticia de un Estudiantes descendido deportivamente de la ACB. Tanto como para ser elegido mejor jugador joven de la competición gracias a sus 9.7 puntos, 5.7 rebotes y 0.6 asistencias por encuentro, con un 35.8% de acierto en triples. Había llegado el momento de intentar el asalto a la NBA. Ya la tenía entre ceja y ceja tras la intentona de su hermano 'Willy' en 2015 (número 35 del Draft, los Philadelphia 76ers le traspasaron a los Knicks).
De hecho, Juancho ya probó con algún que otro equipo el verano pasado, aunque la intentona estadounidense cobró realmente fuerza nada más acabar esta temporada en España. Trabajó con los Phoenix Suns, los Boston Celtics y los Denver Nuggets, los encargados en última instancia de hacerle feliz en la ceremonia del Draft. ¿Qué le otorgó esa elección número 15? Sus buenas dotes como tirador (llegó a lograr un 10 de 10 en triples en algún 'workout') y su polivalencia.
Una decisión difícil… ¿pero acertada?
La primera parte del sueño estaba cumplida: ser elegido en la lotería de las jóvenes promesas. Para que fuese más real que idílico, Juancho tenía que disputar la Liga de Verano con los Nuggets. Y, por tanto, renunciar a luchar por un puesto en la selección absoluta de cara a los Juegos Olímpicos de Río. Anteponer su futuro a nivel de clubes fue, como él mismo reconoció en Radio Marca, la decisión más difícil de su vida.
“No puedo decir que esté 100% seguro, porque decir que no a la selección y tener la oportunidad de pelear por ir a los Juegos es súper complicado. Está claro que a lo mejor no teníamos tantas posibilidades, porque hay 20 jugadores que han ido en la lista de mucho nivel. Es muy difícil ir. Es una espinita clavada y espero poder quitármela”, declaró a Planeta Basket.
“Mi prioridad ahora, después del Draft y de que los Nuggets hayan apostado por mí, es jugar la Summer League y convencer al entrenador, al General Manager y a todo el equipo de que pueden confiar en mí para la próxima temporada”, sentenció. Dicho y hecho: Juancho sería de la partida en la liga de Las Vegas, la mejor competición de verano de las tres (Orlando y Utah) organizadas por la NBA.
Y lo hizo a lo grande. Titular en los cinco partidos de Denver en el torneo, en el debut contra los Minnesota Timberwolves logró 13 puntos y 7 rebotes en 27 minutos, con victoria (82-88).
Después vino un contundente triunfo ante los Memphis Grizzlies (106-62), con 6 puntos y 6 rebotes en 18 minutos. Más tarde, su mejor actuación: un doble-doble (14 puntos y 12 rebotes en casi 34 minutos, el 'nugget' que más estuvo en la pista), aunque saldado con derrota ante los Miami Heat (92-81).
Los galones de Juancho volvieron a quedar reflejados en el cuarto encuentro, con 8 puntos y 4 rebotes en 23 minutos para certificar el pase de los Nuggets a cuartos de final (80-60 ante los Utah Jazz). Sin embargo, la aventura de Denver terminó con derrota a nivel colectivo ante los Phoenix Suns, con prórroga incluida (82-81) y una quinta posición final.
Aunque Juancho Hernangómez, una vez más, sumó un nuevo triunfo en lo personal. Además de ser el tercer novato más eficiente de la Summer League a nivel ofensivo, sumó un doble-doble (10 puntos y 12 rebotes) que le ayudó a cerrar con nota su participación en la liga. Y, de paso, a tener muchas opciones de vivir cerca de las estrellas en Estados Unidos. A la vez que su hermano 'Willy'. Haciendo historia.